La CNTE toma el mando de Morena
diciembre 13, 2013 - 5:05 pm
En lo dicho, sin López Obrador su movimiento, Morena, está en la orfandad de liderazgos.
Ayer sus “pacíficos” seguidores entraron en acción contra los resguardos puestos afuera de la Cámara de Senadores. Derribaron vallas a “pacíficos” golpes y garrotazos.
El hijo de López Obrador llegó al “cerco” en torno al Senado poco después de la una de la tarde y dijo que esos actos de violencia “nada tienen que ver con nuestro movimiento”.
Entonces, si los autores de la violencia no fueron los seguidores de AMLO, ¿quiénes fueron?
Durante el mitin del domingo López Obrador dijo que el cerco al Senado sería pacífico, y no fue pacífico.
Los agresores se detuvieron al ver la superioridad numérica de la Policía Federal, que acudió a cubrir el boquete que hicieron los vándalos que siguen al “pacifista”.
Así de falsos son sus discursos pacifistas en el Zócalo capitalino y entrevistas con sus periodistas elegidos.
Así de falsos son sus argumentos para enardecer a gente que les cree el cuento de que el PRI y el PAN “van a privatizar Pemex” con la reforma energética.
El deslinde de López Beltrán no es creíble y es tan falso como las acciones “pacíficas” a las que convoca el ex candidato presidencial.
Se trata de un pésimo debut de un joven al que se le desea éxito en la política, siempre que no tenga el espíritu manipulador ni la vocación totalitaria de su padre.
Los autores de los actos violentos de ayer fueron miembros de la CNTE, el grupo al que AMLO ha consentido y apoyado sin restricciones.
En los recientes mítines, López Obrador ha invitado al templete a los líderes de la CNTE. Con ellos se ha retratado. Y ellos han sido oradores en esas convocatorias a cercar el Senado y los Congresos estatales.
¿Se extraña el joven López Beltrán que el grupo de maestros, cuyos líderes exigen la liberación de secuestradores en Oaxaca, actúen de manera violenta?
Que no se extrañe tanto y que vea cómo son sus compañeros de viaje. O que asuma una postura categórica en contra de la violencia de la CNTE.
Pero no lo va a hacer. Es que ante la falta de liderazgos en Morena, el mando operativo en las acciones contra la reforma energética lo tomó la CNTE.
Sí, ese grupo de cuyos actos “pacíficos” hemos sido testigos en el Distrito Federal y han sido víctimas en Oaxaca, Chiapas, Guerrero y Michoacán.
Lo que quieren hacer Morena y la CNTE es impedir que el parlamento cumpla su función democrática elemental: parlamentar.
En su espíritu antidemocrático, no toleran que el Senado cumpla su tarea de dictaminar, discutir y votar un proyecto de reformas.