86 escuelas del CCSD destacadan por sus logros y crecimiento
Es posible que la Hancock Elementary School solo tenga una estrella en las clasificaciones estatales de Nevada, pero entró en el cuadro de honor en el Distrito Escolar del Condado Clark (CCSD).
Además de honrar a las escuelas que habían obtenido las cinco primeras estrellas en el sistema de clasificación del estado, la superintendente interina Brenda Larsen-Mitchell dijo que el distrito iba a “sacudir un poco las cosas” este año y ampliar su cuadro de honor para incluir a las escuelas que habían mejorado los puntajes en 10 o más puntos.
En total, 86 escuelas fueron celebradas el martes por la mañana en Windmill Library.
“Tenemos que celebrar ese crecimiento porque vamos en la dirección correcta”, dijo Larsen-Mitchell a la multitud.
En Hancock, esa dirección no es solo hacia las cinco estrellas, sino hacia SOAR. La directora Frances Lucero dijo que a la escuela se le ocurrió el acrónimo SOAR para representar su objetivo de ser ciudadanos exitosos, halcones sobresalientes, ciudadanos activamente comprometidos y respetuosos.
“Tenemos que perfeccionar dónde estamos y apreciar dónde estamos y reconocer el crecimiento que estamos haciendo”, dijo Lucero al Las Vegas Review-Journal. “Tenemos que encontrar maneras de reconocer todo lo positivo que está sucediendo en el CCSD, porque, desafortunadamente, hay otras cosas que están eclipsando todas las grandes cosas que están sucediendo en estas escuelas”.
Larsen-Mitchell agradeció a las escuelas por su vulnerabilidad, afirmando que habían aprendido unas junto a otras. Destacó las metas de aprendizaje del Nivel 1, algo que la directora Rebecca Mestaz Lyon dijo al Review-Journal que había sido fundamental para el crecimiento de 30 puntos de Heard Elementary School. Señaló que a veces puede ser más difícil pasar de una escuela de una estrella a una escuela de tres estrellas que pasar de cuatro a cinco estrellas.
“Por favor, cuelguen estos estandartes con orgullo”, dijo la presidenta de la Junta Escolar del Condado Clark, Evelyn García Morales, a la multitud, alentando a las escuelas a continuar esforzándose por la excelencia.
Muchas de las escuelas que mejoraron el año pasado han enfatizado la importancia del apoyo entre los educadores dentro de las escuelas.
“No hacemos esto solos”, dijo Mestaz Lyon. “Es realmente un equipo”.
En Lee Antonello Elementary School, que pasó de una a tres estrellas el año pasado, la directora Kathi Rozek también destacó el fuerte apoyo entre su personal.
“Todos los cuerpos que están ahí, están en esto por los niños todos los días”, dijo Rozek al Review-Journal la semana pasada.
Nicole Martin, que ha enseñado allí durante 26 años, se hizo eco de ese sentimiento. Además del apoyo que recibió de su directora, también describió el ambiente de colaboración entre los maestros, quienes aprendieron unos de otros a servir mejor a los niños.
“Lo hacemos por los estudiantes”, dijo Mestaz Lyon. “Mis niños en el lado este son increíbles y se merecen lo mejor”.
