El ex-agente de policía Earl Mitchell pierde sus poderes policiales
La junta de certificación policial de Nevada revocó unánimemente los poderes policiales del ex agente de Henderson, Earl Mitchell, el miércoles por la noche en respuesta a su condena por fraude en 2019.
La investigación criminal de Mitchell comenzó con un artículo del Review-Journal en marzo de 2018, detallando miles de dólares en cheques que él mismo escribió, retiros de cajeros automáticos en casinos y el uso de una tarjeta de débito del municipio en restaurantes y para viajes. La policía emitió órdenes de inspección de la casa y oficina de Mitchell, y fue acusado de cinco delitos graves a finales de 2018.
El jefe de policía de Boulder City, Tim Shea, quien es miembro de la Comisión de Estándares y Capacitación para Oficiales de Paz, declaró en la audiencia que la conducta de Mitchell socava la confianza en los oficiales de policía.
“La gente tiene que confiar que cuando haya un problema y aparezcamos, todo saldrá bien”, señaló durante la reunión. “Cuando pasa algo malo con los que tienen placas nos quita un poco a todos”.
El abogado de Mitchell, Marc Risman, argumentó que la certificación de Mitchell debería ser suspendida por dos años en lugar de ser revocada.
“Nuestra evidencia demostrará que no se deberá imponer una pena de muerte, la pena de muerte profesional”, aseveró.
Bajo la revocación, Mitchell tendrá que esperar cinco años antes de volver a solicitar sus poderes policiales.
Imponen suspensión
Michael Jensen, un abogado de la oficina del fiscal general de Nevada, argumentó que otros oficiales de Nevada perdieron sus poderes policiales por el uso indebido de tarjetas de crédito del gobierno por un monto de unos pocos cientos de dólares, en contraste con los 82 mil dólares que Mitchell se apropió indebidamente.
“Se ha descalificado a sí mismo para actuar como oficial de paz en el futuro”, afirmó.
Durante la audiencia, Ronald Averett, ex teniente del Departamento de Policía de Henderson que trabajó con Mitchell cuando era oficial, testificó a su favor, alegando que confiaba en Mitchell y en su trabajo.
“No es una persona peligrosa”, enunció.
Pero bajo el interrogatorio de Jensen, Averett admitió que una condena por fraude debería descalificar a una persona para servir como oficial de policía.
“Si ellos no pueden tener esa confianza en nosotros, no podemos desempeñarnos adecuadamente”, describió.
Mitchell fue acusado de cuatro delitos de robo y uno de apropiación fraudulenta de bienes por un funcionario público en 2018.
Pero en julio de 2019 llegó a un acuerdo de culpabilidad utilizando una declaración Alford en la que no admitió ningún delito, pero reconoció que los fiscales probablemente podrían traducir su caso a un grave delito menor de transferencias fraudulentas. Aceptó devolver más de 80 mil dólares que los fiscales sostienen que robó del condado mientras era agente.
Las reglas del estado requieren que la junta de P.O.S.T. revoque la certificación policial de las personas condenadas por un delito grave, pero la revocación de la certificación después de condenas por delitos menores graves es a discreción de la junta.
El trabajo de la policía
Mitchell no dejó de trabajar como policía después de su acuerdo con el fiscal.
En agosto de 2019, Mitchell fue a trabajar como policía en el festival anual Burning Man en Black Rock City, y el alguacil del Condado Pershing, Jerry Allen, indicó que solo se enteró de los problemas legales de Mitchell después del evento.
“Estoy muy molesto porque no me enteré hasta el final del festival”, reveló en una entrevista telefónica en octubre. “Ahora, todo lo que tocó está contaminado”.
A Mitchell se le pagaron seis mil 527.50 dólares en agosto y septiembre por trabajar como policía en Black Rock City, y supervisó dos delitos graves: una agresión sexual y una agresión a un policía, según el fiscal de distrito del Condado Pershing, R. Bryce Shields. Shields indicó que todavía planea seguir los casos de Mitchell porque hay otros oficiales involucrados en muchos de los arrestos y la policía a menudo filma con sus cámaras corporales.
Mitchell, quien cuenta con una serie de problemas financieros, incluyendo un gravamen de 165 mil dólares del Servicio de Ingresos Internos (IRS, por su sigla en inglés) presentado en la oficina del registro del condado, ha estado trabajando en Burning Man desde 2016. Ha ganado más de 20 mil dólares por la labor, según los registros.
Investigación del RJ
El análisis de los estados de cuenta bancarios de los agentes de policía realizado por el Review-Journal en 2018, reveló que aproximadamente 151 mil dólares que Mitchell solicitó para pago y los gastos de sus agentes en 2016 y 2017 no se pagaron a los agentes. En su lugar, Mitchell se escribió a sí mismo unos 72 mil dólares en cheques de la cuenta del municipio, que estaba llena de honorarios por la entrega de documentos legales y desalojos.
También retiró aproximadamente nueve mil dólares en cajeros automáticos, incluidos los de casinos y bares de video póquer, y cobró miles más en restaurantes y por viajes con tarjeta de débito.
La policía determinó que Mitchell utilizó 82 mil dólares de los fondos del condado para uso personal inflando la paga y los gastos de los agentes y embolsándose la diferencia, según muestran los registros.
“Los medios de comunicación hicieron público el asunto y él se detuvo”, le aseguró el fiscal, Jay P. Raman, al juez Douglas Herndon, después de que la acusación fuera desestimada en 2018.
Mitchell, quien había servido como agente de policía desde 1995, abandonó su candidatura a la reelección en 2018 justo antes de que se publicara en línea el artículo del Review-Journal.
