Las asambleas electorales de Nevada pondrán a prueba a los candidatos con los votantes latinos
WASHINGTON — Las asambleas electorales de Nevada (caucus) constituyen el primer importante desafío para los candidatos presidenciales demócratas con los latinos, quienes representan un tercio de la población del estado y se han convertido en un importante conjunto de votantes.
El senador de Vermont, Bernie Sanders, ha obtenido una aprobación más alta que otros candidatos con hispanos a nivel nacional y ha recibido un fuerte apoyo de las comunidades latinas en Iowa y New Hampshire.
Pero su apoyo también proviene de un grupo demográfico más joven de votantes (incluyendo a los latinos) mientras que el ex vicepresidente, Joe Biden, tiene el apoyo de los hispanos de mayor edad y de los votantes de las minorías que tienen más probabilidades de participar en las asambleas electorales y las elecciones primarias.
“Creo que Nevada es el estado que nos dirá lo que veremos el Super Tuesday”, indicó Colin Strother, un estratega y consultor demócrata de campañas que actualmente no trabaja con ninguna campaña presidencial.
Y, pese a la posición de Sanders como favorito, Strother opinó, “Hay algunas banderas rojas y algunos conos naranjas, obstáculos para Bernie”.
El historial de Sanders en materia de inmigración (un tema importante en la comunidad minoritaria) es probable que sea objeto de escrutinio.
El voto de Sanders en el Senado sobre una reforma migratoria integral se convirtió en un tema de la carrera presidencial demócrata hace cuatro años.
Sanders y Joe Biden estaban en lados opuestos de un voto en el Senado en 2007 que mató un proyecto de ley bipartidista apoyado por los demócratas, incluyendo al líder de la mayoría del Senado, Harry Reid, el senador Barack Obama y la senadora Hillary Clinton.
La oposición a la implementación de visas para trabajadores invitados que buscaban las compañías de alta tecnología fue citada por Sanders como su razón para unirse a los republicanos en una votación de 62 a 34 que condenó el proyecto de ley.
Pero esa legislación también ha otorgado un camino a la ciudadanía para los inmigrantes indocumentados. Aunque Sanders no se opone a eso, su voto ayudó a matar el proyecto de ley.
¿Salarios más bajos?
Tras la votación, Sanders explicó en el programa “Lou Dobbs This Week” de CNN que se oponía a “millones de personas que vienen a este país como trabajadores invitados que trabajarán por salarios más bajos que los de los trabajadores estadounidenses y que harán que los salarios bajen aún más de lo que están ahora”.
Ali Noorani, director ejecutivo del grupo de defensa de la inmigración America is Better, dijo que el deseo de Sanders de socavar ese proyecto de ley sobre las visas de trabajadores invitados también hundió propuestas como la de la ciudadanía, que “eliminó una buena solución para millones de inmigrantes”.
Noorani señaló que muchos de esos inmigrantes siguen en Estados Unidos con amplias familias que ya son ciudadanos “y votan este año”.
Sanders también ha pedido la ruptura del Servicio de Inmigración y Aduanas y del Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de los EE.UU., que según Noorani “no son soluciones políticas razonables”.
Desde entonces, Sanders se ha vuelto agresivo en su acercamiento a los latinos. Es apoyado por la representante Alexandria Ocasio-Cortez, demócrata por Nueva York, una de las latinas de más alto perfil que sirve en el Congreso. Otra latina de alto perfil, la senadora de Nevada, Catherine Cortez Masto, le comentó al Review-Journal este mes que no planea apoyar a un candidato antes de las asambleas electorales.
Ambos lados
Mientras tanto, la campaña de Sanders defendió su voto de 2007 como uno que se opuso a una propuesta respaldada por el presidente George W. Bush y favorecida por las grandes corporaciones que “explotarían a los trabajadores inmigrantes”.
Junto con los grupos latinos nacionales y los sindicatos, “Bernie se opuso al defectuoso proyecto de ley de ‘reforma’ de inmigración de Bush porque carecía de las tan necesitadas protecciones para los trabajadores inmigrantes”, enunció Josh Orton, director de política nacional de la campaña Sanders.
