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Sisolak dice que el hombre condenado por el atentado en Luxor se fugó este fin de semana

Un hombre condenado por asesinato en el atentado del Luxor en 2007 se fugó del Southern Desert Correctional Center, cerca de Indian Springs, según informaron el martes las autoridades.

El gobernador Steve Sisolak emitió posteriormente un comunicado en el que decía que se había enterado de que el preso estaba desaparecido desde principios del fin de semana.

“Esto es inaceptable”, dijo Sisolak en el comunicado.

Según el comunicado, Sisolak ordenó al Departamento de Correccionales de Nevada (NDOC) que lleve a cabo una investigación exhaustiva sobre la fuga “lo antes posible”.

“No se puede permitir este tipo de fallo de seguridad y los responsables tendrán que rendir cuentas”, dijo.

Porfirio Duarte-Herrera, de 42 años, cumplía cadena perpetua tras haber sido condenado en 2010 por construir y colocar una bomba casera encima de un auto en el estacionamiento del Luxor, matando a un trabajador del puesto de perritos calientes del casino.

Los funcionarios del NDOC dijeron en una actualización alrededor de las 6 p.m. del martes que Duarte-Herrera estaba en paradero desconocido desde aproximadamente el viernes por la noche.

Duarte-Herrera era considerado un recluso de mediana seguridad, según un comunicado del Departamento de Correccionales de Nevada. Se reportó de su desaparición después de que los funcionarios fueran a revisarlo a las 7 a.m.

“Los procedimientos de fuga se iniciaron aproximadamente a las 8 a.m., y los equipos de búsqueda siguen en marcha”, escribieron los funcionarios en el comunicado.

Duarte-Herrera mide cinco pies y cuatro pulgadas de altura y pesa 135 libras, tiene ojos marrones y cabello castaño.

El Departamento de Policía Metropolitana fue alertado de la fuga, pero no estaba claro qué medidas se han tomado para localizar a Duarte-Herrera.

“Estamos al tanto de ello y nuestros agentes están atentos”, dijo el oficial de la Policía Metropolitana Larry Hadfield.

El amigo de Duarte-Herrera, Omar Rueda-Denvers, también fue condenado por asesinato en el atentado. Los fiscales dijeron que orquestó el atentado para hacer daño a su exnovia, Caren Chali, y a su amante, Willebaldo Dorantes Antonio, de 27 años, que murió en la explosión.

Chali, madre de la hija de Rueda-Denvers, que entonces tenía tres años, no resultó herida en el atentado.

Antonio murió después de que, sin saberlo, recogiera la bomba que estaba encima de su auto después de su turno en el Luxor.

El asesinato avivó inicialmente el temor a un posible atentado terrorista en el Strip, pero los investigadores no tardaron en centrarse en dos sospechosos.

Los fiscales solicitaron inicialmente la pena de muerte para Duarte-Herrera y Rueda-Denvers. Ambos fueron declarados culpables en 2010 de un cargo cada uno de asesinato con uso de un arma mortal y de intento de asesinato con uso de un arma mortal. Ninguno de los dos puede optar por libertad condicional.

En 2019, un juez federal concedió a Rueda-Denvers un nuevo juicio, reglamentando que no pudo interrogar a su coacusado, cuyas declaraciones incriminatorias a la policía fueron presentadas al jurado.

Rueda-Denvers se enfrentó a un nuevo juicio en 2021 y fue condenado por asesinato, intento de asesinato, posesión de un artefacto explosivo o incendiario y transporte o recepción de explosivos.

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