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Existe un estrés tolerable para los niños

En el año 2010, la Asociación Psicológica Americana, publicó un estudio titulado “Stress in América”, en el que reportaron que la economía es el principal factor que provoca este malestar. Encontrar una armonía entre el trabajo y el hogar es la segunda preocupación acorde a este análisis.

En cuanto a los niños se refiere, según el estudio, solamente el 33% están adaptados al estrés y son más consientes de los problemas de sus padres, ya que reportaron reconocer cuando sus tutores se encuentran molestos o estresados. En comparación, el 76% de los padres reportaron no reconocer cuando sus hijos se encuentran estresados.

El grupo de personas que se presentaron al estudio nacional, reconocieron de igual forma, conocer un estilo de vida más saludable (77%), tener una buena alimentación, practicar algún deporte y dormir bien como factores que evitarían el estrés, sin embargo argumentaron “la falta de motivación, energía física y seguridad en ellos mismos”, como las causas de no actuar.

En Nevada, la UNVL, tiene el programa denominado Prevent Child Abuse, que por medio de talleres con padres de familia, llevan a cabo este taller, al igual que otros como; la prevención del abuso sexual infantil, cómo elegir correctamente a tu pareja y el estrés infantil. La coordinadora del programa Valeria Gurr y platicó con El Tiempo y dijo, que son 3 tipos de estrés a los que se expone un niño: positivo, tolerable y tóxico. El positivo mantiene al niño activo en la escuela, eleva su frecuencia cardiáca y competitividad. El tolerable es algo temporal, como cuando fallece un familiar y con el apoyo de sus padres sabe comprender esa situación. Explicó Gurr.

“El que se debería evitar es el estrés tóxico, en donde el niño se mantiene en un estado de alarma. Se provoca por la exposición a la violencia, el niño lo refleja con el sentimiento de culpa, se le ve ido y aturdido. Un bebé de 6 meses puede captar todo a su alrededor y se le genera un trauma provocado por el estrés”, continuó Gurr.

Para ayudar a un niño en una situación de estrés, lo mejor es relacionarse con personas sanas de las que el niño también pueda aprender un estilo de vida diferente al que está expuesto, con vecinos o profesores puede obtener estos ejemplos. Según Gurr, “el cerebro busca encontrarle sentido a lo que le sucede que le provoca estrés, es una estrategia de supervivencia”.

Los niños con baja tolerancia al estrés, son más susceptibles a encontrar una mayor variedad de eventos estresantes, mismos sucesos que para otros niños no les causan ningún problema, como la muerte de una mascota.

Una de las asistentes Rosabel Vázquez, comentó, “me pareció interesante, me enseñó cosas que no sabía de los infantes, no tenía idea que los niños absorben la experiencia que están viviendo, como algo negativo o problemas y si tienen un hogar feliz con amor, lo transmiten, cualquiera que sea la situación”.

Prevent Child Abuse Nevada Información y clases gratuitas: Valeria Gurr 702-895-5053

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