Apoya el Condado Clark el cambio de nombre de McCarran a Aeropuerto Internacional Harry Reid
febrero 17, 2021 - 10:30 am
La Comisión del Condado Clark votó el martes por unanimidad para rebautizar el Aeropuerto Internacional McCarran con el nombre del ex senador de Nevada, Harry Reid, pese a los temores de los opositores de que la medida sería políticamente divisiva y perdería una oportunidad de alinear la marca del aeropuerto con Las Vegas.
Encabezada por el comisionado Tick Segerblom, quien intentó y fracasó como senador estatal en 2017 cambiar el nombre de McCarran por el influyente legislador demócrata, la comisión ordenó al personal del condado que presentara una solicitud para el cambio de nombre a la Administración Federal de Aviación (FAA).
“Se trata de hacer un cambio para lo mejor”, mencionó el comisionado William McCurdy II.
El polémico plan prevé que uno de los aeropuertos más transitados del país se convierta en el Aeropuerto Internacional Harry Reid, un proceso que Segerblom ha reconocido que podría tardar años en completarse y ha prometido que no utilizará el dinero de los contribuyentes.
En su lugar, dijo, los costes del cambio de nombre serían respaldados por donantes privados.
La directora de Aviación del condado, Rosemary Vassiliadis, comentó que el precio aún debe determinarse, pero que hace cuatro años se estimó que costaría unos dos millones de dólares.
La FAA no regula las solicitudes de cambio de nombre de los aeropuertos, ya que se trata de una cuestión local, pero sí exige que la jurisdicción que solicite un cambio de nombre lo notifique a la agencia, presentando los documentos adecuados para informar del cambio de nombre, informó la FAA en un comunicado.
Reid emitió un comunicado el martes por la tarde en el que agradecía a la comisión el reconocimiento.
“Con humildad expreso mi agradecimiento por el reconocimiento de hoy”, menciona el comunicado. “Me gustaría expresar mi profunda gratitud al comisionado Segerblom, a toda la Comisión del Condado Clark y a los muchos otros que han desempeñado un papel en este cambio de nombre”.
‘Pasado a la historia’
La medida llega cuando Segerblom ha tachado al homónimo del aeropuerto, el ex senador Pat McCarran, de estar en desacuerdo con los esfuerzos del sur de Nevada por reinventarse. McCarran, un feroz anticomunista que representó a Nevada desde 1932 hasta su muerte en 1954, ha sido criticado por un legado de racismo, antisemitismo y xenofobia.
“El senador (Pat) McCarran, que en su momento fue probablemente un buen hombre, ha pasado a la historia realmente”, dijo Segerblom cuando reintrodujo el cambio de nombre el 2 de febrero. “Si se observa su historial, no fue muy bueno. El nombre no representa la diversidad de nuestra comunidad”.
Astrid Silva, una activista por los derechos de los inmigrantes y directora ejecutiva de Dream Big Nevada, elogió a Reid por envalentonar su voz y sugirió que poner su nombre al aeropuerto enviaría un fuerte mensaje de empoderamiento a todos los jóvenes de Nevada.
“En Las Vegas a menudo destruimos nuestra historia”, dijo. “Construyámosla”.
Ida Gaines, una activista de los derechos civiles que trabajó para Reid durante 17 años, dijo que fue testigo del compromiso y la dedicación que tenía para el estado, y “no conozco a nadie que sea más merecedor” de ser el nuevo homónimo del aeropuerto.
Los comisionados elogiaron a Reid, que fue líder de la mayoría del Senado hacia el final de su mandato de tres décadas en el Senado, por su ascenso desde sus escasos comienzos y sus esfuerzos para ayudar a las familias trabajadoras y proteger las tierras públicas. Y Segerblom añadió que también había recibido cartas de apoyo de destacados republicanos.
El cambio de nombre fue respaldado por el ex gobernador convertido en presidente de la Universidad de Nevada, Reno, Brian Sandoval, el consultor político Sig Rogich, el director general de Las Vegas Sands Corp., Rob Goldstein y la doctora Miriam Adelson, una de las principales donantes de los candidatos republicanos y esposa del difunto Sheldon Adelson.
Proceso se traslada a la FAA
La FAA exige al condado que presente una resolución formal o un acta que demuestre que los comisionados solicitaron y aprobaron el cambio de nombre, así como una correspondencia formal de Vassiliadis que describa la solicitud.
Los requisitos deben entregarse a la FAA’s Western Pacific District Office para su revisión.
“La FAA realiza un análisis para determinar los impactos en su sistema y en los documentos”, mencionó Vassiliadis durante la reunión del martes. “Considerarían los mapas de control del tráfico aéreo, el manual de certificación del aeropuerto, el plan de distribución, el plan de seguridad del aeropuerto, los documentos de subvención. Por eso se necesitará algún tiempo para ver todo lo que habría que cambiar”.
El condado también tendrá que revisar los documentos con varias agencias con las que trabaja para reunir lo que hay que cambiar fuera de la FAA.
A partir de ahí, los funcionarios de McCarran trabajarían con las aerolíneas y las concesiones para coordinar el cambio de nombre, señaló Vassiliadis.
Aeropuerto Álamo
Si se recaudan los fondos necesarios para pagar el cambio de nombre, no será la primera vez que el aeropuerto vea modificado su nombre a lo largo de los años.
El Aeropuerto McCarran fue conocido por primera vez como Aeropuerto Álamo, que se inauguró en 1942, pero fue rebautizado como McCarran Field en 1948 tras la compra del aeropuerto por parte del Condado Clark a George Crockett.
El aeropuerto recibió el nombre de McCarran a raíz de su trabajo para impulsar la industria de la aviación en Estados Unidos, que contribuyó a la evolución de la aviación civil.
En 1968, el aeropuerto se convirtió en el Aeropuerto Internacional McCarran, a medida que las instalaciones se ampliaban y acogían el primer vuelo internacional de Las Vegas.
El gobernador Steve Sisolak, la senadora Jacky Rosen, el fiscal general Aaron Ford, el Partido Demócrata del Estado de Nevada, la representante Dina Titus y los presidentes de la UNLV y la UNR han manifestado su apoyo al cambio, entre otros.
Las Vegas Review-Journal / El Tiempo es propiedad de la familia de la doctora Miriam Adelson.