Nevada tiene niveles altos de COVID-19 en las aguas residuales. ¿Debería preocuparnos?
Los turistas que acudieron en masa a Las Vegas durante el fin de semana festivo del 4 de julio contribuyeron a estimular el aumento de las infecciones por COVID, según los expertos.
“Tenemos un aumento de las enfermedades virales para el 4 de julio en particular. Para las vacaciones de verano, siempre estamos preparados para un aumento de turistas que visitan Las Vegas este fin de semana”, dijo el doctor Ketan Patel, director médico del Departamento de Urgencias de Adultos del UMC.
“(El 4 de julio) fue un fin de semana muy cercano en el que se suceden grandes acontecimientos en la ciudad, grandes eventos, partidos de fútbol internacionales, conciertos y de todo. Trae y atrae a mucha gente a la ciudad”, añadió Patel.
La reciente ola de calor también ha sido uno de los factores de riesgo en el aumento de las infecciones.
“Lo que hace el calor es que todos se quedan en casa, en una zona abarrotada, agregada. Lo que se va a ver sin duda es una propagación enorme, más grande. Es una oportunidad para la propagación”, dijo el doctor Anil Mangla, director de la División de Vigilancia y Control de Enfermedades del Distrito de Salud del Sur de Nevada.
Cabe destacar que el presidente Joe Biden dio positivo por COVID-19 el miércoles durante una visita a Las Vegas.
Aumento de COVID-19 en los niveles de aguas residuales
Nevada se encuentra entre los siete estados con niveles “muy altos” de actividad del COVID en las aguas residuales.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el nivel de actividad vírica en aguas residuales es una medida calculada que permite a los CDC agregar datos de muestras de aguas residuales para obtener niveles estatales/territoriales, regionales y nacionales y ver las tendencias a lo largo del tiempo. El nivel actual de cada estado y territorio se clasifica en mínimo, bajo, moderado, alto o muy alto.
Otros seis estados - California, Oregón, Texas, Arkansas, Florida y Maryland - también reportaron niveles muy altos de actividad de COVID-19 en aguas residuales.
Según los CDC, los estados entran en la categoría “muy alta” cuando los niveles de actividad de COVID en las aguas residuales son de 8 o más.
Los niveles de actividad de COVID en las aguas residuales de Nevada fueron de 12.31, que es significativamente más alto que los niveles de actividad de las aguas residuales para la nación (4.98) y la región (7.23).
Los datos sobre aguas residuales suelen ser una señal de alerta temprana sobre el aumento o la disminución de las infecciones, según Edwin Oh, catedrático de la UNLV.
Hasta el 15 de julio, el Distrito de Salud del Sur de Nevada había reportado 11 muertes relacionadas con el COVID en las últimas seis semanas.
Según Mangla, el Distrito de Salud ya no recoge información sobre el número de hospitalizaciones relacionadas con el COVID.
Sin embargo, el Distrito de Salud sí hace un seguimiento del porcentaje de visitas a urgencias que están potencialmente relacionadas con el COVID-19. A fecha de 15 de julio, el Distrito de Salud reportaba que el 2.3 por ciento de las visitas a urgencias estaban potencialmente relacionadas con el COVID-19.
El porcentaje de visitas potencialmente relacionadas con el COVID-19 ha aumentado del 1.8 por ciento el 18 de junio al 2.5 por ciento el 25 de junio. El porcentaje de visitas relacionadas con el COVID-19 se ha estabilizado, oscilando entre el 2.3 por ciento y el 2.5 por ciento del 25 de junio al 15 de julio.
¿Qué puede significar esto para Nevada?
“Si vemos un aumento como el de ahora, significa que estamos ante un futuro aumento de las infecciones, o de las infecciones víricas”, explicó Oh.
“Dado que ahora hay niveles elevados de SARS-COV-2 en las aguas residuales, es probable que haya muchas personas asintomáticas o sintomáticas que estén diseminando este virus en las aguas residuales”, añadió.
En junio, KP.2 o una mutación de la subvariante FLiRT fue la cepa dominante en el Condado Clark, con un 34 por ciento de las muestras recolectadas. LB.1 o una mutación de la variante ómicron fue la siguiente cepa dominante, con un 29.5 por ciento de las muestras recogidas.
Según Mangla, las cepas LB.1 y KP.2 o FLiRT son más transmisibles, pero también menos graves.
Preocupación por las poblaciones vulnerables
Dado que la mayoría de las personas han sido vacunadas y/o se han recuperado de infecciones anteriores, existe inmunidad en la comunidad en general, dijo Oh.
Sin embargo, ese no es el caso de las poblaciones más vulnerables, como los ancianos o las personas con afecciones subyacentes.
“En ciertas poblaciones que son un poco más vulnerables, es donde vamos a estar más preocupados”, dijo Oh.
Mangla recomienda vacunarse especialmente con la nueva vacuna, ya que las nuevas versiones de la vacuna contienen la cepa KP.2. Mangla también recomienda usar cubrebocas, evitar las grandes aglomeraciones y quedarse en casa en caso de que el resultado de la prueba COVID-19 sea positivo.
