Las mentiras finalmente hirieron a Harry Reid
abril 10, 2019 - 10:09 am
El desdén de Harry Reid por la verdad finalmente volvió a morderlo.
La semana pasada, un jurado determinó que los creadores de TheraBand, no fueron responsables de las lesiones que Reid sufrió en enero de 2015. Reid denunció ante el jurado que se lastimó después de perder el control sobre la banda mientras hacía ejercicio en el baño. Cayó contra un gabinete, hiriéndose gravemente a sí mismo. Perdió la vista en su ojo derecho, tuvo una conmoción cerebral y se rompió huesos y costillas orbitales.
La esposa de Reid tiró la banda a la basura después del accidente. Los abogados de TheraBand argumentaron que eso significaba que Reid ni siquiera podía probar que utilizó su producto cuando se lastimó.
Las lesiones y sufrimientos de Reid son lamentables. Pero esa simpatía no debería extenderse a ignorar que lo que Reid relató en el tribunal no fue su primera versión de la historia. Después del accidente, Reid mencionó que la banda con la que estaba haciendo ejercicio se rompió.
“Mientras estaba en uso, la TheraBand se rompió o resbaló de la mano del señor Reid, causando que girara y golpeara su cara contra un gabinete”, afirmó la demanda de Reid, presentada en octubre de 2015.
Esos no son escenarios similares, si una TheraBand rota le había provocado lesiones, Reid habría tenido una razón legítima para presentar una demanda, no es así si se le resbaló de la mano.
“Nunca creí que la banda se rompiera”, dijo Reid mientras testificaba bajo juramento.
¿En serio? Porque en su propia demanda la planteó como una de dos posibles explicaciones de sus lesiones que terminaron con su carrera.
Al preguntársele sobre sus declaraciones públicas que culpaban que la banda se había roto, Reid respondió: “Dije eso, pero solo estaba hablando, todos sabían que no se rompió. En mi estado de conmoción cerebral, pude haber dicho algo diferente durante los primeros meses”.
Una conmoción cerebral es una posibilidad para la falta de franqueza de Reid. Otra es que se ajusta al patrón establecido de Reid de mentir a lo largo de su carrera política para lograr sus objetivos.
Este es el hombre quien afirmó en 2012 que una fuente anónima le reveló que el entonces candidato presidencial, Mitt Romney, no había pagado impuestos durante 10 años. No fue un resbalón de la lengua, Reid expuso su crítica a la prensa y al Senado. La acusación fue perjudicial, ya que el entonces presidente Barack Obama atacó la riqueza de Romney y su negativa a revelar sus declaraciones de impuestos pasadas.
Reid no se arrepiente de esta mentira, se deleita de ella. En 2016, la llamó “una de las mejores cosas que he hecho”. Cuando le preguntaron otra vez, respondió: “Romney no ganó, ¿verdad?”
Las falsedades de Reid no terminaron con su carrera, soltar una banda de ejercicio sí y ese fue otro tema sobre el que mintió.
En 2015, Reid le reportó a CNN que su lesión “no fue la que le hizo tomar la decisión” cuando se trató de no buscar la reelección en 2016. Cambió su historia cuando estaba buscando daños de TheraBand, comentando que sus lesiones fueron el “factor principal”. La abogada de TheraBand, Laurin Quiat, contrastó esas dos declaraciones durante el juicio.
“Lo único que sí sabemos es que le cuesta decir la verdad”, concluyó Quiat.
Como Reid aprendió de primera mano, una vez que dejas la política, ya no eres un factor positivo.