Nevada, un estado de batalla, todavía atrae a trabajadores de campaña
El portavoz de la campaña del senador Dean Heller es de Washington. El gerente de campaña de Aaron Ford, nominado al Fiscal General, es oriundo de Texas. Su oponente, el jefe de campaña de Wes Duncan, es de Virginia. El portavoz del candidato al congreso Danny Tarkanian es de California, y el gerente de campaña de su oponente, Susie Lee, es de Carolina del Sur.
En los últimos meses, el Partido Demócrata de Nevada contrató a secretarios de prensa de Virginia y California específicamente para atacar a los votantes de minorías en las elecciones al Congreso de alto perfil. El Partido Republicano también solicitó ayuda externa para llegar a los votantes.
Cada año electoral, los trabajadores de la campaña vienen de todo el país para marcar una casilla en su currículum, y Nevada tiene muchas casillas para marcar, al ser un estado de batalla. En las elecciones intermedias de 2018, las principales elecciones de Nevada, el Senado de los Estados Unidos, el gobernador y dos escaños en la Cámara de Representantes, están siendo dirigidos por nuevos nevadenses (y posiblemente temporales).
“Quería manejar una carrera de campo de batalla dirigida”, dijo John Vick, gerente de campaña de Duncan, quien anteriormente trabajó como director político del Partido Republicano de Virginia. Vick había planeado realizar campañas en Florida, hasta que recibió una llamada de consultores de GOP en Nevada que le presentaron a Duncan. Los dos hombres, que son ambos veteranos de la guerra de Irak, se pusieron a prueba.
Vick señaló que hay tres cosas que determinan el éxito en las campañas políticas: la habilidad, la suerte y la voluntad de moverse. Y a pesar de estar casado, con un hijo pequeño y un perro, Vick se ha mudado todos los años desde 2015.
La campaña de Ford está siendo dirigida por la nativa de Texas Jessica Adair. Pero esta es su segunda vez en el Estado de la Plata. Adair también trabajó en la campaña de 2016 de Hillary Clinton en Nevada. Ella espera quedarse después del día de las elecciones.
“Me enamoré del estado”, afirmó Adair. “Partes de Nevada me recuerdan al oeste de Texas y me sentí como en casa”.
En la carrera de alto nivel en el Senado de los Estados Unidos, el equipo de prensa de la campaña de Heller está dirigido por Keith Schipper, que es del estado de Washington. Su oponente, la representante Jacky Rosen, contrató al portavoz Stewart Boss, un nativo de Carolina del Norte que se mudó a Las Vegas en 2015 y trabajó para el Partido Demócrata del estado.
La carrera por el gobernador ha atraído mucho interés desde fuera del estado. El candidato republicano Adam Laxalt contrató recientemente al portavoz Parker Briden, el ex portavoz del atacado ex gobernador de Missouri, Eric Greitens. La secretaria de prensa del candidato demócrata Steve Sisolak, Christina Amestoy, es de Vermont.
Richard Hernández, un portavoz de la campaña del Congreso de Danny Tarkanian, se hace llamar “refugiado de California”. Dijo que se fue de Temecula porque no estaba de acuerdo con la política del Estado Dorado.
“Solo espero que Nevada permanezca rojo”, indicó Hernández. “Si se torna azul, entonces todas esas cosas que estaba buscando podrían desaparecer”.
Lee contrató a Brandon Cox, quien también trabajó para Lee en 2016.
“Después de 2016, quería volver a Nevada”, comentó Cox, quien trabajó en campañas en California y Pennsylvania. “Nevada es el mejor estado en el que he trabajado. Desde luego, no descartaría quedarme”.
Al igual que Cox, algunos agentes de la campaña llegaron a Nevada pensando que sería para una elección, pero no pudieron irse.
“Cuando me mudé aquí, la gente me decía: ‘Ross, vas a odiarlo por un año, pero después nunca podrás dejar el estado de nuevo’”, mencionó Ross Hemminger, un nativo de Ohio y portavoz del candidato al congreso Cresent Hardy. “Es verdad. Nevada crece en ti, y llegas a amarlo”.
