‘Dolor insoportable’: Sentencian a hombre por asesinato de mujer en Las Vegas
Un hombre acusado de dispararles a sus dos compañeros de cuarto en 2019, matando a una e hiriendo al otro, fue condenado el miércoles en el Tribunal de Distrito a entre 21 años y cadena perpetua en una prisión estatal.
Los familiares de la mujer asesinada, Rebekah Peters, de 31 años, pronunciaron dramáticas declaraciones de impacto de la víctima en el tribunal mientras el asesino condenado Richard Kelly, de 41 años, observaba desapasionadamente.
Kelly aceptó declararse culpable el 25 de enero de asesinato en segundo grado con arma mortal por la muerte de Peters y de intento de asesinato con arma mortal por herir a su compañero de cuarto Ian Donovan, según consta en los registros judiciales.
La madre, el padre, la tía y las hermanas de Peters hablaron, junto con Donovan, durante la audiencia de sentencia, el punto culminante del caso de asesinato de casi cuatro años, presidido por la jueza Michelle Leavitt.
“Cada día es una lucha y cada día tengo dolor en el corazón”, dijo Rachel Peters, una de las hermanas de Rebekah Peters, quien añadió que padece depresión y trastornos de ansiedad por el trauma de la muerte de su hermana.
“El dolor y la pena son tan insoportables que me han cambiado terriblemente”, dijo Cindy Peters, madre de la víctima, que sollozó con fuerza durante la audiencia.
‘Perdí a mi preciosa prima’
Donovan nunca olvidará los momentos previos al tiroteo mortal de su prima y las heridas que él mismo sufrió a manos de Kelly.
“Han sido los años más duros de mi vida. Perdí a mi preciosa prima”, dijo Donovan.
Recordó estar sentado con Peters en el patio de la casa de Kelly en la cuadra 5500 de Sundance Avenue, cerca de Bonanza Road y Christy Lane, poco antes de las 10 p.m. del 2 de abril de 2019, cuando Kelly entró por la puerta intoxicado.
“Se acercó directamente con el arma detrás de la cadera, no pude verla, se desquitó conmigo y le apuntó con esa pistola directamente a la cara”, dijo Donovan.
Dijo que se alejó corriendo para evitar que le dispararan, pero “supe que me había dado mientras corría por la puerta”.
Herido por tres balas de la Glock 19 de Kelly, Donovan encontró su teléfono celular, llamó al 911 y “mientras hablaba con ellos las primeras palabras que salieron de mi boca fueron ‘Richard Kelly me disparó’. Pensé que seguro que volvería para rematarme”.
Dijo que aún no puede creer la suerte que tuvo de que las tres balas no alcanzaran órganos vitales ni nervios.
Larga condena
Los familiares de Peters, algunos con playeras e insignias con su foto, y Donovan pidieron que Leavitt dictara sentencias por ambos delitos por separado, de modo que Kelly tuviera que cumplirlas consecutivamente en lugar de simultáneamente.
Leavitt dictó sentencias consecutivas, como parte del acuerdo de culpabilidad de Kelly: cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional a los 10 años, más un aumento de cinco a 20 años por usar un arma mortal en el asesinato de Peters y de 72 a 192 meses por el tiroteo de Donovan.
La sentencia equivale a que Kelly tenga que cumplir un mínimo de 21 años a cadena perpetua, a unos cuatro meses del máximo que podría haber recibido, según su co-abogado Frank Cofer.
El fiscal adjunto Parker Brooks, hizo un repaso de la noche de los tiroteos y afirmó que Kelly, Peters y Donovan habían estado bebiendo alcohol. Peters había rechazado los intereses románticos de Kelly y planeaba mudarse.
Comenzó una discusión en la cocina, Kelly se fue a otra habitación, y Peters y Donovan se retiraron a sentarse en el patio. Kelly entró en el patio con su pistola y disparó 11 veces contra la pareja, cinco de las cuales alcanzaron a Peters, que murió en el acto, según Brooks.
Kelly introdujo otro cargador en la Glock e intentó dispararle al caído y sangrante Donovan, pero la pistola se encasquilló y le arrojó el arma de fuego y los cartuchos sueltos, dijo el fiscal.
El abogado principal de Kelly, Warren Geller, intentó mitigar la posible condena de su cliente, señalando cartas de la familia de Kelly sobre sus cualidades positivas, la falta de antecedentes penales del acusado, su aparente alto nivel de intoxicación etílica durante el tiroteo y la posibilidad de que sufriera una conmoción cerebral en una caída esa noche.
Geller le pidió a la jueza que considere a “la persona que es en la totalidad de su vida y no al hombre que estaba altamente intoxicado y probablemente conmocionado el 2 de abril de 2019”.
‘Claramente no es suficiente’
Varios familiares de Kelly también asistieron a la audiencia. Se hicieron algunos comentarios negativos, y al final de la audiencia un alguacil hizo que las familias abandonaran la sala por separado.
Mark Peters, padre de Rebekah Peters, dijo que pensaba que la sentencia de Kelly “claramente no es suficiente, pero tenemos que atenernos a lo que diga el tribunal. Esperemos que se le niegue la libertad condicional y cumpla el resto de su vida en la cárcel”.
Los miembros de la familia de Kelly declinaron hacer comentarios.
