Brightline se esfuerza por llegar a tiempo para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028
Brightline West prevé inaugurar su línea ferroviaria de alta velocidad entre Las Vegas y el sur de California para cuando comiencen los Juegos Olímpicos de 2028 en Los Ángeles.
El director ejecutivo de Brightline, Mike Reininger, señaló que la empresa está preparada para poner la primera piedra de este proyecto de 12 mil millones de dólares a finales de año, a la espera de la aprobación de los organismos reguladores y de la obtención de una subvención federal que Brightline solicitó el mes pasado. De este modo, el sistema estaría listo para acoger a los posibles asistentes a los Juegos Olímpicos que se alojen en Las Vegas y realicen el trayecto de dos horas y 50 minutos en tren hasta Los Ángeles.
Ese es el escenario soñado para el arranque de Brightline West.
“Piensa en la idea de que los Juegos Olímpicos de Los Ángeles tengan sedes compartidas y habitaciones de hotel compartidas entre el área metropolitana de Los Ángeles y el área metropolitana de Las Vegas”, dijo Reininger durante la Conferencia sobre el Tren de Alta Velocidad de Estados Unidos celebrada la semana pasada en Washington D.C. “Imagínate ver un partido en Allegiant Stadium y subirte a un tren e ir a ver otro acontecimiento en el sur de California, el mismo día. Será un evento extraordinario”.
Las obras de la ruta ferroviaria de 218 millas entre Las Vegas y Rancho Cucamonga, California podrían empezar ya a finales de año. Desde allí, los viajeros podrían continuar hasta el centro de Los Ángeles a través del sistema ferroviario Metrolink, en el sur de California.
Serán necesarios unos 18 meses de trabajos a lo largo del trazado del sistema antes de que los equipos empiecen a tender las vías.
Para cumplir el plazo de las Olimpiadas, se planea tender una milla de vía al día durante 270 días. Según Keith Tarkalson, director de la zona de los estados montañosos de la empresa de construcción civil Stacy and Witbeck Inc, el total de vías que se van a tender es de 270 millas, debido a la doble vía que necesitará el sistema.
“Cuando escuché inicialmente el calendario de un proyecto de construcción de cuatro años tendrá 220 millas de ruta me sorprendí ‘whoa”, dijo Tarkalson. “Cuando lo reduces todo… Básicamente nos da un año para construir la vía”.
La zona de operaciones, a medida que avance el proyecto, abarcará hasta 15 millas de longitud a medida que se vayan tendiendo tramos de la vía. En total, se usarán 70 mil toneladas de rieles, 2.4 millones de toneladas de balasto y 750 mil traviesas en la construcción de la vía.
Brightline y el Departamento de Transporte de Nevada solicitaron 3,750 millones de dólares de fondos federales que se usarían para sufragar los 12 mil millones del costo de construcción del sistema ferroviario.
“Esto representa el 30 por ciento de los 12 mil millones del proyecto”, dijo Reininger. “El otro 70 por ciento del proyecto será inversión privada de nuestra empresa. …Es el único proyecto totalmente listo para ser ejecutado a corto plazo en Estados Unidos”.
La solicitud de subvención era de 4,500 páginas, en las que se detallaban todos los aspectos del proyecto, incluidos los posibles problemas y sus soluciones, según Reininger. Todo el trabajo que conllevaría el proyecto condujo al precio de 3,750 millones de dólares, con la esperanza de conseguir la solicitud completa.
“Si quieres todos los adornos del árbol de Navidad, tienes que estar preparado para financiar la totalidad de la operación”, dijo Reininger.
El resto del costo de construcción del sistema se sufragaría mediante una combinación de bonos de actividad privada en Nevada y California y capital privado.
El tramo previsto de Brightline West será un sistema de tres estaciones, con estaciones de pasajeros en Las Vegas, Victorville y Rancho Cucamonga.
“Hemos adquirido terrenos en todas las estaciones para todas las instalaciones necesarias para poner nuestro sistema en programa”, dijo Reininger. “La infraestructura en sí está prácticamente construida dentro de la mediana del corredor de la I-15”.
Una parte de la vía en Las Vegas discurrirá justo junto al arcén derecho de los carriles de la I-15 en dirección norte hasta la estación del sur de Nevada.
La estación de Las Vegas se construirá en una porción de terreno de 110 acres en Las Vegas Boulevard y Warm Springs Road.
“Literalmente, podrán bajarse del tren, salir a una plaza pública y acceder a todas las virtudes que ofrece el metroplex de Las Vegas”, dijo Reininger.
Los viajeros podrán llegar a California desde Rancho Cucamonga a través de Metrolink en unos 50 minutos. Desde la estación de Rancho Cucamonga hay ocho paradas hasta Union Station, en el centro de Los Ángeles.
Brightline está trabajando con Metrolink para coordinar los horarios y garantizar que los pasajeros puedan viajar sin problemas entre los dos proveedores ferroviarios.
De este modo, las horas de llegada de los trenes a Rancho Cucamonga coincidirán con las horas de salida de los trenes “para que pueda haber una conexión rápida”, dijo Reininger. “Es probable que ocupemos espacio en Union Station para operar un servicio de pasajeros. …probablemente recojamos las maletas de la gente en Union Station y las recojamos de nuevo en Las Vegas y viceversa”.
