Víctimas de agresiones sexuales podrían obtener nueve mdd en caso
La Junta Escolar del Condado Clark estudiará la posibilidad de aprobar el jueves un acuerdo por nueve millones de dólares en un caso relacionado con un antiguo conductor de autobús escolar de educación especial que fue condenado a prisión en 2018 por agredir sexualmente a niños de preescolar.
Los padres de dos hermanos, que en 2015 tenían tres y cinco años y recibían servicios educativos en O’Roarke Elementary, en el noroeste de Las Vegas, presentaron una demanda en octubre de 2020 ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos.
La demanda se presentó contra Michael Banco, que fue conductor de autobús durante alrededor de 20 años, y contra el Distrito Escolar del Condado Clark y varios funcionarios del distrito.
En 2018, Banco recibió la condena máxima de 35 años a cadena perpetua. Inicialmente se enfrentaba a 41 cargos, pero se declaró culpable de un cargo de agresión sexual con un menor de 16 años y de actos lascivos con un menor de 14 años.
Banco agredía sexualmente a los niños en la parte trasera de su autobús escolar -actos que fueron captados en un video de vigilancia en tres días distintos- antes de dejarlos en casa después de la escuela.
El acuerdo que la Junta Escolar considerará forma parte de la agenda de consentimiento del consejo, pero está etiquetado como “confidencial” y no se proporciona más documentación con los materiales de la reunión en internet.
Los administradores suelen aprobar todos los puntos de la agenda de consentimiento en una sola votación, a menos que un administrador solicite considerar un determinado punto por separado.
El Las Vegas Review-Journal no pudo contactarse con funcionarios del distrito escolar para que hicieran comentarios después del horario laboral del martes.
Durante la sentencia de Banco en 2018, una abuela de una niña de tres años dijo: “Este hombre ha destruido a mi nieta. ¿Cómo podemos superar eso? No sé qué más hacer, sino abrazarla. Es lo único que tengo”.
Los padres que presentaron la demanda le dijeron al Review-Journal en 2020 que su hija tiene pesadillas sobre el autobús escolar y que su hijo se siente culpable por no haberla protegido.
“Tiene días en los que solo se apaga”, dijo la madre. “Esto es algo de lo que va a necesitar hablar con alguien profesionalmente durante el resto de su vida”.
