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Investigación por mala conducta empañó el inicio de la carrera de un candidato a alguacil

Al principio de una carrera de casi tres décadas en el Departamento de Policía Metropolitana, Kevin McMahill, ahora uno de los principales candidatos a alguacil, fue objeto de una investigación interna que llevó a los altos mandos a recomendar su despido por mala conducta.

En cambio, McMahill ascendió en el escalafón hasta llegar a ser el segundo al mando del alguacil Joe Lombardo, un candidato a gobernador que ha apoyado a McMahill en la carrera para sustituirlo.

En una entrevista telefónica el jueves, McMahill negó la mala conducta.

“Fue un momento muy difícil de mi vida porque no ocurrió”, dijo.

Si las acusaciones fueran ciertas, añadió McMahill, nunca habría sido ascendido.

“Ascendí a todos los rangos, con cuatro alguaciles en la Policía Metropolitana, todos muy diferentes y diversos”, dijo.

Las acusaciones contra McMahill, que se retiró como subalguacil en 2020, se remontan a casi 27 años, a junio de 1995, cuando él y otro agente, Bill Stoops, que finalmente fue despedido del departamento, respondieron a un disturbio cerca de lo que entonces se conocía como Stratosphere.

Según los registros judiciales y los reportes de noticias, McMahill detuvo a un hombre y a una mujer en la calle antes de dejar que el hombre se fuera.

Cuando McMahill y Stoops inspeccionaron el bolso de la mujer, identificada como Carrie Lance, encontraron una pipa, cocaína crack, media botella de vino y una revista pornográfica, según los registros judiciales y un memorando interno obtenido por el Review-Journal.

“Enséñame tu… y te devolveré el vino”, dijo McMahill, usando una palabra del argot para referirse a los genitales femeninos, según el memorando de agosto de 1995 escrito por el entonces teniente de la Policía Metropolitana Stavros Anthony, ahora concejal de Las Vegas y candidato a vicegobernador.

El memorándum afirma que la mujer obedeció y se le devolvió el vino. Después, Stoops obligó a la mujer a ingerir la cocaína antes de liberarla, según el memorándum, que afirmaba que McMahill y Stoops “negaron posteriormente que estos hechos ocurrieron”.

Denuncia de asuntos internos

La entonces agente de la Policía Metropolitana Jennifer Clampit, la única mujer de una brigada de ocho miembros que patrullaba la zona en aquel momento, reportó el incidente a la oficina de asuntos internos del departamento y posteriormente demandó al departamento, alegando que una atmósfera de acoso sexual impregnaba el cuerpo en el verano de 1995.

Clampit testificó durante un juicio federal de 2002 sobre sus alegaciones que fue testigo del encuentro entre McMahill, Stoops y Lance, que llevaba falda.

“Y se refirieron a ella en plan: ‘Bueno, ¿eres hermafrodita, tienes pene?’”. testificó Clampit. “Y ella bromeó como diciendo: ‘Ja, ja, sí tengo’. Y los dos juntos le preguntaron: ‘Bueno, muéstranos; levántala y muéstranos’”.

La Policía Metropolitana llegó a un acuerdo de 4,900 dólares con Lance, según reportes de prensa de la época.

Los miembros del jurado en el juicio civil de Clampit determinaron finalmente que la agente había sido objeto de una conducta verbal o física de carácter sexual, pero reglamentaron en su contra y no determinaron que la conducta fuera inoportuna.

Durante el juicio, Anthony testificó que formaba parte de una investigación sobre las quejas de Clampit.

“Una vez que recibí la investigación de Asuntos Internos, la finalización de esa investigación, determiné que ambos oficiales debían ser despedidos”, dijo Anthony, según las transcripciones del tribunal.

McMahill, que para entonces había sido ascendido a sargento, también tomó el estrado.

“Niego cualquiera de las acusaciones que hizo Jennifer Clampit”, dijo. “No niego el hecho de que Carrie Lance fuera detenida”.

También dijo que negó las acusaciones durante una audiencia previa al despido de Stoops.

McMahill está compitiendo para reemplazar a Lombardo en una carrera a tres bandas para alguacil contra el ex asistente del alguacil y asambleísta de Nevada Tom Roberts y el veterano retirado de la Policía Metropolitana Stan Hyt. Roberts y Hyt declinaron hacer comentarios para este reportaje.

Según las declaraciones financieras presentadas ante el secretario de estado de Nevada en enero, McMahill lideraba a sus oponentes en la recaudación de fondos para la campaña con unos 1.3 millones de dólares. Le seguían Roberts, que había recaudado 114 mil dólares, y Hyt, que había recaudado 8,830 dólares.

Pruebas de detector de mentiras

El departamento nunca despidió a McMahill, a pesar de la recomendación de Anthony, aunque fue puesto bajo licencia administrativa por más de cuatro meses durante la investigación.

Según el memorándum de Anthony, el departamento se presentó a las pruebas de polígrafo de McMahill, Stoops y Clampit poco después del encuentro con Lance en 1995.

“El del oficial Clampit resultó veraz”, dice el documento. “Los oficiales Stoops y McMahill resultaron engañosos”.

No se presentaron cargos penales contra Stoops ni contra McMahill, que está casado con la subjefa de la Policía Metropolitana Kelly McMahill.

El jueves, Anthony dijo que no recordaba la investigación.

“Fui supervisor en la Policía Metropolitana durante la mayor parte de mi carrera, así que supervisé a miles de personas”, dijo.

En otra entrevista telefónica el jueves, el capitán retirado de la Policía Metropolitana, Mark Tavarez, recordó haber investigado las acusaciones como sargento y haber interrogado a los tres agentes.

Tavarez dijo que Clampit cambió su historia durante una audiencia previa al despido y echó toda la culpa a Stoops.

“Cuando hizo su denuncia inicial, metió a todos en el mismo saco, a Bill Stoops y a Kevin McMahill”, dijo.

Tavarez, que se retiró hace siete años, también cuestionó la fiabilidad de los polígrafos y dijo que cree que Kevin McMahill “será un gran alguacil”.

El candidato dijo que apoyaba firmemente el uso de cámaras corporales durante su etapa en la Policía Metropolitana, en parte por las acusaciones a las que se enfrentó al principio de su carrera.

“Ojalá hubiera tenido una cámara, porque me habría exculpado de forma rotunda”, le dijo McMahill al Review-Journal. “Ahora mismo no estaría hablando de esto”.

Contactada por teléfono el jueves, Clampit mantuvo sus acusaciones originales y negó haber cambiado su historia. Dijo que se había retirado en 2008.

En el juicio de 2002, Clampit recordó que Stoops, a quien ella consideraba un amigo, le señaló con el dedo en la cara después del encuentro con Lance y le dijo: “Ahora te tengo. Eres uno de los nuestros. Si nosotros caemos, tú caes. Es muy bueno tener algo sobre tu cabeza”.

Dijo que se subió a su auto y se fue.

“Me lo tomé como una amenaza”, declaró, mientras sollozaba, según indican las transcripciones del tribunal. “Estaba asustada; me sentía intimidada. No entendía qué demonios estaban haciendo. Así que me molestó durante mucho tiempo. Estaba muy confundida, estaba herida, no podía comer, tenía dolores de cabeza. Tuve pesadillas sobre él durante muchos años y que me iba a calumniar”.

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