49°F
weather icon Clear

Crisis de mercado: tras victoria de Claudia Sheinbaum, el peso se devalúa

Actualizado June 4, 2024 - 11:18 am

CIUDAD DE MÉXICO (AP) - Horas después de declarar su victoria, la recién electa presidenta de México, la primera mujer en ganar el cargo, enfrentó el lunes un desplome de los mercados y un duro camino hacia la reconciliación de un país profundamente dividido por el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador.

Claudia Sheinbaum ha prometido continuar el curso político establecido por su predecesor populista a pesar del descontento generalizado por la persistente violencia de los cárteles, el debilitamiento de las instituciones democráticas y los temores entre los inversionistas de que un entorno ya hostil podría llegar a ser mucho, mucho peor.

En las horas de negociación posteriores al anuncio de los resultados de las elecciones, el peso mexicano perdió un 3.5 por ciento de su valor, hasta situarse en torno a 17.62 por dólar, y la bolsa mexicana se desplomó más de un 5 por ciento, dijo Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base, con sede en Nuevo León.

Siller señaló que la victoria de Sheinbaum, junto con una aparente supermayoría en el Congreso para su partido Morena, “abrió la posibilidad de cambios en la Constitución, lo que altera, o mejor dicho, deteriora el balance de riesgo de México, provocando la salida de capitales del país”.

La fortaleza del peso -que ha ganado terreno frente al dólar gracias al aumento de las remesas en el último año- era algo que López Obrador consideraba un logro suyo. Pero los analistas llevan tiempo sugiriendo que la moneda mexicana está sobrevalorada.

Con palabras como “fuga de capitales” y “lunes negro” sobrevolando los mercados financieros, era urgente tomar medidas rápidas para calmarlos. Pero la reacción inmediata del equipo de Sheinbaum pareció confusa: anunciaron -y luego cancelaron rápidamente- planes para que diera una conferencia de prensa.

López Obrador parecía decidido el lunes a llevar a cabo sus cambios constitucionales altamente divisivos -muchos de los cuales los opositores temen que debilitarán fatalmente la democracia de México- antes de dejar el cargo el 30 de septiembre.

El partido Morena que López Obrador fundó y en el que sigue siendo mucho más popular personalmente que Sheinbaum, parecía estar en camino de ganar la mayoría de dos tercios necesaria para cambiar la Constitución. López Obrador ya ha expuesto 20 cambios constitucionales que planea presentar, incluida la eliminación de los organismos de supervisión independientes y límites más estrictos a la inversión privada.

Esto preocupa a los inversionistas extranjeros. López Obrador ya ha tomado medidas enérgicas contra la inversión privada y extranjera en el sector energético, y ahora quiere prohibir nuevos sitios industriales en cualquier zona de México que sufra estrés hídrico -esencialmente todo el norte del país, económicamente vibrante-.

Pero otras estipulaciones políticas también preocupan y dividen a los mexicanos.

“El clima de polarización política ha empeorado durante la actual administración”, escribió el director de Moody’s Analytics, Alfredo Coutiño, en un reporte el lunes. “El país está significativamente dividido y requerirá del liderazgo político del nuevo presidente para restaurar la unidad nacional”.

Sheinbaum parecía consciente de ello, pero no estaba claro cómo podría hacerlo.

“Aunque la mayoría de la gente respaldó nuestro proyecto, nuestro deber siempre será velar por todos y cada uno de los mexicanos, sin distinciones”, dijo la presidenta electa en su discurso de victoria, después de que los primeros recuentos de votos, largamente demorados, le dieran un aplastante margen de victoria, superior incluso al que obtuvo López Obrador en 2018.

Con cerca del 78 por ciento de los votos escrutados, Sheinbaum tenía alrededor del 59 por ciento de los votos, aproximadamente el doble que su competidora más cercana Xóchitl Gálvez, que obtuvo alrededor del 28 por ciento.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, emitió un comunicado en el que felicitaba a Sheinbaum por su “histórica” elección y afirmaba: “Espero trabajar estrechamente con la presidenta electa Sheinbaum en el espíritu de colaboración y amistad que refleja los duraderos lazos entre nuestros dos países”.

Sheinbaum respondió rápidamente en un comunicado que “estoy convencida de que seguiremos colaborando en beneficio de nuestros pueblos y nuestros países, como vecinos, socios y amigos que somos, con el respeto que merecen nuestras soberanías”.

La relación bilateral se ha complicado por la negativa de López Obrador a reconocer que los cárteles mexicanos producen el opioide sintético fentanilo que mata a decenas de miles de estadounidenses cada año. Bajo su gobierno, sin embargo, México ha demostrado estar más que dispuesto a tratar de evitar que los migrantes lleguen a la frontera con Estados Unidos, una valiosa contribución para la administración de Biden.

No está claro si la cooperación antidrogas de México -que sufrió bajo López Obrador- mejorará bajo el mandato Sheinbaum.

Lo más leído
LO ÚLTIMO
Más historias para ti