Préstamos “Compre ahora, pague después” presentan riesgos para comunidad latina
enero 25, 2022 - 7:00 pm
“Compre ahora, pague después” (BNPL, por sus siglas en inglés) es un producto nuevo para financiar compras que es promocionado como una alternativa a los préstamos tradicionales. Sin embargo, a medida que ha ganado popularidad, hemos visto varios problemas que deben abordarse, como la falta de términos transparentes, el enfoque a consumidores con menos opciones de crédito, falta de supervisión regulatoria, y las complicadas políticas de devolución.
En particular, las devoluciones financiadas con BNPL después de las festividades pueden ser más complicadas y frustrantes. Según un estudio de 2021, el 42% de los compradores navideños planeaban devolver al menos un regalo, incluso antes de recibirlos. Miembros de la llamada Generación Z fueron los más propensos a devolver todos sus regalos, mientras que el 57% de los encuestados dijeron que harían alguna devolución.
Una gran cantidad de consumidores respondieron que probablemente usarían préstamos BNPL para comprar sus regalos durante la última temporada navideña. Sin embargo, no todos los consumidores se dan cuenta de que estos productos no ofrecen las mismas protecciones contra disputas que las tarjetas de crédito, ya que una compañía terciaria puede continuar tomando pagos de su cuenta al menos hasta que el comerciante y el prestamista resuelvan la devolución. Además, aunque muchos prestamistas BNPL ofrezcan sus productos como alternativas más amigables al crédito o cuentas bancarias, estos pueden cobrar intereses o tarifas por los pagos atrasados. De hecho, aproximadamente a siete de cada 10 usuarios de un préstamo BNPL se les han cobrado intereses o tarifas por pagos atrasados.
La población latina en Estados Unidos alcanzó los 62.1 millones en 2020, frente a los 50.5 millones de la década anterior, según el Pew Research Center. Cuando dejamos que las compañías con productos abusivos se puedan enfocar en nuestra comunidad, esto empeora la confianza y el acceso a los productos y servicios financieros seguros y asequibles. Los productos “Compre ahora, pague después” son a crédito, y los proveedores deben cumplir con los mismos estándares que otras compañías de préstamos.
Investigaciones han demostrado que los proveedores de préstamos abusivos similares, como los préstamos de día de pago, se dirigen a los latinos y prestatarios de color. Es importante que los consumidores latinos tengan cuidado si utilizan el sistema de pago BNPL. Hasta que la oficina federal que regula estos préstamos, la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB, por sus siglas en inglés), empiece a supervisar a las empresas que brindan este tipo de préstamos, tenemos que estar bien atentos si utilizamos este método de financiamiento.
La pandemia generó un aumento en las compras en línea y los expertos dicen que las compras BNPL solo incrementarán. Los pagos en línea realizados con BNPL ascendieron a $19 mil millones el año pasado en Estados Unidos.
BNPL ya está mostrando una mayor popularidad entre los latinos. Klarna, un proveedor BNPL con presencia en 78,000 tiendas físicas y más de 250,000 vendedores en todo el mundo, lanzó una aplicación en español en el verano de 2020 y vio más de 150,000 usuarios activos antes de fin de año. También anunció 20 millones de clientes estadounidenses en agosto de 2021, aunque no compartió información demográfica. La compañía afirmó que su éxito con la aplicación en español se debe en parte a que la comunidad Latina está a la vanguardia “en lo que respecta al uso de servicios digitales y la adopción de nuevos dispositivos”.
Incluso con su corta historia, los usuarios BNPL potencialmente se verán afectados con este sistema de pago. Los consumidores latinos deben desconfiar de cualquier cosa que parezca demasiado buena para ser verdad, porque la gran mayoría de las veces lo es y los consumidores terminan pagando el precio.
El reciente anuncio de la CFPB de que abriría una investigación sobre los prestamistas BNPL debe aplaudirse como un buen primer paso para proteger a los prestatarios de color. Sin embargo, la oficina debe usar su autoridad para garantizar que las comunidades hispanas no sean objeto de prácticas injustas, engañosas o abusivas por parte de estos prestamistas, como nos ha ocurrido en el pasado con otros productos de financiamiento que terminaron siendo costosos y dañinos.
*Marisabel Torres, es la directora de asuntos políticos de California para el Centro para Prestamos Responsables (CRL, por sus siglas en inglés).