Rahm llega recuperado y bien posicionado a las finales del PGA Tour
El golfista vizcaíno Jon Rahm emprende los cuatro torneos que culminan la temporada del circuito estadounidense recuperado física y mentalmente y en el sexto puesto de la FedEx Cup.
“Los playoffs es como jugar cuatro grandes seguidos. Son tres torneos en los que todos peleamos por estar entre los cinco primeros”, dijo Rahm a Efe acerca de las tres primeras finales de las que saldrán los 30 golfistas aspirantes a los diez millones de dólares de la Fedex Cup en el último torneo de Atlanta a mediados de septiembre.
El golfista de Barrika de 22 años, que ha logrado una victoria y dos segundos puestos en su primer año estelar en el PGA Tour, tiene muchas posibilidades de llegar entre los primeros al Tour Championship en Atlanta, donde se reajusta la puntuación inicial para que los 30 finalistas tengan posibilidades de embolsarse el premio.
Rahm, que ha tenido una modesta actuación en los grandes, llega recuperado de fuerzas a la primera final en Nueva York, con 125 jugadores, a la que seguirán Boston, con 100, y Chicago, con 70, antes del Tour Championship.
“Me olvidé del golf durante cinco días y reseteé la mente y el cuerpo. Piensas en otras cosas que no son golf y recuperas las ganas de jugar, la ambición y la motivación”, dijo el español, que pasó por altibajos en el último grande, el Campeonato de la PGA, y acabó en los últimos puestos.
Rahm encabeza un trío de españoles en las finales del PGA Tour, junto con el castellonense Sergio García, ganador del Masters de Augusta de este año y en el 22 puesto de la Fedex, y el grancanario Rafa Cabrera Bello, 74 de la clasificación de la Fedex Cup, que llega en uno de los mejores momentos de su carrera al Northern Trust, en Nueva York.
Como ha ocurrido en años anteriores, García se saltará la primera final del Northern Trust de esta semana, que se celebrará en el Glen Oaks Club, donde sí estarán los ganadores de la edición de 2016, el norirlandés Rory McIlroy (44), y de 2015, el estadounidense Jordan Spieth (3), que viene de ganar su tercer grande en el Open Británico en Royal Birkdale.
El recorrido de Glen Oaks promete ser una dura prueba para los aspirantes a la FedEx Cup. “Es un campazo y tiene pinta de que, como suele ser la tónica, pegarle largo desde el tee ayude. La maleza está altísima y ponerla en el green desde ahí va a ser un milagro”, vaticinó el Jon Rahm.
