Los Raiders arrasan en el debut de Antonio Pierce y hablan de un ‘nuevo comienzo’
En su primer día como nuevo líder de los Raiders la semana pasada, Antonio Pierce entregó a cada jugador una hoja en blanco. Fue un gesto sencillo, pero esencialmente les permitió desvanecer todo lo sucedido antes de la noche del martes y centrarse en el futuro.
A partir de esa liberación, se había plantado una semilla de cambio y, en última instancia, surgió de la tierra la contundente victoria del domingo por 30-6 sobre los Giants.
En el transcurso de tres horas de apasionado fútbol americano, la decepción y la tensión de los últimos 22 meses bajo el mando del anterior entrenador, Josh McDaniels, prácticamente habían desaparecido.
“Un nuevo comienzo”, dijo el safety Tre’von Moehrig después de que los Raiders mejoraran a 4-5.
McDaniels fue despedido el martes, junto con el gerente general Dave Ziegler y el coordinador ofensivo Mick Lombardi. Pierce, ganador del Super Bowl con los Giants y entrenador de linebackers de los Raiders las dos últimas temporadas, sustituyó a McDaniels de forma interina. Inmediatamente se puso a trabajar en la psique del equipo, promoviendo las sonrisas y la pasión por el trabajo e implorando a sus jugadores que usaran los cambios radicales como un botón de reinicio.
“Borrón y cuenta nueva”, dijo el cornerback Nate Hobbs.
La sensación de novedad se sintió de una esquina a otra del Allegiant Stadium en una tarde festiva que potencialmente cambió la trayectoria del resto de la temporada.
“No es una crítica a nadie, solo que la energía en el edificio era completamente diferente”, dijo el tackle Jermaine Eluemunor. “Solo teníamos una arrogancia sobre nosotros mismos y solo queríamos jugar al fútbol americano y estar ahí fuera”.
La ofensiva de los Raiders, que nunca se despegó de la pesada mano de McDaniels, de repente se volvió creativa, rítmica y emocionante. Los Raiders no habían alcanzado los 20 puntos como ataque en toda la temporada, pero con Josh Jacobs corriendo libre, fácil y escurridizo, varios jugadores tocando el balón y el quarterback novato Aidan O’Connell jugando con confianza y eficacia, los Raiders endosaron 24 puntos a los Giants en la primera parte.
A partir de ese momento, se apoyaron en gran medida en una defensa que produjo ocho sacos, tres de ellos por Maxx Crosby, dos intercepciones y cedió solo 277 yardas de ataque total.
O’Connell, que sustituyó a Jimmy Garoppolo como quarterback titular, terminó 16 de 25 para 209 yardas. Jugando de forma competente y evitando errores, supervisó seis anotaciones y nunca puso a su defensa en una posición precaria.
Jacobs corrió para un máximo de temporada de 98 yardas y dos touchdowns. Ocho jugadores atraparon pases, incluido el novato Tre Tucker, que recibió un lanzamiento de 50 yardas de O’Connell para preparar el segundo touchdown de Jacobs y aumentar la ventaja a 21-0.
Hobbs preparó otro intento de anotar cuando interceptó a Tommy DeVito al final de la primera parte en la 25 de los Giants. Daniel Carlson pateó uno de sus tres goles de campo tres jugadas más tarde para anotar el 24-0.
Sí, fue un mal equipo de los Giants que jugó la mayor parte del partido con DeVito como quarterback en sustitución de Daniel Jones, que abandonó el partido a principios del segundo cuarto con una lesión de rodilla que parece haber puesto fin a la temporada. Pero hay que remontarse a la Semana 10 de la temporada 2020 para encontrar una victoria más abultada de los Raiders.
Las bases se sentaron cinco días antes, cuando Pierce, a quien sus jugadores se refieren cariñosamente como AP, arrugó las primeras ocho semanas de la temporada bajo McDaniels y las tiró a la basura. Los Raiders escucharon el mensaje alto y claro.
“Escribimos nuestro propio guion”, dijo Hobbs. “Escribimos nuestra propia historia. Hoy, creo que escribimos ese primer capítulo, esa primera página”.
El defensive lineman Adam Butler, autor de dos tacleadas y un sack, dijo: “Cuando te aferras al pasado, siempre te pesa. Son como cadenas que te frenan. AP hizo un gran trabajo para que soltáramos esas cadenas. Eso es exactamente lo que hemos hecho hoy”.
Ese fue el tema durante toda la semana, e incluyó un entrenamiento físico de una hora de duración el jueves, seguido de un entrenamiento muy competitivo el viernes en el que el primer equipo ofensivo y el primer equipo defensivo se enfrentaron durante un animado periodo de ejercicios de dos minutos.
“Solo con estar ahí fuera ya se notaba que todo el mundo quería estar ahí fuera. Todos querían mejorar”, dijo Eluemunor. “Y que AP nos empujara todo lo que pudiera, pero también que fuera solo el líder que necesitábamos. Solo necesitamos eso. Y la energía que aporta, quieres ganar por un tipo así”.
Todo culminó con el tipo de victoria que puede servir de punto de inflexión a una temporada.
“Obviamente es un nuevo comienzo”, dijo el wide receiver Davante Adams, que realizó cuatro recepciones para 34 yardas. “Ahora tenemos un nuevo líder, alguien a quien podemos respaldar”.
