Un tribunal de Nevada dictamina que los fabricantes de armas no son responsables de las muertes del tiroteo de Las Vegas
El Tribunal Supremo de Nevada dictaminó este jueves que los fabricantes de armas no pueden ser considerados responsables bajo la ley estatal por las muertes causadas en la masacre del festival Route 91 Harvest.
Los padres de Carrie Parsons, una mujer de Seattle asesinada en el tiroteo masivo del 1º de octubre de 2017, demandaron a los fabricantes de armas, acusándolos de eludir la ley federal y de Nevada al crear y vender armas que podían modificarse fácilmente para disparar automáticamente.
En la opinión unánime redactada por la jueza Kristina Pickering, los magistrados escribieron que la ley de Nevada no permite que los fabricantes de armas sean declarados negligentes y responsabilizados por una muerte injusta, incluso si alguien utiliza un arma que fue producida ilegalmente.
“No subestimamos en absoluto las profundas cuestiones de política pública que se plantean ni la horrible tragedia que supuso el tiroteo masivo del Route 91 Harvest Festival”, escribió Pickering en su dictamen. “Pero esta es un área que la Legislatura ha ocupado ampliamente”.
Los jueces dijeron que la ley podría ser modificada por los legisladores, pero no por el tribunal.
“Pedimos a la Legislatura a que actúe si no tenía la intención de proporcionar inmunidad en situaciones como ésta”, escribió Pickering.
La demanda contra Colt’s Manufacturing y otras siete empresas, que se centraba en las leyes históricas sobre armas y en la prohibición federal de las ametralladoras, alegaba que las empresas elegían continuamente “los beneficios por encima de la seguridad pública”, fabricando rifles que podían modificarse “en cuestión de minutos, si no de segundos” sin necesidad de conocimientos técnicos.
El abogado Matthew Sharp, que representa a la familia Parsons, calificó la decisión de “desafortunada y contraria a la seguridad y la equidad fundamentales”.
“Según la sentencia de hoy, un fabricante o distribuidor de armas tiene total inmunidad incluso si viola a sabiendas e intencionadamente las leyes federales y estatales al participar en la venta ilegal de una ametralladora a sabiendas de que será utilizada para infligir daño a personas inocentes”, escribió en un comunicado.
Los abogados de Colt’s Manufacturing no devolvieron inmediatamente la solicitud de comentarios el jueves.
El pistolero del tiroteo del Route 91 utilizó un accesorio “bump stock” (o automatizador) en sus armas semiautomáticas para aumentar la capacidad de disparos de los rifles que disparó desde su suite en el piso 32 del Mandalay Bay contra miles de personas que asistían al festival de música country al aire libre.
El tiroteo dejó inicialmente 58 asistentes al concierto muertos y cientos más heridos. Otras dos víctimas murieron a causa de sus heridas más de dos años después del tiroteo.
En mayo de 2020, el juez de distrito de Estados Unidos Andrew Gordon dictaminó que el Tribunal Supremo de Nevada debía abordar la demanda contra los fabricantes de armas.
Gordon escribió que estaba “particularmente preocupado” por la interpretación de los fabricantes de armas de una ley que “inmunizaría incluso a un acusado que fabricó y vendió pistolas Tommy o rifles M-16 a civiles”.
En septiembre, la representante demócrata por Nevada Dina Titus presentó un proyecto de ley federal para regular y prohibir los automatizadores.
