La NHL se enfrenta a obstáculos antes iniciar la temporada 2020-21
octubre 1, 2020 - 11:04 am
La temporada 2019-20 de la NHL terminó casi 12 meses después de haber comenzado con Tampa Bay Lightning levantando la Copa Stanley el lunes en Edmonton, Alberta.
Nadie sabe cuándo comenzará la próxima.
La NHL tiene fechas tentativas para el comienzo de los campos de entrenamiento (17 de noviembre) y el comienzo de la temporada 2020-2021 (1º de diciembre). Pero poca gente del hockey piensa que esas fechas son realistas.
“Si yo fuera un hombre de apuestas, diría que vamos a empezar más tarde de lo proyectado”, mencionó el centro de los Golden Knights, Paul Stastny.
Deja muchas más preguntas que respuestas después de que la liga y los jugadores trabajaron tan duro para organizar una postemporada en dos burbujas canadienses. Hay que tomar numerosas decisiones antes de que se vuelvan a lanzar los pucks.
“Cualquier cosa que alguien sugiera, lea, escriba o comente sobre la próxima temporada no es más que una especulación”, comentó el comisionado Gary Bettman el 19 de septiembre. “El 1º de diciembre siempre ha sido una fecha ficticia. No me sorprendería si cae hacia finales de diciembre. Podría ser en enero”.
La NHL aún está tratando con muchos de los mismos problemas que causaron que se retirara a zonas seguras en Toronto y Edmonton.
La pandemia de COVID-19 sigue siendo una amenaza, los viajes siguen siendo complicados, la capacidad de tener espectadores sigue estando en duda. Esos problemas tampoco parecen desaparecer pronto.
Por eso tiene sentido para la NHL retrasar potencialmente su temporada y ganar más tiempo para tomar decisiones mejor informadas. Bettman lo comparó con el diligente proceso de la liga al seleccionar Toronto y Edmonton como sus ciudades centrales.
Sin embargo, la NHL no puede esperar para siempre. Una temporada típica comienza en octubre y termina en junio. Su calendario está ahora fuera de lugar.
“Mi preferencia sería permanecer fuera del verano tanto como sea posible”, comentó Bettman, quien agregó que todavía quiere una temporada regular de 82 partidos.
Aún así, incluso retrasando un poco su comienzo le dará a la liga más tiempo para determinar cómo será la próxima temporada. ¿Pondrá en escena partidos en casa, como lo han hecho la NFL y la Major League Baseball? ¿O tendrá que volver a las burbujas para asegurar la salud y la seguridad de todos?
Esta última opción es probablemente el último recurso. Pedir a los jugadores que dejen a sus familias y amigos y que pasen poco tiempo fuera para perseguir una Copa es una cosa. Será mucho más difícil convencer a la Asociación de Jugadores de la NHL para que lo haga en los partidos de la temporada regular.
“Espero que eso no vuelva a suceder”, comentó el alero izquierdo de los Knights, Max Pacioretty. “Fue genial pasar tiempo con mis compañeros de equipo y tener la oportunidad de jugar por el premio final, pero espero que el mundo dé un giro a mejor aquí y que podamos recuperar algo de normalidad”.
Jugar en casa tiene sus propios desafíos. En primer lugar, ¿cómo manejará la liga los viajes? La NFL juega una vez a la semana, así que los viajes no son un problema importante. La MLB jugó una temporada regular de 60 partidos y limitó los equipos a un programa regional. Eso podría funcionar incluso durante una parte de la temporada de hockey, pero entonces entra en juego la frontera canadiense.
Las restricciones a los viajes no esenciales allí significaron que los Blue Jays de Toronto se vieron obligados a jugar en Buffalo, Nueva York. Es un problema mucho mayor para la NHL, que tiene siete equipos canadienses.
Incluso si la liga puede hacer un programa, ¿se permitirán espectadores? Si es así, ¿cuántos?
La puerta se abrió para que los Knights tuvieran fans el martes cuando el gobernador Steve Sisolak declaró que las instalaciones con límites de capacidad superiores a dos mil 500 podrán albergar el 10 por ciento de su capacidad total. Eso significa que T-Mobile Arena podría albergar unos mil 800 aficionados.
Varios equipos de la NFL están permitiendo multitudes socialmente distantes, pero la NHL no se ha comprometido a nada.
“Vamos a hacer lo que sea seguro”, aseveró el subcomisionado, Bill Daly. “Obviamente todos estamos observando con interés lo que sucede en las ligas europeas de hockey y sus políticas en relación con los aficionados, y la Liga Nacional de Fútbol y lo que sucede en el atletismo universitario. Todos esos son puntos de datos valiosos que tendremos que considerar cuando llegue el momento de empezar a tomar decisiones”.
Incluso teniendo multitudes limitadas sería enorme para la NHL. Bettman estimó que al menos el 50 por ciento de los ingresos de la liga provienen directa o indirectamente (estacionamiento, concesiones, mercancía) de la afluencia. Insistió en que la NHL estaba en buena forma financiera pese a la pandemia, pero unos pocos dólares extra no harían daño.
Bettman también dijo que es posible que la liga empiece sin fans, se mueva a multitudes limitadas y posiblemente tenga los edificios llenos al final de la temporada.
“La forma en que empecemos no está necesariamente relacionada con la forma en que vamos a terminar”, señaló.
Pase lo que pase, será una de las temporadas regulares más extrañas en la historia de la liga, después de una de las temporadas posteriores más extrañas de la historia de la liga. La NHL, a pesar de numerosos obstáculos, encontró la manera de otorgar una Copa Stanley. Ahora el proceso comienza a descubrir cómo hacerlo en 2021.
“Esa es una pregunta para todos”, añadió Stastny. “¿Quién sabe? ¿Quién sabe cuánto cambia en una, dos o tres semanas?”