‘Cambio de juego’: un programa de formación profesional ayudará a reclusos a prepararse para el empleo
septiembre 11, 2023 - 9:16 am
Actualizado September 13, 2023 - 1:30 pm
En una prisión de nivel medio-alto a unos 30 minutos de Las Vegas, las personas encarceladas pronto podrían aprender a soldar, reparar aires acondicionados y conducir un camión comercial, todo para estar listos para el trabajo cuando se reincorporen al mundo exterior.
El proyecto Southern Desert Vocational Village, ubicado en el Southern Desert Correctional Center, pretende ayudar a los reclusos a adquirir conocimientos en trabajos de alta demanda antes de su puesta en libertad, en un esfuerzo por frenar la probabilidad de que un recluso puesto en libertad vuelva a delinquir.
“La gente va a poder empezar a ganar sueldos sostenibles para poder cuidar de sí misma y de su familia”, dijo Jon Ponder, fundador y director ejecutivo de HOPE for Prisoners, una organización sin fines de lucro con sede en Las Vegas que ayuda a personas que han estado encarceladas.
El programa de reinserción, una colaboración entre la organización de Ponder y el Departamento de Correccionales de Nevada, está financiado por HOPE for Prisoners en colaboración con Engelstad Foundation y Bill y Susan Walters Foundation, explicó Ponder. Se prevé que el proyecto, de cuatro años de duración, cueste unos $10 millones, de los que ya se han conseguido $4 millones.
Antes de que la gente pueda comenzar la construcción, el Comité Interino de Finanzas debe aprobar la donación de HOPE for Prisoners, según el director del Departamento de Correccionales de Nevada, Jim Dzurenda. Se espera que el comité aborde la cuestión en su próxima reunión de octubre.
Volver a la vida cotidiana
El programa se centrará en hombres adultos a los que les falten entre 90 días y 18 meses para salir en libertad condicional.
El edificio de 20 mil pies cuadrados ubicado en la prisión contendrá aulas y laboratorios para formación en climatización, soldadura, fontanería y electricidad. También ofrecerá un programa de capacitación de 10 semanas para que las personas reciban una licencia de conducir comercial, que Ponder espera poner en marcha en enero.
Ponder dijo que tiene acuerdos de colaboración con empresas en estos campos de capacitación para que las personas encarceladas puedan tener opciones de trabajo antes de ser liberados. También ha puesto en marcha un programa para mantener el contacto con los reclusos tras su puesta en libertad, con el fin de proporcionarles orientación, gestión de casos, tutoría y asesoramiento en materia de drogodependencia.
La gran mayoría de las personas encarceladas quieren cambiar, volver a la comunidad y tener éxito, dijo Ponder, pero muchos no vuelven a la vida normal con habilidades necesarias.
“Tenemos cientos de socios y empleadores en muchas líneas diferentes de trabajo que se mueren de ganas de conseguir estos hombres y mujeres capacitados que están entusiasmados por volver al negocio de la vida”, dijo Ponder, quien también fue encarcelado y quería ayudar a otros en su situación.
Lombardo llamó a la escuela un cambio de juego, y espera facilitar la creación de otras escuelas de formación profesional en instalaciones de todo el estado.
Tradicionalmente, los delincuentes de nivel medio y alto no han participado en la capacitación profesional, dijo Lombardo, pero todos son las mismas personas cuando salen del sistema penitenciario.
“Si carecen de habilidades, tienden a continuar con el estilo de vida anterior que los trajo aquí en primer lugar”, dijo Lombardo, quien anteriormente se desempeñó como alguacil del Condado Clark. “Pero si tienen habilidades y se les proporciona la capacidad de tener una calidad de vida y la capacidad de ganarse la vida o mantenerse a sí mismos, tienden a tener más éxito”.