Abrazos, oraciones y lágrimas marcan el 1º aniversario del tiroteo en Las Vegas
¿Cómo recuerdas algo que es probable que nadie olvide nunca?
La primera ceremonia comenzó poco después del amanecer del lunes, cuando 58 palomas llevaron los nombres de las víctimas al cielo.
La última de ellas terminó mucho después del anochecer, ya que los 58 nombres se recitaron en el Centro de Sanación Comunitaria de Las Vegas y cientos de personas se unieron en el Strip para rodear los terrenos del festival Route 91 Harvest con una cadena de humanidad.
En medio de todo, hubo velorios, dedicaciones, campañas de donación e incluso una boda, ya que la comunidad se manifestó con fuerza para conmemorar el primer aniversario del tiroteo del 1 de octubre.
Los residentes compartieron abrazos, recuerdos sombríos y sonrisas cuando los letreros de “Vegas Strong” en toda la ciudad sirvieron como un recordatorio de la determinación del valle.
Los sobrevivientes de fuera de la ciudad regresaron a Las Vegas para compartir el día con las únicas personas que realmente entienden lo que pasaron. Fue una reunión de graduados de lo más inimaginable.
“Regresé porque es hora de curarme”, admitió Beverly King de Malone, Nueva York, quien escapó con su sobrina, ilesa pero cambiada para siempre, cuando los disparos resonaron en el festival. “Necesitaba volver aquí para honrar a las personas que no llegaron a casa, a las personas que perdieron más que yo”.
Jessica Mount viajó desde San Dimas, California, con su esposo Brian y sus dos hijos pequeños para pasar el aniversario en Las Vegas.
Ella todavía lleva un fragmento de bala en su pie desde aquel día.
“Me ayuda mucho, porque mucha gente no lo sabe”, indicó Mount mientras recorría la exhibición del Route 91 en el Museo del Condado de Clark. “Venir aquí y ver esto me importa mucho”.
El día comenzó con una remembranza matutina en el Centro de Gobierno del Condado de Clark, donde el gobernador Brian Sandoval, el alguacil Joe Lombardo y otros hablaron en memoria de los muertos en el ataque.
“Había dos opciones, renunciar o elevar a otros, elegimos esta última”, afirmó Lombardo durante la ceremonia.
El evento finalizó con 58 segundos de silencio y el lanzamiento de las 58 palomas.
Unas horas más tarde, más de 200 personas se reunieron para un emotivo velorio de oraciones en los escalones del ayuntamiento de Las Vegas.
En otros lugares, la gente buscaba marcar el día con actos de bien.
El Centro Médico Universitario y la compañía de servicios de sangre Vitalant se unieron para una campaña de donación de sangre de todo el día en el Centro de Convenciones de Las Vegas, mientras que varios jugadores de los Caballeros Dorados presentaron medallas de valor a 21 miembros del equipo médico de la ambulancia comunitaria que asistieron al festival cuando comenzó el tiroteo.
En el cartel de “Bienvenidos al Fabuloso Las Vegas”, el residente de la ciudad Matt Covert llevó a sus hijas Lily, de 9 años, y Audrey, de 6, a ver el memorial que recientemente regresó al sitio. Las dos chicas llevaban camisetas de “Vegas Strong” hechas por una amiga de su madre que sobrevivió.
Los tres se sentaron tranquilamente en el césped artificial, disfrutando de los tributos en forma de corazón decorados con fotos de las víctimas.
“Tenía mis dudas para hacer que bajaran, realmente no sabía cómo explicarles la situación”, detalló el padre de las niñas. “No estuvieron allí, así que siento que no deberían estar aquí. Pero se siente bien venir y presentar nuestros respetos”.
Más tarde, bajo una ardiente puesta de sol que parecía hecha a medida para la ocasión, una multitud de cientos se reunió para dedicar un nuevo muro conmemorativo a las víctimas en el jardín de curación del Centro.
Luego, a las 10:05 p.m., un año después de que sonaran los primeros disparos, los nombres de los caídos se leyeron en voz alta, uno por uno.
