Después de una pausa de dos años derivada de la pandemia de COVID-19, la organización Heaven Can Wait ha reanudado su programa “Pups on Parole”, el cual empareja perros sin hogar con mujeres encarceladas en una unidad especial en un centro penitenciario.
Prisión
Frank Alejandre • El Tiempo
La pandemia ocasionada por el coronavirus (COVID-19) cerró el acceso a la mayoría de las prisiones de EE.UU., incluido el Centro Correccional de Lovelock, localizado en Lovelock (Nevada), donde Joe Arcero se ofrece como voluntario con un grupo de ministros testigos de Jehová. Sin previo aviso, los reclusos fueron privados de un sólido programa de educación bíblica que incluía discursos semanales basados en la Biblia, discusiones con la audiencia, cursos bíblicos individuales y presentaciones en video.
Lo más leído