Protegiendo a los “Dreamers” de Nevada
El 18 de junio la Corte Suprema de Estados Unidos bloqueo el cruel e innecesario intento del presidente Trump de poner fin a las protecciones otorgadas a los “Dreamers” incluyendo a miles que residen en Nevada. Al rescindir el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), el presidente Trump esperaba tener vía libre para deportar a los jóvenes que llegaron a Estados Unidos en su infancia y quienes han estudiado, trabajado y contribuido a sus comunidades de innumerables maneras. Pero la Corte Suprema falló que las acciones del presidente eran ilegales, lo cual quiere decir que, por el momento, los “Dreamers” de nuestro “Estado de Plata” están a salvo.
Y merecen estarlo, ya que DACA ha empoderado a jóvenes indocumentados a salir de las sombras, les ha dado la libertad de ir tras extraordinarias metas, desde servir en nuestras fuerzas armadas hasta estar a la vanguardia ante la pandemia del coronavirus. Durante esta extraordinaria emergencia de salud pública, más de 200,000 beneficiados de DACA han estado en la primera línea de atención médica, educación, agricultura y otros empleos esenciales, sumando casi 5,000 de los 12,000 nevadenses amparados por DACA.
Una de estos excepcionales “Dreamers” es Anna Ledesma, enfermera pediátrica en la unidad de cuidados intensivos en Las Vegas, quien ha estado en Estados Unidos desde los siete años de edad y se interesó en la medicina gracias a su tía que considero que sería la carrera perfecta para ella.
La tía de Anna la supo aconsejar. Anna ama la biología y le encanta aprender cómo funciona el proceso de las enfermedades, pero, sobre todo, Anna ama a sus pacientes. “Me encanta poder establecer una conexión con ellos con todo lo relacionado a Disney”, Anna nos comparte, “creo que soy buena enfermera pediátrica porque en el fondo, sigo siendo niña”.
Encontramos profesionales como Anna a lo largo de Nevada, jóvenes que están haciendo la diferencia en sus comunidades. El fallo del jueves 18 les permite a los “Dreamers” continuar contribuyendo al único país al que llaman su hogar, pero aún viven en la incertidumbre y esta administración continúa vilipendiándolos con su retórica anti-inmigrante. Es por esto que seguiré luchando desde el Senado para proveer un alivio permanente a los “Dreamers” y finalmente darles la oportunidad de hacerse ciudadanos de este país. Urjo al líder mayoritario, Mitch McConnell, que le permita al Senado votar y pasar el Dream and Promise Act y poner a los “Dreamers” en un camino a la ciudadanía.
Ahora, más que nunca, es cuando tenemos que entender que aquellos que vienen a Estados Unidos en busca de una vida mejor, no nos opacan, sino nos enriquecen. Estos son nuestros amigos y vecinos y sus historias son las nuestras. Historias de dificultades, valentía y sacrificio por nuestra comunidad para poder construir un mejor futuro para aquellos que vendrán después. Yo estaré luchando por esos valores desde el Senado y por los “Dreamers” que fortalecen a Estados Unidos.
