Nevada planea distribuir 600,000 pruebas caseras de COVID-19
Nevada espera recibir casi 600,000 pruebas rápidas de COVID-19 del gobierno federal para dárselas a los residentes y que puedan averiguar (en casa) si tienen el coronavirus en lugar de abarrotar las salas de emergencia de los hospitales, en medio de la rápida propagación de la variante ómicron, dijo el jueves 13 de enero de 2022 el gobernador Steve Sisolak.
“No tenemos intención de seguir adelante con más medidas de mitigación”, dijo el gobernador a los periodistas mientras describía los esfuerzos de los funcionarios estatales de salud y manejo de emergencias para romper una ola que tiene casi el 35% de las personas analizadas (para el coronavirus) en el área de Las Vegas que muestra resultados positivos.
Sisolak dijo que las pruebas, las vacunas y el uso de cubrebocas en interiores, son herramientas importantes para combatir la propagación del coronavirus.
Reconoció que los recursos que se habían dirigido al rastreo de contagios públicos se han desviado para manejar una gran cantidad de casos nuevos.
Los hospitales y clínicas en todo el estado han tenido problemas para lidiar con la escasez de personal causada por trabajadores enfermos, mientras que la creciente demanda de pruebas de COVID-19 ha llevado a las personas a esperar horas en filas en los centros de pruebas de autoservicio.
“Si te sientes enfermo, si crees que tienes síntomas, hazte una prueba. Ponte en la fila y espera”, dijo Sisolak. “Pero una vez que tengamos estas pruebas, aliviará las filas en algunos de los sitios de prueba”.
En Nevada, la variante ómicron ahora representa alrededor del 90% de los casos de coronavirus recientemente anunciados, según el Laboratorio de Salud Pública del Estado de Nevada.
Los funcionarios de salud dicen que la variante ómicron se propaga más fácilmente que otras del coronavirus e infecta más fácilmente a quienes han sido vacunados o se enfermaron con versiones anteriores del virus. Pero los primeros estudios muestran que ómicron tiene menos probabilidades de causar una enfermedad grave que la variante delta, y la vacunación y un refuerzo ofrecen una fuerte protección contra enfermedades graves, hospitalización y muerte.
Sisolak y Julia Peek, administradora adjunta de salud del estado, dijeron que esperan que el pedido del estado de alrededor de 588,000 pruebas caseras Flexflow COVID-19 llegue a Nevada a fines de mes. El costo, alrededor de $5 millones, provendrá de los fondos federales de ayuda por el coronavirus.
Alrededor de 90 distritos de salud, bibliotecas, departamentos de bomberos y otras organizaciones comunitarias distribuirán las pruebas, dijo el gobernador. Dijo que esperaba que la demanda fuera alta y que los funcionarios tienen la intención de obtener más pruebas cuando puedan.
Peek dijo que el estado tiene como objetivo proporcionar los recursos que las personas necesitan “para mantenerse saludable a usted y a su familia, a sus hijos en la escuela, a las camas de hospital abiertas y a nuestra economía en crecimiento”.
Los resultados de las pruebas realizadas en el hogar no se convertirán en parte del programa estatal de informes de casos de coronavirus, pero Peek calificó las pruebas como una “herramienta vital”.
“Recordamos a aquellos con un resultado positivo que se auto aíslen para limitar la propagación entre sus familiares, compañeros de trabajo y amigos”, dijo. “También deberían informar a sus propios contactos cercanos de la exposición”.
