Identifican restos hallados hace 45 años en una bolsa para ropa en Nevada, quedan muchas preguntas por responder
junio 19, 2023 - 1:42 pm
Actualizado June 19, 2023 - 2:11 pm
En 1978, se descubrió en una zona remota del norte de Nevada una bolsa para ropa que contenía los restos de una mujer en avanzado estado de descomposición.
El caso pronto quedó como sin resolver y la víctima permaneció en el anonimato durante 45 años.
Pero el miércoles, la policía del estado de Nevada anunció que los avances en las pruebas de ADN han permitido finalmente identificarla. Se trata de Florence Charleston, una mujer de Cleveland, Ohio de unos 60 años que se había trasladado a Portland, Oregón poco antes de morir.
Todavía es un misterio cómo Charleston acabó muerta y enterrada en una fosa poco profunda a 535 millas de su nuevo hogar. La policía dijo el miércoles en un comunicado de prensa en el que anunciaba la coincidencia de ADN que la investigación sobre su muerte sigue su curso.
Diane Liggitt, una de las pocas familiares de Charleston, dijo que tenía unos 18 años cuando se enteró por su padre de que su tía se había marchado al noroeste del Pacífico con un nuevo novio a principios de la década de 1970. Pasaron décadas. La familia no volvió a escuchar nada de Charleston.
A lo largo de los años, explicó Liggitt a The Associated Press, pensó mucho en su tía “Dolly”, un apodo de la infancia que se le quedó.
“¿Era feliz o no? ¿Estaba segura?” dijo Liggitt. “Todas estas preguntas que tenía, y resulta que estaba muerta”.
Los restos de Charleston fueron encontrados en octubre de 1978 en la pequeña localidad nevadense de Imlay, a unas dos horas al norte de Reno. En el interior de la bolsa, los agentes de la oficina del alguacil del C.0ondado Pershing, que inicialmente dirigió la investigación, encontraron también algunas prendas de ropa de mujer.
La autopsia reveló que los restos en descomposición pertenecían probablemente a una mujer de mediana edad, pero no pudo determinar la causa de la muerte, según la policía. Liggitt dijo que su tía tendría unos 68 años en el momento de su muerte.
El caso se introdujo posteriormente en el Sistema Nacional de Personas Desaparecidas y No Identificadas, junto con una representación del aspecto que los detectives pensaban que tenía la mujer en el momento de su muerte.
Según esa información, la mujer medía 5.5 pies y tenía el cabello pelirrojo o castaño. Los investigadores también creen que podría ser zurda. Entre las prendas encontradas junto a sus restos figuraban un suéter verde oscuro con un segurito blanco en la parte delantera, unos pantalones verde oscuro y un suéter rosa de manga larga.
En la primavera de 1979, se llamó a los detectives de la policía del estado de Nevada para que colaboraran en la investigación. Probaron la reconstrucción facial digital. Compararon los registros dentales con los de otras personas desaparecidas y casos sin resolver. Buscaron pistas en los reportajes sobre los restos mortales.
Pero sus esfuerzos fueron nulos.
El pasado mes de marzo, según la policía, se asociaron con Othram Inc, un laboratorio privado especializado en análisis genealógicos forenses que ha ayudado a cerrar innumerables casos sin resolver en todo el país.
En un comunicado de prensa separado, Othram dijo el miércoles que usaron el ADN tomado de los restos “para desarrollar un perfil completo de ADN de la mujer no identificada”, lo que llevó a los investigadores a dos sobrinas de Charleston que aún viven en Ohio.
Liggitt dijo que recibió la noticia en abril. Salía de casa cuando sonó el teléfono. No reconoció el número de fuera del estado, pero contestó de todos modos.
Al otro lado de la línea estaba el detective de la Policía Estatal de Nevada Sean Koester, que había tomado el caso sin resolver en octubre de 2022. Para entonces, dijo Koester, el caso llevaba inactivo más de 40 años.
Koester se presentó. Había estado intentando ponerse en contacto con ella y con su prima, Donna, dijo, para hablar sobre un grupo de restos humanos de 45 años.
“¿Ha encontrado a mi tía Dolly?”. recuerda Liggitt que le dijo al detective.
Poco después de esa llamada, Othram pudo vincular a Charleston con los restos no identificados usando una muestra de ADN de la prima de Liggitt.
Liggitt tiene ahora aproximadamente la misma edad que tenía Charleston al momento de su muerte y espera vivir lo suficiente para saber cómo y por qué mataron a su tía Dolly.