Detalla abogado los momentos de tensión antes del arresto por el asesinato de un reportero
Mientras el sospechoso de asesinato Robert Telles se refugiaba en su casa el miércoles, el veterano abogado penalista Ozzie Fumo recibió un llamado de asistencia de la policía de Las Vegas.
Querían que convenciera al funcionario del condado para que se entregara por la muerte del reportero del Las Vegas Review-Journal Jeff German.
Las autoridades alegan que Telles, administrador público del Condado Clark, apuñaló mortalmente a German la semana pasada frente a la casa del periodista en el noroeste del valle.
Telles había sido el centro de atención del trabajo de German para exponer las irregularidades públicas, y el reportero de investigación estaba tratando de conseguir un posible reportaje de seguimiento sobre Telles, que perdió su candidatura a la reelección en junio, en las semanas anteriores a su asesinato.
Fumo, antiguo asambleísta de Nevada que se postuló como candidato a fiscal del distrito y a un asiento en el Tribunal Supremo de Nevada, estaba familiarizado con Telles en la campaña electoral.
Telles, de 45 años, fue interrogado por los detectives de homicidios durante varias horas el miércoles, mientras los investigadores registraban su casa, a unas seis millas de donde se encontró a German muerto.
Tras el interrogatorio, la policía se llevó a Telles a su casa. Llevaba lo que parecía ser un traje blanco para materiales peligrosos y sandalias porque la policía le había confiscado la ropa. Se negó a hablar con los periodistas.
El capitán del Departamento de Policía Metropolitana, Dori Koren, dijo a los periodistas el jueves que Telles había sido devuelto a su casa mientras los investigadores consultaban con la oficina del fiscal del Condado Clark para conseguir una orden de arresto, “asegurando un caso sólido, construyendo pruebas”.
Más tarde, la policía llegó con equipo táctico y rodeó la casa mientras Telles permanecía dentro. La zona fue acordonada con cinta amarilla.
Fumo recibió el llamado a las 6:23 p.m.
Una mujer del equipo de negociación de la Policía Metropolitana estaba al otro lado de la fila.
“Estamos fuera de su casa”, dijo la mujer. “Tenemos una causa probable de arresto y se atrincheró. ¿Quiere hablar con él?”
La llamada duró 48 segundos.
Mientras realizaba el trayecto de 22 minutos en su Tesla Model Y azul desde su oficina en Las Vegas Boulevard hasta la casa de Spanish Steps Lane, Fumo contempló lo que le diría al hombre sospechoso de haber matado a un reportero de 69 años al que conocía desde hacía años.
“Pensaba en cosas de apoyo”, recordó el abogado el jueves. “‘Todo va a salir bien’. Cualquier cosa que pudiera hacer para ayudarle a sentirse cómodo. No quería que nadie más saliera herido. No quería que ninguna otra persona resultara herida. Pensé que si podía desescalar la situación tranquilizándolo, esa sería la mejor manera de hacerlo”.
Fumo dijo que su esposa le aconsejó que hiciera y dijera lo que la Policía Metropolitana le pidiera.
“¿Quieres que le llame?” preguntó Fumo a la negociadora.
“No, porque estamos hablando por teléfono y no queremos perder esa llamada”, respondió la negociadora.
Le pidió que se estacionara lo más cerca posible y le dijo que los agentes lo llevarían a la casa de Telles.
Pero cuando Fumo estaba a pocos minutos del enfrentamiento, la Policía Metropolitana volvió a llamar.
“Lo logramos arrestar sin incidentes”, dijo la mujer.
Fumo se dio la vuelta.
“Me alegré de que todos estuvieran bien”, dijo.
El abogado dijo que no sabía por qué la policía le había llamado para que ayudara en el enfrentamiento.
La policía anunció al día siguiente que se había encontrado el ADN de Telles en el lugar del apuñalamiento mortal.
Fumo y Telles, ambos demócratas, se conocían desde hacía años, ya que Telles era estudiante de la Facultad de Derecho Boyd de la UNLV y Fumo daba clases.
Telles fue electo para el cargo de administrador público en 2018, y se mantuvo en contacto con Fumo tras asumir el cargo.
Se puso en contacto con Fumo después de que se publicara la primera nota de German sobre el administrador público.
“Estaba molesto y triste por ello”, dijo Fumo. “Pero más triste que enfadado. Por eso me sorprendió. … No dijo nada sobre Jeff específicamente. Nunca lo habría visto venir”.
La última vez que Telles se comunicó con Fumo fue a través de un mensaje de texto a finales de julio, después de que el periódico reportara sobre una queja del colegio de abogados contra Fumo que, según él, fue finalmente desestimada. La nota no fue escrita por German.
“Estoy seguro de que mucha gente se está leyendo esa tonta queja del colegio de abogados”, le dijo Telles a Fumo. “Estoy seguro de que la superarás. Siento que estés pasando por lo que estás pasando”.
La policía dijo que Telles se autoinfligió heridas dentro de su casa antes de ser arrestado. Fue detenido en una camilla y conducido a un hospital en ambulancia. Telles compareció el jueves ante el tribunal con vendas en los antebrazos, y un juez reglamentó su detención sin derecho a fianza.
Fumo le dijo al Review-Journal que no representaría a Telles en el caso de asesinato.
