94°F
weather icon Clear

Los problemas de agua frenan el crecimiento en Phoenix. ¿Y en Las Vegas?

Actualizado June 27, 2023 - 1:27 pm

Las autoridades de Arizona anunciaron este mes que el estado no aprobaría la construcción de nuevas viviendas en los florecientes bordes del área metropolitana de Phoenix porque no hay agua suficiente para soportar el futuro crecimiento previsto.

El anuncio atrajo la atención nacional sobre Phoenix y otras ciudades occidentales que luchan contra la escasez de agua en un contexto de sequía prolongada, mientras la demanda de crecimiento sigue aumentando.

También suscita la pregunta: ¿Podría ser Las Vegas la próxima?

John Entsminger, director general de la Autoridad del Agua del Sur de Nevada, no lo cree. Al menos no en las próximas décadas.

“Creo que las situaciones son muy diferentes”, dijo Entsminger.

Aunque las áreas metropolitanas de Las Vegas y Phoenix son dos ciudades desérticas del suroeste que se enfrentan a la disminución de las reservas de agua, difieren significativamente en la forma en que la obtienen.

La dependencia de las aguas subterráneas

Como señaló Kyl Center for Water Policy de la Universidad Estatal de Arizona en un reporte posterior al anuncio de las autoridades de Arizona, las áreas que se verán afectadas por la decisión son aquellas que históricamente han dependido de las aguas subterráneas locales. Estas zonas se encuentran en su mayoría fuera del área de servicio de los proveedores municipales de agua.

En su anuncio, la Gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, dijo que las proyecciones mostraban que la demanda de agua subterránea en la zona de Phoenix en los próximos 100 años superaría a los suministros en unos 4.9 millones de acres-pies. Un acre-pie de agua es suficiente para abastecer a dos o tres hogares promedios de Estados Unidos al año.

Pero en el sur de Nevada, las aguas subterráneas solo representan una pequeña parte del suministro anual de agua de la región.

Solo un 10 por ciento del agua del sur de Nevada procede de fuentes subterráneas. El resto procede de la parte que corresponde a Nevada del río Colorado, un sistema hídrico que se enfrenta a la disminución de sus propias reservas.

Nevada suele recibir anualmente 300 mil acres-pies de agua del río, pero esa cantidad se ha reducido en los últimos años debido a recortes acordados previamente en función de los niveles del Lago Mead.

Pero incluso con esas reducciones, Las Vegas ha usado una cantidad muy inferior a su cuota habitual del río. Y eso a pesar del importante crecimiento de la población de la región.

El sur de Nevada ha reducido la cantidad de agua del río Colorado que consume de unos 325 mil acres-pies en 2002 a solo 224 mil acres-pies en 2022, a la vez que ha aumentado su población en casi 800 mil habitantes.

Solo en los últimos tres años, el valle ha registrado más de 45 mil nuevas conexiones de agua, según la autoridad del agua, al mismo tiempo que ha reducido la cantidad de agua que consume del río un 12 por ciento.

“Esta correlación habitual entre crecimiento y aumento del consumo de agua no se confirma con datos empíricos”, afirma Entsminger.

Aunque Entsminger no espera que el valle de Las Vegas vea restringido su crecimiento en las próximas décadas, la decisión de Arizona guarda similitudes con otra que pasó prácticamente desapercibida en el sur de Nevada hace solo unos años.

Moratoria en Blue Diamond

A finales de 2020, el Distrito de Aguas del valle de Las Vegas, que suministra agua a Las Vegas y a la zona no incorporada del Condado Clark, estaba evaluando las solicitudes de nuevos compromisos de agua en la pequeña comunidad de Blue Diamond, un vecindario de aproximadamente 350 personas ubicado cerca de Red Rock Canyon National Conservation Area.

Blue Diamond depende exclusivamente de las aguas subterráneas locales, y la disminución de las precipitaciones invernales en las Spring Mountains, que proporcionan la principal fuente de agua al acuífero, había creado una situación en la que las fuentes de agua podrían verse afectadas por el crecimiento futuro.

“Debido a la continua sequía y al cambio climático, los niveles de agua en Blue Diamond no podrán sostener los futuros compromisos de agua”, escribió el distrito en una presentación de diapositivas fechada el 1° de diciembre de 2020.

Con los futuros recursos de agua subterránea inciertos, el distrito de agua en diciembre de 2020 puso una moratoria en la construcción de nuevas viviendas en la pequeña comunidad rural en el borde del valle de Las Vegas hasta que se pudiera establecer un nuevo suministro de agua.

Pero Entsminger dijo que esa no es una situación que la autoridad del agua proyecte bajo ningún escenario para la parte principal del valle en los próximos 50 años.

Y en Arizona, no esperen que el crecimiento se detenga en la quinta ciudad más grande del país debido a las restricciones de las aguas subterráneas.

Hobbs señaló en su anuncio que hay unas 80 mil viviendas sin construir que podrán seguir adelante porque han obtenido del Estado lo que se conoce como certificados de “suministro de agua garantizado”. Incluso en las zonas donde se harán sentir las restricciones, el crecimiento sigue siendo posible si los urbanizadores encuentran fuentes de agua alternativas.

“El crecimiento continuará, pero es probable que cambien las pautas y el ritmo de crecimiento. El crecimiento sobre las aguas subterráneas se desacelerará”, señala el reporte de Kyl Center.

Si Las Vegas puede alcanzar su objetivo de conservación de reducir el uso de agua a 86 galones por persona al día para 2035, dijo Entsminger, el valle puede seguir creciendo con una huella hídrica negativa.

“Pero si nos dormimos en los laureles y nos negamos a hacer cosas adicionales, entonces sí, podría llegar un punto de rendimientos decrecientes”, dijo. “Si vemos eso, surgirá como una tendencia, no como un impacto”.

LO ÚLTIMO