Fontainebleau se opone a la medida cautelar de Wynn por caso de robo de empleados
Los abogados de Fontainebleau Las Vegas lanzaron una nueva descarga en la batalla legal en curso que involucra las acusaciones de Wynn Las Vegas (WLV) de que el nuevo resort está cazando a sus ejecutivos y alentando a los trabajadores a infringir sus contratos de trabajo.
En una oposición a la petición de Wynn de una orden preliminar para detener a Fontainebleau, presentada a última hora del viernes en el Tribunal de Distrito del Condado Clark, Fontainebleau dijo que el tribunal no tiene autoridad para intervenir en la disputa con una orden general.
Está previsto que el 9 de mayo se celebre una audiencia ante el juez de distrito del Condado Clark, Mark Denton.
En su oposición, Fontainebleau dejó claro que los dos resorts del Strip están lejos de resolver la disputa que comenzó formalmente con una demanda de Wynn presentada el 29 de febrero, pero que los representantes de los dos resorts habían discutido meses antes.
“Este tribunal se vería en apuros para encontrar una petición de medida cautelar más insostenible que la presentada por el demandante Wynn Las Vegas, LLC”, decía la oposición judicial de Fontainebleau. “WLV solicita una medida cautelar profiláctica que presupone que todos y cada uno de los pactos laborales restrictivos que ha suscrito son válidos y están protegidos por la legislación de Nevada. WLV hace esa afirmación salvaje a pesar de que ninguno de los términos reales de estos contratos están ante este tribunal, ni tampoco ninguno de los miembros del personal - presente o pasado - que supuestamente están vinculados en la servidumbre indefinida de WLV”.
En una declaración enviada por correo electrónico al Las Vegas Review-Journal, Wynn dijo: “Wynn Resorts pretende simplemente impedir que Fontainebleau siga interfiriendo en los contratos de trabajo que algunos de nuestros empleados ejecutivos negocian con nosotros. Esperamos que el tribunal resuelva este asunto”.
Demanda de febrero
La demanda del 29 de febrero se presentó después de lo que Wynn consideró “la gota que derramó el vaso”: que Fontainebleau intentara despedir a Wayne Crane, director ejecutivo sénior de entretenimiento de Wynn Nightlife.
Crane firmó con Fontainebleau el 13 de febrero y se comprometió a empezar a trabajar allí a principios de marzo. Cuando avisó a sus superiores de Wynn, les dijo que había recibido una oferta de Fontainebleau, pero no que hubiera aceptado el trabajo.
Esto llevó a varios ejecutivos de Wynn a reunirse con él para convencerlo de que se quedara, lo que dio lugar a que Wynn ofreciera a Crane un nuevo contrato de tres años con un salario considerablemente más alto. Crane aceptó el trato de Wynn y firmó el nuevo contrato.
En la petición presentada por Fontainebleau el viernes, la empresa ofrecía una versión diferente de la historia: que Michael Waltman, vicepresidente sénior de ocio nocturno de Fontainebleau, se puso en contacto con Crane debido a su larga asociación en el sector. En una declaración que formaba parte de la oposición de Fontainebleau, Waltman dijo que Crane preguntó por un puesto para su esposa, Merina, que trabajaba en el Encore Beach Club y anteriormente había trabajado para la propiedad de Fontainebleau en Miami.
Una vez que Merina Crane fue contratada por Fontainebleau, su esposo buscó unirse a ella allí, decía la petición. Wayne Crane había limpiado su oficina en Wynn cuando se produjo la reunión con los ejecutivos de Wynn. Dijo que cambió de opinión y volvió a Wynn con un salario más alto, pero también temía que Wynn le demandara por romper su contrato de trabajo si se trasladaba a Fontainebleau.
“Merina era muy vocal sobre su descontento con WLV”, dice la declaración de Waltman. “En más de una ocasión, Merina expresó su descontento con la gestión y el funcionamiento de WLV. Merina no estaba contenta con su empleo en Encore Beach Club y quería marcharse. Merina indicó que ella y su esposo sentían lo mismo y que él también quería irse”.
Merina Crane empezó a trabajar en Fontainebleau el 28 de noviembre, semanas antes de que el establecimiento abriera sus puertas, según la petición. Siguió preguntando cómo podía unirse su esposo a ella en Fontainebleau. El 6 de febrero, Crane y otros ejecutivos de Wynn visitaron Fontainebleau y tres días después, Crane vació su oficina en Wynn para el traslado antes de reunirse con los altos cargos de Wynn decididos a mantenerle allí.
