La ola de verano de COVID golpea a los nevadenses más jóvenes y sanos
agosto 23, 2021 - 9:49 am
Los nevadenses más jóvenes son la cara del actual aumento de hospitalizaciones y muertes por COVID-19.
Las personas de 25 a 49 años de edad representaron el 15 por ciento de las muertes entre el 1º de junio y el 15 de agosto, casi el doble de su participación del ocho por ciento en toda la pandemia. En el mismo lapso, casi un tercio de las muertes se produjeron en personas de 50 a 64 años, en comparación con solo una quinta parte de todas las muertes desde marzo de 2020, según muestran los datos de salud del estado.
Las personas de 65 años o más están representando una parte menor de las muertes en esta ola más reciente de la pandemia. Los expertos locales en salud dicen que la edad ya no es el indicador más fuerte para saber si una persona infectada será hospitalizada o morirá.
En cambio, lo es si la persona está vacunada o no.
“La edad promedio de un paciente con COVID que requiere ingreso en el hospital se ha reducido en casi una década”, de 60 a 50 años, señaló el doctor Shadaba Asad, director médico de enfermedades infecciosas del University Medical Center (UMC). “Se trata de una población de pacientes más jóvenes, y en gran medida son pacientes no vacunados”.
Mientras la variante Delta, altamente contagiosa, se extiende por Nevada, se han anunciado más de 360 nuevas muertes en todo el estado en agosto. Ya es el quinto mes más mortífero de la pandemia en el estado, y podría terminar como el cuarto más mortífero si la tendencia se mantiene.
La cifra de muertos en el Condado Clark superó oficialmente las cinco mil muertes el miércoles. Más de 600 de esas muertes se han anunciado desde el 1º de junio, más o menos cuando comenzó el aumento más reciente.
El epidemiólogo de la UNLV, Brian Labus, agregó que, aunque el número promedio de nuevos casos se ha estabilizado en los últimos días, puede haber un desfase de semanas en la tendencia de las muertes notificadas.
“Se necesita tiempo para que (un paciente) progrese hasta el punto de necesitar ser hospitalizado”, explicó. “Una vez hospitalizados, la gente no muere inmediatamente”.
El Distrito de Salud del Sur de Nevada informa que es demasiado pronto para determinar cuántos de los hospitalizados o fallecidos desde el 1º de junio tenían condiciones médicas subyacentes.
Esto se debe a que los investigadores de la enfermedad deben ponerse en contacto con los pacientes infectados o sus familiares para preguntarles sobre su historial médico, y luego esas entrevistas deben ser verificadas a través de los registros de salud. Con un promedio de más de mil nuevos casos identificados cada día en el estado, esto lleva tiempo.
Pero Asad dijo que ha notado un aumento de pacientes por lo demás sanos en el UMC y otros hospitales del Valle de Las Vegas.
“Ahora vemos a personas muy jóvenes de 30 años. … Tienen un (índice de masa corporal) perfectamente normal y ningún problema médico”, dijo. “En cierto modo, da mucho miedo”.
Muere joven de 23 años de COVID
La familia de Micheal Limon declaró que era un joven de 23 años por lo demás sano cuando dio positivo a la prueba de COVID-19 este mes. No se había vacunado.
Sin embargo, al cabo de unos días, este residente de Las Vegas normalmente lleno de energía, comenzó con dificultad para respirar. Ingresó al Desert Springs Hospital Medical Center el 9 de agosto.
Murió el 13 de agosto, apenas unas horas después de que se le colocara un respirador, dijo Dylan Limon, su hermano menor.
“Pensamos que lo superaría, y fue un shock total que no lo hiciera”, dijo Dylan Limon.
Todos los familiares estaban vacunados, excepto Micheal, dijeron los familiares. Están recaudando dinero a través de una campaña de GoFundMe para pagar sus cuentas médicas y los gastos del funeral.
Desde que comenzó la pandemia, han muerto más de 400 adultos del condado menores de 50 años. Cinco niños han muerto, entre ellos uno menor de cinco años.
Labus dijo que la sombría realidad contradice las ideas ampliamente aceptadas al principio de la pandemia, según las cuales el COVID-19 suponía poco riesgo para las personas más jóvenes y sanas.
“Aunque el riesgo es menor entre los más jóvenes, no es una situación de riesgo cero”, dijo. “La gente más joven sigue muriendo de esto cada semana”.
El 29 de julio, Mike Freedy, de 39 años y padre de cinco hijos, murió de COVID-19 en un hospital de la zona. Había decidido esperar un año para vacunarse. Desde su cama de hospital, días antes de morir, el hombre de Las Vegas envió un mensaje de texto a su prometida: “Debí haberme puesto la maldita vacuna”.
Desciende la tasa de mortalidad de los latinos
Los expertos locales en salud dijeron que los más jóvenes representan ahora una mayor proporción de muertes porque tienen menores tasas de vacunación.
Casi el 80 por ciento de los residentes del Condado Clark de 70 años o más habían completado el proceso de vacunación hasta el viernes. Ese porcentaje se redujo con cada grupo de edad, y menos de la mitad de las personas entre 20 y 39 años estaban completamente vacunadas.
Del mismo modo, los residentes latinos han visto caer su cuota de muertes desde el 27 por ciento en toda la pandemia a solo el 18 por ciento de la ola más reciente. El grupo demográfico mostró un salto en las nuevas vacunaciones en los últimos meses.
A partir de agosto, los latinos constituyen el segundo grupo racial y étnico más vacunado en el Condado Clark. El grupo líder, los asiático-americanos, también vio su cuota de muertes caer.
“Creo que está directamente relacionado con el aumento de la vacunación”, dijo Kimberly Hertin, supervisora de vigilancia de enfermedades del Distrito de Salud del Sur de Nevada.
Casos de infección estando vacunados
Hertin señaló que, aunque se han notificado miles de casos de infección pese a estar vacunados en el Condado Clark, la hospitalización y la muerte siguen siendo raras entre los totalmente vacunados.
Las personas totalmente vacunadas representan menos del cuatro por ciento de todos los residentes del Condado Clark hospitalizados con COVID-19 este año, según los últimos datos publicados el 19 de agosto. Representan menos del cuatro por ciento de los que han muerto.
Más de 960 mil residentes del Condado Clark están completamente vacunados. De ellos, 304 han sido hospitalizados y 87 han muerto tras contraer el COVID-19, según los datos.
“Estamos hablando de un evento raro, pero la gente tiene esta percepción de que es mucho más común de lo que realmente es”, dijo Labus. “La gente piensa que la vacuna tiene poco valor porque hay casos de ruptura que se producen. Eso no es así en absoluto”.
También existe la posibilidad de que los más jóvenes participen en más actividades que los pongan en riesgo de contraer COVID-19. Eso va desde formar parte de la población activa de Nevada hasta asistir a eventos multitudinarios.
Estos comportamientos suponen un peligro aún mayor con la variante Delta en circulación, mencionó Hertin.
“El problema es simplemente el volumen de las infecciones que se están produciendo por el hecho de que es muy transmisible”, señaló. “Así que cada vez que aumenta el volumen de casos, entonces vas a tener justo detrás de eso un aumento de la hospitalización y la muerte”.