Empleados del CCSD pueden dejar de usar la aplicación de detección COVID
El Distrito Escolar del Condado Clark ya no exige a los empleados que rellenen el cuestionario de síntomas diarios COVID-19 antes de presentarse a trabajar.
El cambio entró en vigor el lunes, según un mensaje del distrito a los empleados.
Durante más de un año, desde que se reanudaron las clases presenciales en la primavera de 2021 en medio de la pandemia, los aproximadamente 42 mil empleados del distrito debían usar una aplicación de Salud Móvil Emocha para responder a una serie de preguntas con el fin de ser autorizados a acudir al trabajo.
Ahora, ya no se usa.
“Los protocolos actuales, sin Emocha Health, mantienen y cumplen las expectativas de (el Distrito de Salud del Sur de Nevada) y del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Nevada para los esfuerzos de mitigación contra el COVID-19 y todas las demás enfermedades transmisibles”, según el mensaje del distrito.
La decisión se produce cuando el distrito ha relajado recientemente otros requisitos del COVID-19. Por ejemplo, ya no exige que los alumnos y empleados entren en cuarentena tras la exposición al coronavirus, decisión tomada en agosto tras la actualización de las directrices de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades.
Un par de sindicatos de empleados dijeron el miércoles al Las Vegas Review-Journal que apoyan la decisión de dejar de usar Emocha.
La Asociación de Educación del Condado Clark dijo que la decisión es “resultado de los bajos índices de transmisión del virus que ya no requieren el seguimiento diario de los empleados en todo el distrito”.
“Apoyamos esta acción del CCSD y si la tasa de transmisión aumenta hasta niveles inaceptables según las orientaciones del Distrito de Salud del Sur de Nevada, el CCSD tomará las medidas necesarias para volver a monitorear diariamente a todo el personal”, dijo el sindicato de profesores en un comunicado.
La transmisión comunitaria del COVID-19 en el Condado Clark es actualmente baja, según los CDC.
Jeff Horn, director ejecutivo de la Asociación de Administradores Escolares y Empleados Técnico-Profesionales del Condado Clark (CCASAPE), escribió por correo electrónico “Dado que Nevada sigue experimentando bajas tasas de infección, la CCASAPE se alegra de que el Distrito tome medidas para suspender requisitos que actualmente no son necesarios. El personal de las escuelas tendrá ahora más tiempo para centrarse en cuestiones urgentes como el rendimiento de los alumnos”.
Los empleados del distrito escolar deben seguir monitoreando por sí mismos los síntomas del COVID-19 y reportar los resultados positivos de las pruebas a una fila telefónica de salud para empleados, dice el mensaje del distrito.
También se les informará a través de su correo electrónico del trabajo si se les identifica como un contacto cercano con alguien que dé positivo, según el mensaje.
Y el distrito sigue operando sitios de pruebas de COVID-19 para empleados y estudiantes.
El distrito utilizó dinero federal de ayuda contra el coronavirus para contratar a Emocha Mobile Health, lo que incluye aproximadamente 1.3 millones de dólares para un año que comienza a mediados de febrero de 2021 y unos 2.8 millones de dólares para un periodo de proyecto previsto que figura como este año natural, según los materiales de la reunión del Consejo Escolar del Condado Clark en internet.
Cuando los empleados usaban la aplicación de teléfono, respondían a una serie de preguntas sobre si estaban experimentando los síntomas del COVID-19. En función de sus respuestas, se les entregaba un distintivo digital codificado por colores.
Si recibían un distintivo amarillo, tenían que llamar a la línea telefónica de salud de los empleados y enfrentarse a medidas adicionales, como la obligación de someterse a pruebas o quedarse en casa.
El pasado curso escolar, algunos empleados expresaron su preocupación, diciendo que perdían innecesariamente días de trabajo y luego esperaban durante horas al teléfono intentando obtener la autorización para volver a trabajar, incluso después de dar negativo en las pruebas de COVID-19.
Y en medio de una escasez de personal -incluyendo la falta de suficientes profesores sustitutos- algunos también le dijeron al Review-Journal que estaban siendo presionados por los administradores de la escuela para mentir en la encuesta.
