La depresión es una enfermedad de temer [II]
julio 4, 2014 - 4:01 pm
La historia de Laura, que a sus 16 años de edad, decidió quitarse la vida, es totalmente diferente a la de Juana. Laura, aun cuando presentaba todos los síntomas de depresión aguda, no fueron tratados a tiempo. Según cuenta su mamá (ama de casa) y su padre (doctor) Laura se alejó de todos, poco comía, su vida social era nula y nada la entusiasmaba en la vida.
“Luego después de su muerte, nos dimos cuenta que Laura era acosada en la escuela. Que no tenía un solo amigo y que pasaba los recreos en el baño. Nos dimos cuenta por un diario que guardaba debajo del colchón de su cama, porque la escuela jamás nos comunicó esto. Ellos dicen que nunca se percataron de nada, pero para nosotros es muy difícil creer que la escuela no viera nada anormal, en una niña que la acosan y le pegan, y además que pasa el recreo encerrada en el baño,” dijo su madre.
Según contaron en la entrevista anónima otorgada al periódico El Tiempo, en el momento de revisar el cuerpo de Laura, la niña presentaba laceraciones y perforaciones que ella misma se provocaba en su cuerpo. Laura tenía marcas por todas las partes no visibles de cuerpo. “Eso nos destrozó. Ver que ella misma se provocaba dolor”, dijo su padre.
La pareja dice que no todo es culpa del colegio o compañeros. Ellos dicen ser conscientes de no haber atendido el problema de Laura a tiempo. Aun cuando veían que su comportamiento no era adecuado, pensaron que era una etapa normal de los adolescentes. “La verdad no pensamos que Laurita estuviera en ese punto. Nosotros hablábamos en la cena, y aun cuando la notábamos algo parca, jamás nos contestó altiva ni grosera. Estaba distraída y alejada un poco, pero pensamos que esa era su personalidad, o algo que pasaría una vez superara la etapa de la adolescencia,” dijo la pareja de padres desconsolados.
En cuanto al Distrito Escolar del Condado Clark, por medio de una entrevista con El Tiempo, afirmó que él mismo cuenta con un programa para la prevención de suicidios dentro de su currículo de salud a partir del octavo grado y preparatoria. El programa SOS (Signs of Suicide) está implementado entre las escuelas del Condado Clark. SOS es un programa reconocido a nivel nacional que ayuda a prevenir el suicidio en adolescentes. En al menos dos estudios de investigación, el programa SOS mostró una reducción en los intentos de suicidio auto-reportados en un 40%.
No obstante es importante tener en cuenta que esto no es suficiente tratamiento si un joven muestra signos de depresión aguda, como los mencionados con anterioridad.
La coordinadora de currículo para la salud del CCSD, Shannon LaNeve, en entrevista exclusiva para el periódico El Tiempo, y quien está encargada del lado de la prevención dijo que la meta del programa es educar a los estudiantes y de esa forma prevenir el suicidio. Una de las formas, es aprender sobre las señales de alerta y saber cómo poder ayudar a los estudiantes que se encuentren en riesgo.
“Creo que este programa ayudará a nuestros jóvenes en riesgo de cometer suicidio. Como Distrito, creemos que es importante conocer las señales de alerta y tenemos que entrenar no solo a nuestros maestros y consejeros sino también a todo el personal escolar para que puedan acercarse a los jóvenes o saber qué hacer si los jóvenes se acercan a ellos”, aseguró LaNeve.
No obstante, es importante tener en cuenta que como Laura hay muchos jóvenes que se encierran en sí mismos y no buscan ningún tipo de ayuda para superar el problema. Como padres es fundamental estar al pendiente.
Cuando se trata de problemas de salud mental, los niños y los jóvenes del Condado Clark se encuentran entre los más vulnerables de la nación. La Dra. Christa Peterson, encargada de proyectos especiales para Nevada (PEP), en una entrevista telefónica dijo que aún existe un estigma grande asociado con las enfermedades o condiciones mentales, especialmente las enfermedades mentales en niños y adolescentes y eso es porque hace 15 años aún se culpaba a los padres por las enfermedades mentales de sus hijos, pero hoy sabemos que no es así. Debido a esa creencia en particular, aún hay un gran estigma en nuestra nación y más prevalente en la comunidad hispana.
“Muchos de los problemas de salud mental son causados por desbalances químicos o biológicos, así como también por ciertos traumas emocionales. Un niño puede mostrar señales de depresión desde los 3 o 4 años de edad pero generalmente la tasa más alta de depresión en adolescentes se da alrededor ve los 13 años de edad. Casi 15% de los jóvenes de esa edad tienen un trastorno depresivo” dijo Peterson.
Al menos 1 de cada 5 niños en el Condado Clark, están sufriendo problemas de salud mental y dos tercios de estos niños no obtienen la atención que necesitan. Un estudio reciente realizado por el CCSD encontró que casi una cuarta parte de los estudiantes de secundaria han pensado seriamente en suicidarse, y casi el 13% había intentado suicidarse.
“Los padres deben de contactar a su doctor si muestran señales de intento de suicidio, la salud mental de los jóvenes es igual de importante que la salud física” concluyó Peterson.
Alerta a los síntomas
Los padres, tutores o familiares deben estar muy atentos ante la presencia de determinados síntomas de la depresión como los siguientes:
- Cansancio permanente y falta de energía
- Dificultad para la concentración
- Cambios en el apetito. Lo general es que disminuya pero también hay ocasiones en que aumenta.
- Irritabilidad
- Pérdida del interés por actividades con las que antes se disfrutaba
- Sentimientos de desprecio hacia uno mismo
- Tristeza
- Pensamientos sobre la muerte o el suicidio
- Alteraciones del sueño
- Disminución del rendimiento escolar
- Aparición de actitudes desafiantes
- Distanciamiento del grupo de amigos
- Consumo de alcohol o drogas