El equipo de fútbol americano de BYU y la afición apoyan a familia de Henderson tras una tragedia
Si alguna vez hubo una historia que no necesitara una secuela, es esta de Austen Russell de nueve años.
Austen murió en mayo de 2015 después de que su padre, Troy Russell, lo atropellara accidentalmente con su camioneta en su casa de Henderson.
Luego, en la mañana del 8 de septiembre, Deedra Russell, la madre de Austen y esposa de Troy, resultó herida en un accidente en sentido contrario en Virgin River Gorge en el noroeste de Arizona. Los informes iniciales describieron sus lesiones como “potencialmente mortales”.
Pero su estado ha mejorado. Está en diálisis y se está preparando para una operación de brazo, y los miembros de la familia tienen la esperanza de que pueda ser extubada pronto.
Ha podido escribir mensajes y comunicarse moviendo la cabeza “sí” o “no”.
Troy Russell sigue en el hospital de St. George, Utah, atendiendo a su mujer e intentando cuidar del resto de su familia.
“Abraza a tu familia un poco más fuerte esta noche”, dijo desde el pasillo del hospital.
Visita a la universidad
La familia Russell es muy conocida en Henderson. Una página de Facebook, “In Loving Memory of Austen Russell”, tiene más de cuatro mil likes y es actualizada a menudo por Shannon Wolven, una amiga de la familia. Wolven ha estado publicando actualizaciones sobre el estado de Deedra durante la última semana.
El 4 de septiembre, la familia estaba en Allegiant Stadium para ver a sus queridos Cougars de Brigham Young University (BYU) ganar la temporada de fútbol americano contra Arizona. Unos días más tarde, Deedra planeó ayudar a su hijo Kyler a mudarse a la universidad para su primer año en BYU-Idaho.
Unos días después, Kyler condujo hasta la casa de un amigo para pasar la noche, con el plan de que Deedra lo siguiera y se reuniera con él allí durante la noche. Pero cuando Kyler se despertó por la mañana, su madre no aparecía por ningún lado.
Se conectó con el resto de su familia, y su aplicación Life360 mostró que ella estaba en algún lugar del Virgin River Gorge. Una llamada al Departamento de Seguridad Pública de Arizona inicialmente no consiguió que Troy Russell obtuviera ninguna información.
Luego, unos minutos más tarde, recibió una llamada. Un funcionario le dijo que Deedra había sufrido un accidente, pero que su estado era estable. Troy, junto con las dos hijas de la pareja, Payton y Maddie, se dirigió rápidamente al hospital de St. George.
Las lesiones eran mucho peores de lo que se había descrito inicialmente. Deedra Russell sufría una hemorragia interna e insuficiencia renal, además de una grave lesión en el brazo. Está conectada a un tubo de respiración desde entonces.
“Toda la razón por la que estamos aquí en la Tierra es para experimentar estas cosas por las que pasamos”, dijo Troy Russell. “El amor, el dolor, la traición, la pérdida. Lo único que realmente podemos controlar es nuestro albedrío, nuestra capacidad de tomar decisiones. De eso se trata la vida”.
Familia de BYU
El accidente coincidió con una gran semana para el equipo de fútbol de la BYU. Los Cougars iban a enfrentarse a Utah, su mayor rival y una espina clavada durante la última década. Los Utes no habían perdido el partido desde 2009.
La “Guerra Santa”, como se conoce el partido, también marcaría la primera vez desde 2019 que BYU tuviera fans en el estadio de Provo.
Collin Russell, de 20 años, estudiante de BYU e hijo mayor de Troy y Deedra, ya había planeado ir al partido el 11 de septiembre con su novia y su familia. Unos días antes del partido, estaba en una habitación de hospital en St. George con su madre y su padre.
Su padre le dijo que fuera al partido.
Los Russell han sido fans de BYU durante la mayor parte de sus vidas, con la excepción de Deedra, que creció siendo una gran fan de Utah.
Cuando Deedra estaba aplicando en las universidades, dijo Collin, llegó a aplicar a todas las universidades en Utah, excepto BYU. Entonces conoció a Troy.
“Ella quería a mi padre más que a Utah”, dijo.
Así que se convirtieron en una familia de BYU. Troy publicó la situación de Deedra en Cougar Board, un tablón de mensajes para los fans de BYU, y su mensaje recibió cientos de respuestas.
“Todo el foro está llorando contigo”, decía una respuesta.
Luego, la noche antes del partido, Troy recibió un mensaje de texto con algunos videos, entre ellos del entrenador de BYU, Kalani Sitake, y del quarterback Jaren Hall. En los videos, hay una mención constante: La familia de BYU.
Aunque Troy y Deedra no asistieron a BYU, el mensaje (de los jugadores, entrenadores y la afición) es más que claro. Todo el mundo está con ellos.
Los Cougars vencieron a los Utes por 26-17. Collin y el resto de la sección estudiantil de BYU irrumpieron en el campo.
“Esto lo pone en perspectiva”, dijo Troy unos días después. “¿Ayudó? Sí, pero en menor medida”.
Al día siguiente, Troy dijo: “Cuanto más pensaba en ello, el hecho de que BYU ganara me alegraba y me agradecía que se pusieran en contacto conmigo la noche antes de un gran partido. Todo el mundo que nos conoce sabe que somos grandes fans del fútbol americano de BYU. Así que mucha gente se puso en contacto conmigo para decirme que habían ganado para Deedra y su familia”.
Pocos detalles sobre el accidente
Las circunstancias que rodean el accidente aún no están claras. Un hombre fue arrestado inicialmente después del choque, pero no está claro a qué cargos se enfrenta, si es que hay alguno. Troy ha estado en contacto con la familia del hombre, haciéndole saber que lo perdona.
La Mohave County Sheriff’s Office aplazó los comentarios al Departamento de Seguridad Pública de Arizona, que no respondió a una solicitud de información sobre el estado del hombre.
Los médicos dijeron a la familia que se espera que Deedra se recupere completamente, aunque eso podría llevar dos años o más. Tendrá que permanecer en el hospital de Utah durante al menos dos meses.
Collin se está preparando para su misión mormona a finales de este año y está en Las Vegas con sus dos hermanas. Troy permanece en St. George.
No. 3
La familia celebra un evento cada año en memoria de Austen, y no es raro ver a la gente en la zona de Las Vegas con playeras con el número tres de Austen Russell.
Eso es porque el tres siempre fue el número de Austen en los deportes.
Desde entonces, Collin siempre se da cuenta cuando aparece ese número. Eran tres hermanos, Austen, Collin y Kyler. El jugador de baloncesto favorito de Collin es Dwyane Wade, que también llevaba el número tres.
El edificio del hospital en el que estará Deedra durante los próximos dos meses está al lado de un edificio con el número tres en el exterior.
BYU tenía mucha incertidumbre al llegar a esta temporada, ya que necesitaba sustituir al quarterback Zach Wilson, ahora novato en los New York Jets. Hall, un estudiante de segundo año, se ganó el puesto durante el campo de entrenamiento. El partido contra Utah fue su primer partido en casa como titular.
Lanzó para 149 yardas y tres touchdowns, añadiendo 92 yardas de carrera.
Cuando sonó el pitido final, que llevó a Collin y a otros miles de fans al campo, Hall lo celebró.
En la parte posterior de su camiseta estaba el número tres.
