Alega la ex jefa de policía de Henderson haber sufrido discriminación en denuncia
LaTesha Watson, ex jefa de policía de Henderson, declaró en una denuncia presentada ante una comisión estatal que la ciudad la discriminó por ser una mujer afroamericana.
También alega que Henderson no investigó un sitio web racista que denunció, y sus propios oficiales, afirma, publicaron comentarios despectivos y una calumnia racial sobre ella.
Watson presentó la queja en septiembre ante la Comisión de Igualdad de Derechos de Nevada, que trabaja con la Comisión Federal de Igualdad de Oportunidades en el Empleo en reclamos por discriminación. Watson no devolvió las llamadas telefónicas de un reportero en busca de comentarios, y su abogado, Marc Cook, se negó a hacer comentarios durante la investigación en curso.
En una declaración, la vocera de Henderson, Kathleen Richards, mencionó que muchos de los reclamos a los que se hace referencia en la denuncia ya habían sido investigados y se determinó que fueron infundados por un tercero.
“Estamos seguros de que cualquier investigación adicional realizada por la Comisión de Igualdad de Derechos de Nevada llegará a la misma conclusión y que el reclamo de la señora Watson no tiene mérito”, aseveró Richards.
Richards también agregó que Watson nunca reportó un sitio web racista.
Watson alega que se enfrentó a una venganza personal por disciplinar a por lo menos siete oficiales de policía “por cuestiones de integridad y por vileza moral”. Ella comentó que el Abogado de la Ciudad, Nicholas Vaskov y su jefe, el Subgerente de la Ciudad, Bristol Ellington, le pidieron que anulara los despidos y las suspensiones.
Ella alega que Ellington la acosó, tomó represalias en su contra y cambió los términos y condiciones de su empleo porque es una mujer afroamericana.
Ellington, quien también es afroamericano, indicó que las acusaciones son infundadas y que la Oficina del Fiscal de la ciudad está respondiendo a la demanda.
El ex-jefe alega que un ex-presidente del sindicato se refirió a ella por una calumnia racista y sexista y abogó por presentar quejas en su contra. Watson alega además que se enfrentó a quejas frívolas de los agentes de policía de Henderson y su sindicato.
A lo largo de su empleo con Henderson, Watson se enfrentó a varias quejas que fueron investigadas por una compañía externa.
También dijo que un empleado blanco de Henderson enfrentó quejas similares pero, a diferencia de Watson, no enfrentó una investigación independiente. Nunca nadie presentó una queja contra ese empleado, destacó la ciudad.
La ex jefa añadió que presentó una queja por discriminación ante Vaskov el 8 de abril, tres días antes de que la despidieran, y alega que su despido fue un acto de represalia.
“No tenemos ningún registro de que haya presentado una queja”, dijo Richards.
Watson está buscando un pago de más de 17 mil dólares por mes desde que fue despedida el 11 de abril. También está buscando compensación por daños y perjuicios por gastos de mudanza y gastos médicos.
Henderson puso a Watson bajo licencia administrativa en marzo, días después de que un investigador independiente le recomendara a las autoridades que consideraran seriamente despedirla. La ciudad le dio tres semanas para firmar un acuerdo de separación.
Bajo el acuerdo, ella habría renunciado y recibido más de 24 mil dólares por tiempo libre pagado. El contrato le habría impedido hacer cualquier reclamo contra Henderson, y contenía una cláusula de no desacuerdo que le habría permitido a la ciudad multar a Watson con cinco mil dólares por cada violación.
Watson no firmó el acuerdo.
Más tarde, la ciudad la despidió por múltiples razones, entre ellas, por tener una relación tensa con los sindicatos de la policía y por no cooperar con un investigador independiente.