“Bernie siempre ha creído en un sistema de inmigración basado en la familia y en los derechos humanos y civiles”, apuntó Orton.
Noorani agregó que el fracaso de la reforma de inmigración sin visas de trabajo, solo visas familiares, “no resuelve realmente el problema”.
“Está tratando de unir ambos lados”, opinó Noorani.
En la cima de las encuestas
Hasta ahora, Sanders es el favorito de los votantes latinos en todo el país, según encuestas recientes.
Una encuesta de Morning Consult la semana pasada, mostró a Sanders con un 48 por ciento de apoyo entre los hispanos a nivel nacional, seguido por el multimillonario Michael Bloomberg, 17 por ciento, Biden, 13 por ciento, Pete Buttigieg, ocho por ciento, y Elizabeth Warren, siete por ciento. La encuesta tuvo un margen de error de más o menos dos puntos porcentuales.
Bloomberg no está en la votación del caucus en Nevada.
En una encuesta publicada por el Review-Journal el viernes, Sanders tuvo un 25 por ciento de apoyo, comparado con el 18 por ciento de Biden y el 13 por ciento de Warren. El margen de error fue del 4.8 por ciento.
A este punto, Sanders está “haciendo un esfuerzo considerable” para llegar a los latinos de Nevada, expresó Domingo García, presidente de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos.
Y Biden calificó de un “error” las deportaciones de inmigrantes indocumentados que se elevaron a niveles más altos durante la administración de Obama, superando a las anteriores administraciones republicanas y demócratas.
Pero la demografía podría darle a Biden una ventana para resucitar su campaña con el apoyo de los votantes de mayor edad que tienen más probabilidades de acudir a las asambleas electorales y las elecciones primarias, incluyendo a los hispanos.
“Creo que Biden se está presentando mejor ante los votantes latinos mayores y las organizaciones”, subrayó Strother.
La inmigración es el tema principal
Entre los latinos, la inmigración es uno de los temas principales para la comunidad, junto con el cuidado de la salud, la economía y la educación, según Latino Decisions, una empresa nacional de encuestas e investigación que se concentra en la comunidad minoritaria.
Noorani enfatizó que los planes de inmigración publicados por Biden, el ex alcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg y Bloomberg, abordan las necesidades de inmigración de las familias y los empleadores, pero no solicitan la abolición de las agencias federales.
Amy Klobuchar y Elizabeth Warren han dado a conocer algunos detalles sobre sus propuestas de inmigración, comparó Noorani.
Warren ha conseguido la ayuda del ex alcalde de San Antonio, Julián Castro, quien como candidato presidencial fue muy abierto a la reforma de la inmigración.
Klobuchar, quien se desempeñó bien en Iowa y New Hampshire, donde las poblaciones son 90 por ciento y 93 por ciento blancas, respectivamente, también se pondrá a prueba con una población votante más diversa étnicamente en Nevada, apuntó Strother. Ni ella, ni el empresario Tom Steyer, pudieron nombrar al presidente de México cuando se les preguntó durante un foro televisado por Telemundo en Las Vegas. Buttigieg fue el único candidato de los tres que respondió correctamente: Andrés Manuel López Obrador.
Los hispanos constituyen el 29 por ciento de la población de Nevada (de más de tres millones de personas) según la Oficina del Censo de EE.UU. en 2019. Alrededor del 19 por ciento de la población del estado ha nacido en el extranjero.
De la población latina del estado, el 79 por ciento vive en el Condado Clark, que incluye Las Vegas y los suburbios, y el 13 por ciento reside en el Condado Washoe, donde se encuentra la segunda ciudad más grande del estado, Reno, según “Mi Familia Vota Nevada”, una organización de participación cívica latina.
Los líderes demócratas de Nevada dicen que los latinos serán influyentes en el resultado de las asambleas electorales.
Estrategas como Strother concluyeron que los resultados podrían definir la fuerza de los candidatos cuando la carrera se dirija hacia Carolina del Sur, y luego hacia el Super Tuesday, el 3 de marzo, cuando se decidirá un tercio de los delegados comprometidos.
