58°F
weather icon Clear

Sargento de 36 años de LVMPD muere a causa de COVID-19

Un sargento de la policía de Las Vegas de 36 años falleció por complicaciones de COVID-19, lo que supone es al menos el sexto empleado del Departamento de Policía Metropolitana (LVMPD) que sucumbe a la enfermedad, según anunció el martes el departamento.

Douglas King, un agente de la segunda generación de la Policía Metropolitana que trabajaba en el área de patrulla de Summerlin del departamento, murió el lunes, según un comunicado de la Policía Metropolitana.

King tenía previsto recibir una medalla de honor de LVMPD en noviembre durante la gala anual de los premios “Best of the Badge” del departamento, que honra a los agentes por distinguirse en el cumplimiento del deber.

“Era un sargento muy querido, conocido por su gran personalidad y su carácter positivo”, publicó LVMPD en el comunicado.

A King le sobreviven su esposa y compañera de la policía, Cinnamon; sus hijas Scarlett, Tommi y Hannah; su nieta Marley; su abuela Joann; su padre John; su madre Denise; su hermano Josh; y su hermana Kaylee.

El primer empleado conocido de LVMPD que murió por el coronavirus fue el teniente Erik Lloyd, de 53 años, que falleció el 29 de julio de 2020.

Después de la muerte de Lloyd, el empleado civil John Melwak, de 70 años, murió el 23 de octubre; el detective retirado Michael Karstedt, de 70 años, murió el 3 de enero; el oficial Jason Swanger, de 41 años, murió el 24 de junio; y el oficial Philip Closi, de 48 años, murió a principios de este mes después de 21 años en el departamento.

Se desconoce si King, Closi o Swanger estaban vacunados. LVMPD no revela el estado de vacunación de los fallecidos por la enfermedad debido a una ley federal de privacidad que protege la información personal sobre la salud.

En una entrevista con el Review-Journal la semana pasada, el alguacil del Condado Clark, Joe Lombardo, dijo que no pensaba obligar a los empleados de LVMPD a vacunarse, a pesar de que calificó de “inaceptable” la tasa de vacunación del departamento, que es del 52 por ciento.

“Me gustaría que fuera mayor, obviamente”, dijo. “No estoy en condiciones de imponerlo. Creo que es lamentable, y hemos tomado muchas medidas proactivas para intentar convencer a los trabajadores de que se vacunen. Por desgracia, no hemos llegado a las cifras que desearíamos”.

LO ÚLTIMO