Sigue aumentando la depresión juvenil
“Es la edad de la punzada”, “Es que están en la pubertad”, “Es cuando se ponen rebeldes”, “Solo están haciendo berrinche”; son algunas de las excusas que muchos padres ponen al cambio de comportamiento repentino de los adolescentes y jóvenes. Desafortunadamente no siempre es solo el cambio de niño a adolescentes y jóvenes. Actualmente existen muchos casos de depresión entre jóvenes que en muchas ocasiones pudieran terminar en intento de suicidios o fatalidades.
Según un reciente estudio del Centro Médico de la Universidad de Columbia, muchos jóvenes y adolescentes con depresión no reciben tratamiento para sus síntomas y se subraya la necesidad de aumentar la atención a esa problemática.
En entrevista con El Tiempo, la terapeuta de jóvenes y adolescentes, Fernanda Mitchell, de Grand Desert Psychiatric Services, indicó que “cuando se trata de la depresión de jóvenes y adolescentes existe mucha información no fidedigna, ya que los niños y adolescentes de las edades de 12 hasta los 18 años también sufren de ella con mayor frecuencia”.
La terapeuta –agregó- que existen un sinfín de razones que pueden causar la depresión durante esas edades; como por ejemplo divorcio o separación de los padres, estrés por las calificaciones escolares, una ruptura amorosa, separación de un ser amado, o simplemente los cambios bruscos de la vida que se enfrentan en lo cotidiano.
De acuerdo con Mitchell, es de suma importancia prestar atención para ver si su hijo está pasando por depresión. Y poner atención a las señales más comunes: el aislamiento, pérdida de apetito, estado de ánimo irritable, podría incluso estar en conflicto con familiares o amigos, sensibilidad extrema, una actitud en donde nada le causa entusiasmo, falta de emoción a lo que normalmente le agrada hacer, entre otras.
Si nota una falta de comunicación con sus padres, hermanos o amigos, entonces es el momento de pedir ayuda de un profesional de la salud mental.
La terapeuta también explicó que las razones de depresión para un adolescente pueden ser muy diferentes a las de un adulto. Pero no por ello son menos graves. Es decir, muchas veces los adultos tienden a minimizar las razones por las cuales un joven o un adolescente podría sufrir de depresión y esto podría ser un grave error.
Un joven no está viviendo las mismas circunstancias de un adulto, por lo que jamás se debe minimizar la razón de una depresión en un joven o adolescente.
“Como padre lo primero que deben hacer si su hijo/a esta deprimido es, número uno, no juzgar; intentar acercarse, pedir ayuda a un profesional de la salud mental, y estar abierto a las opciones que su hijo/a pudiera pedirle a su padre o madre”, enfatizó Mitchell.
Es importante hacerle sentir a su hijo/a que no está solo, escucharlo no juzgarlo y no decirle “en mis tiempos” tampoco hacer ningún tipo de comparaciones. La pandemia también pudiera influir en la depresión de adolescentes/jóvenes debido al aislamiento, e incluso la incertidumbre de que está pasando, estos factores afectan a todos en general.
Existen varios tipos de depresión que pueden afectar a los jóvenes y adolescentes el más común es el estado depresivo que puede ser desde unos días a semanas, o también el trastorno depresivo donde ya está diagnosticado un trastorno.
Existe “distimia”, conocido como Trastorno Depresivo Persistente, que es lo más común entre adolescentes, este puede durar desde dos años hasta décadas, y claro es necesario la intervención de profesionales comúnmente también con ayuda de medicamentos.
“Un profesional de la salud mental es quien puede determinar si un joven sufre de depresión, le pido a los padres -y a la comunidad- que observen constantemente a sus hijos, y que recuerden que los jóvenes viven en una época, costumbre y hasta tecnología muy distinta a nuestros tiempos y si necesitan ayuda psicológica pedirla de inmediato”, concluyó la terapeuta.
