OJ Simpson fue incinerado y no habrá funeral público, dice abogado de Las Vegas
LAS VEGAS - La exestrella del fútbol americano y famoso acusado de homicidio O.J. Simpson fue incinerado el miércoles, dijo el abogado que maneja su patrimonio tras su muerte la semana pasada en su casa de Las Vegas a los 76 años.
El abogado Malcolm LaVergne dijo a The Associated Press que él estuvo presente, junto con otras personas no especificadas, en el acto celebrado por la mañana en Palm Mortuary, en el centro de Las Vegas.
“Puedo verificar que O.J. Simpson fue incinerado hoy”, dijo LaVergne poco después. “Otras personas estuvieron presentes, pero no voy a revelar quiénes”. Declinó dar detalles del proceso.
Un mensaje telefónico para Palm Mortuary no fue respondido de inmediato.
LaVergne está gestionando el fideicomiso y el patrimonio de Simpson en el tribunal estatal de Nevada. Dijo que las cenizas de Simpson serán entregadas a los hijos de Simpson “para que hagan lo que quieran, de acuerdo con los deseos de su padre”.
No está previsto ningún funeral público, dijo el abogado.
Simpson murió el 10 de abril después de que se le diagnosticara el año pasado un cáncer de próstata.
LaVergne dijo en una entrevista el martes que visitó a Simpson justo antes de Pascua en la casa del club campestre que Simpson alquiló al suroeste del Strip de Las Vegas, y describió a Simpson como “despierto, alerta y relajado” sentado en un sofá, bebiendo una cerveza y “simplemente poniéndose al día con las noticias”.
El 5 de abril, un médico dijo a LaVergne que Simpson estaba “en transición”, como lo describió el abogado, y la semana pasada Simpson solo tuvo fuerzas para pedir agua y elegir ver un torneo de golf por televisión en lugar de un partido de tenis.
Una publicación del 11 de abril de la familia de Simpson en X, antes Twitter, decía que Simpson “sucumbió a su batalla contra el cáncer”. Pedía en su nombre “privacidad y gracia”.
“Hay que recordar que han compartido a O.J. con el mundo toda su vida”, dijo LaVergne el martes sobre los hijos adultos sobrevivientes de Simpson de su primer matrimonio –Arnelle Simpson, ahora de 55 años, y Jason Simpson, de 53– y los hijos que Simpson tuvo con su exesposa Nicole Brown Simpson antes de que fuera asesinada en 1994: Sydney Simpson, de 38 años, y Justin Simpson, de 35 años. “Y tienen la carga añadida de que es una de las personas más famosas del planeta, y que polariza y está rodeado de polémica”.
Los hijos de Simpson son los únicos beneficiarios de su patrimonio, dijo LaVergne, añadiendo que ahora está trabajando para determinar el valor de los activos de Simpson. Dijo el martes que Simpson no poseía ninguna casa en los estados en los que había vivido, entre ellos Nevada, California y Florida.
Simpson fue una estrella del fútbol americano que batió récords durante 11 años como running back en la NFL y se convirtió en actor de cine, presentador deportivo y publicista televisivo antes de ser absuelto de los cargos penales por los que se le acusaba de matar a puñaladas a su exesposa y al amigo de esta, Ronald Goldman, en 1994 en Los Ángeles. El proceso celebrado en California en 1996 se conoció como el “juicio del siglo”.
Simpson fue declarado responsable de las muertes en 1997 por otro jurado de un tribunal civil de California y se le ordenó pagar a las familias de la exesposa asesinada de Simpson y de Goldman una indemnización de 33.5 millones de dólares. LaVergne reconoció que Simpson murió sin pagar la mayor parte de esa sentencia.
En Las Vegas, Simpson ingresó en prisión en 2008 para cumplir nueve años tras ser declarado culpable de robo a mano armada en un encuentro en 2007 en un casino-hotel con dos vendedores de objetos de colección.
Salió de prisión en octubre de 2017 y vivió un estilo de vida de golf y club campestre en Las Vegas, a veces ofreciendo mensajes en las redes sociales sobre deportes y golf. Su último mensaje fue el 11 de febrero, cuando se jugaba en Las Vegas el Super Bowl del campeonato de la NFL. No asistió al partido.
El abogado David Cook, que representa a la familia Goldman, dijo el martes que creía que la sentencia civil adeudada hoy, incluidos los intereses no pagados, es de más de 114 millones de dólares. LaVergne creía que la cantidad era de más de 200 millones de dólares, y que los bienes de Simpson no llegarían a esa cifra.
LaVergne dijo que tiene la intención de invitar a los representantes de las familias Goldman y Brown a “ver mis deberes” con el patrimonio de Simpson, “con la advertencia de que si creen que hay algo más por ahí … van a tener que usar sus propios abogados, sus propios recursos, para tratar de perseguir esa olla de oro”.
