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Cinco ciclistas muertos y otros cuatro heridos en accidente de carretera

Michael Anderson estaba pedaleando junto a algunos de sus amigos más cercanos el jueves en un tramo de carretera cerca de Searchlight, rodeado de kilómetros de desierto abierto, cuando un camión de caja se estrelló contra el grupo de casi 20 ciclistas y su vehículo de escolta de seguridad.

Cuatro hombres y una mujer murieron, mientras que otros cuatro resultaron heridos, incluido el conductor del vehículo escolta. Fue el accidente de vehículo contra ciclistas más mortífero en Nevada desde 2004, el primer año para el que se dispone de datos estatales sobre ese tipo de accidentes.

“Fue lo peor que he visto en mi vida”, dijo Anderson, ex policía de Las Vegas, el jueves por la tarde mientras luchaba contra las lágrimas.

El accidente se produjo a las 9:40 a.m. en los carriles sur de la U.S. Highway 95, que tiene un límite de velocidad de 75 mph, cerca de Nelson Road.

Mensaje del gobernador

Anderson dijo que el grupo había salido temprano el jueves del M Resort en Henderson para completar el Nipton Loop de aproximadamente 130 millas (como lo habíann hecho cada año durante los últimos 15 años).

Pero a medida que el grupo se acercaba a Searchlight (una ciudad no incorporada a unos 80 km al sur de Las Vegas) los vientos comenzaron a aumentar.

Según Anderson, fue entonces cuando unos siete ciclistas se separaron del grupo más grande de ciclistas, deslizándose detrás de su vehículo de escolta de seguridad para cubrirse. Anderson se quedó con el grupo más grande.

Y de repente, un camión blanco sin marcas golpeó a los ciclistas por detrás, inmovilizándolos contra el vehículo escolta, un Subaru plateado que transportaba comida, agua y neumáticos de repuesto.

“Todos ellos fueron golpeados”, dijo Anderson sobre sus amigos que habían estado viajando detrás del vehículo escolta, que fue empujado hacia adelante en los otros ciclistas después del impacto inicial.

Los cinco ciclistas que no sobrevivieron al choque fueron declarados muertos en el lugar.

De los tres ciclistas heridos, uno fue trasladado en avión al University Medical Center en estado crítico, otro fue llevado en ambulancia con heridas que esperan le den oportunidad de vivir y un tercero tenía heridas leves y se negó a ir al hospital. El conductor del Subaru fue llevado al Hospital y Centro Médico Sunrise.

El gobernador Steve Sisolak ofreció sus condolencias en Twitter unas horas después: “Quedé devastado al escuchar esta noticia esta mañana. Kathy y yo enviamos todo nuestro amor a las familias afectadas y a los que están en la escena respondiendo a la situación”.

Si el accidente no hubiera ocurrido, el grupo habría continuado desde Searchlight a Nipton y Jean antes de volver al M Resort a lo largo de la Interestatal 15.

“Atletas buenos y fuertes”

Anderson, que habló con un grupo de reporteros a unas 12 millas de donde vio morir a sus amigos, no mencionó ninguna circunstancia especial en torno al viaje en grupo de este año.

Pero Lelani González, gerente de Pro Cyclery, una tienda local de bicicletas, le comentó al Las Vegas Review-Journal que el grupo estaba en un paseo informal para celebrar el retiro de uno de los ciclistas.

Anderson se retiró el mes pasado después de 22 años en el Departamento de Policía Metropolitana.

González dijo que uno de los empleados de la tienda había estado en el viaje y sobrevivió, aunque era obvio, incluso en una breve llamada telefónica, que estaba sacudido por el evento.

“Estaba fuera de sí”, dijo. “Ni siquiera podía hablar”.

El agente Travis Smaka, portavoz de la Patrulla de Carreteras de Nevada, que dirige la investigación del accidente, dijo el jueves que no había información disponible sobre las víctimas, incluyendo edades o ciudades de residencia.

Amigos identificaron más tarde a una víctima femenina como la residente de Las Vegas, Erin Ray, una agente inmobiliaria de 43 años y ávida ciclista.

La noticia del accidente y de sus víctimas se difundió rápidamente el jueves en la comunidad ciclista del sur de Nevada, según Cheri Tillman, copropietaria de la tienda de bicicletas.

“Todos los que hemos escuchado que han resultado heridos o muertos son muy conocidos en la comunidad ciclista”, le dijo al Review-Journal, añadiendo que muchos de los ciclistas que formaban parte del grupo de ciclistas son clientes habituales de su tienda. “Todos son buenos y fuertes atletas”.

La oficina del forense del Condado Clark identificará a los ciclistas después de que sus familias hayan sido notificadas de sus muertes, lo que eleva a ocho el número de ciclistas muertos en las carreteras del Condado Clark este año. En todo el estado, según el Departamento de Seguridad Pública de Nevada, esa cifra salta a 10.

Incapacidad para manejar

Durante horas después del accidente, la U.S. 95 fue cerrada en ambas direcciones para la investigación y los esfuerzos de limpieza.

Lo que causó que el camión golpeara a los ciclistas estaba siendo investigado el jueves, pero Smaka, el agente de la Patrulla de Carreteras, comentó que no se sospechaba que hubiera impedimentos para manejar y que el conductor del camión no herido estaba cooperando con los investigadores.

La ley de Nevada requiere que los conductores mantengan al menos tres pies de espacio cuando pasen a los ciclistas.

Alan Snel, un entusiasta del ciclismo de Las Vegas desde hace mucho tiempo y un autor que hace campaña para aumentar la seguridad de los ciclistas, declaró el jueves, “Como ciclista, podrías hacer todo absolutamente correcto, y aún así podrías quedar mutilado o morir”.

Snel fue gravemente herido en 2017 cuando fue atropellado por un coche mientras pedaleaba en Florida y desde entonces ha sido un fuerte defensor de las reformas de seguridad de los ciclistas en Estados Unidos.

Horas después del accidente, Anderson y un par de los otros ciclistas sobrevivientes volvieron a subir a sus bicicletas.

Desde el lugar del accidente, dependiendo de la ruta que tomaron, los ciclistas tuvieron casi cuatro horas para sentarse a pensar antes de llegar a sus autos estacionados en el M Resort, incluyendo lo que le dirían a las familias de los que murieron.

“No sé cómo decírselos”, dijo Anderson antes de hacer el viaje de vuelta. “Es terrible”.

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