Demanda: Wynn Resorts sigue tomando represalias contra una acusadora de Steve Wynn
Una masajista de Wynn Resorts presentó el jueves una demanda en la que alega que la empresa sigue creando un ambiente de trabajo hostil y tomando represalias contra ella, años después de que el entonces director ejecutivo Steve Wynn la obligara a actuar como “sirvienta sexual de guardia”.
“La demandante fue sometida a violaciones y agresiones sexuales a partir de 2012 y hasta 2018 por parte del señor Wynn o de un invitado VIP y se le exigió que permaneciera atenta para la satisfacción sexual del señor Wynn”, señala la demanda. “Esto dejó a la demandante sin poder defenderse o escapar y, en muchos casos, exhibiendo síntomas del síndrome de Estocolmo”.
Los abogados Robert Eglet, Tracy Eglet y Danielle Miller presentaron la demanda el jueves en el Tribunal de Distrito del Condado Clark en nombre de Brenna Schrader, que también es una demandante nombrada en una demanda federal colectiva en curso presentada en 2019 contra Steve Wynn y Wynn Resorts Ltd.
La demanda es la más reciente acción relacionada con las acusaciones de mala conducta sexual que llevaron a la renuncia de Steve Wynn de la compañía que fundó y sometieron a Wynn Resorts a multas récord de los reguladores del juego.
Además de las acusaciones de agresión sexual, la demanda del jueves alega que Schrader “sigue soportando un trato hostil y de represalia, así como una conducta sexualmente hostil para las empleadas hasta el día de hoy”.
La demanda también acusa al exejecutivo de Wynn Resorts, Maurice Wooden, de intentar encubrir la mala conducta sexual de Wynn y de publicar memorandos en los que se les pedía a los empleados a apoyar a Wynn, lo que “creó una atmósfera en la que muchos empleados empezaron a llamar ‘zorras’ y ‘prostitutas’ a las demandantes del señor Wynn”.
Un abogado que representa a Wooden declinó hacer comentarios sobre la demanda.
Según la demanda, Schrader se ve obligada a trabajar junto a un empleado que la llamaba prostituta y que pedía el despido de las trabajadoras que alegan que Wynn las victimizaba. Schrader también se ve obligada a tener un casillero junto al mismo compañero de trabajo, según la demanda.
“Los demandados están intentando crear una atmósfera tan hostil que la demandante se vea obligada a dimitir”, afirma la demanda.
Steve Wynn ha dicho en repetidas ocasiones que nunca ha acosado ni agredido sexualmente a nadie. Los representantes de Steve Wynn y Wynn Las Vegas no respondieron a las solicitudes de comentarios el jueves por la noche.
Según la demanda, Schrader comenzó a trabajar en Wynn Las Vegas en 2010 y fue “condicionada” a creer que la política de la empresa era no decirle nunca que no al señor Wynn o a los “invitados VIP”. En 2012, a Schrader le dijeron que diera un masaje a Wynn y lo encontró “completamente expuesto”. Durante el masaje, le ordenó que le hiciera un acto sexual.
“A partir de entonces, la demandante se convirtió en una sirvienta sexual de guardia las 24 horas del día, los siete días de la semana”, dice la demanda.
La demanda también alega que, en 2015, Wynn le ordenó a Schrader que le hiciera un acto sexual que “la hizo entrar en un estado de shock que le provocó más traumas psicológicos”.
Schrader también alega que fue agredida sexualmente en múltiples ocasiones entre 2016 y 2018 por un “invitado VIP”, que le dijo que “el señor Wynn la había recomendado como masajista”, señala la demanda.
La demanda afirma que Schrader y otras empleadas fueron sometidas a tráfico sexual que provocó la pérdida de sus salarios y llevó a Schrader a ausentarse del trabajo durante días para hacerse pruebas de enfermedades de transmisión sexual.
“Los acusados son personas culpables asociadas a una empresa que se dedica a la prostitución, el proxenetismo, las agresiones sexuales y la servidumbre involuntaria, lo que constituye una asociación ilícita”, afirma la demanda.
Steve Wynn renunció como presidente y director ejecutivo de Wynn Resorts en febrero de 2018, después de que Wall Street Journal y Las Vegas Review-Journal reportaran acusaciones de acoso sexual en su contra.
En 2019, la Comisión del Juego de Nevada multó a Wynn Resorts con 20 millones de dólares por no investigar las denuncias de mala conducta sexual presentadas contra Steve Wynn. Al año siguiente, la Comisión de Juego de Massachusetts multó a la compañía con 35 millones de dólares y al entonces director ejecutivo Matt Maddox con 500 mil dólares por no revelar las acusaciones de mala conducta sexual contra Wynn cuando la compañía solicitó una licencia para Encore Boston Harbor en Everett.
Schrader alega en la demanda del jueves que se convirtió en una “prisionera psicológica y maltratada” mientras trabajaba en Wynn Las Vegas. Después de que Steve Wynn dejara la compañía, alega Schrader, fue sometida a “amenazas ominosas por quejarse” y fue intimidada para evitar que presentara una demanda.
“No fue hasta alrededor de abril de 2019, cuando la demandante buscó la ayuda de un terapeuta, que pudo comenzar a aceptar su situación”, afirma la demanda. “Sin embargo, incluso con la terapia, la demandante sigue teniendo dificultades para interactuar con los hombres y es muy desconfiada con ellos”.
