Detrás de escenas de la creación de ‘Mr. Brightside’ de The Killers

Todo empezó en un clóset.

Antes de que la mayor canción de rock del siglo XXI vendiera más de cinco millones de copias, antes de que destrozara los récords de las listas de éxitos en Reino Unido, antes de que obtuviera una nominación a los Grammy’s y se convirtiera en algo tan omnipresente en los eventos deportivos como las gargantas en carne viva de los fans más entusiastas, el icónico éxito de The Killers “Mr. Brightside” se originó en un pequeño apartamento de Las Vegas.

“Tenía mi amplificador en el clóset rodeado de ropa. Era una buena protección contra el ruido”, dice el guitarrista de The Killers, Dave Keuning, recordando el lugar donde nació el riff característico de la canción hace dos décadas. “Lo conecté y me puse a hacer sonidos. Pronto obtuve un sonido, así que mantuve la posición. Seguí tocando como si dijera: ‘Bueno, ¿de aquí a dónde?”

“Seguí tocando y luego pasé al preestribillo más adelante”, continúa. “Lo grabé todo en mi four-track en ese momento. Me pareció genial, sabía que tenía algo”.

Y así fue.

“Mr. Brightside” se convirtió en la primera canción de una banda de los 2000 que superó los mil millones de streams en Spotify, una hazaña notable si se tiene en cuenta que “Brightside” se lanzó en 2003, años antes de que el servicio de streaming tuviera la importancia que tiene ahora.

“Era la canción adecuada en ese momento, la sensación y el sonido adecuados”, dice Mark Needham. El veterano mezclador y productor, entre cuyos clientes se encuentran Fleetwood Mac y Shakira, mezcló “Mr. Brightside”. “Era tan agresiva, punk e indie, pero con un estribillo tan pop. Presionó todos esos botones”.

Y fue la primera canción que escribió la banda.

“Es curioso: Cuanto más aprendes y más vuelves al estudio o al garaje, más veces sales con la cabeza baja, sintiéndote desanimado”, dijo el cantante de The Killers, Brandon Flowers. “Pero esos primeros días fueron diferentes para nosotros. Fueron mágicos”.

El nacimiento de ‘Brightside’

Paraba a la gente si tenían calcomanías en su coche de bandas que le gustaban, luego les preguntaba si tocaban algún instrumento.

Así de desesperado estaba Brandon Flowers por montar una banda.

“Tocaba las puertas de la gente, una vez a la semana, quería conocer más gente”, recuerda Flowers.

En 2001, Flowers respondió a un anuncio de búsqueda de músicos en un periódico local publicado por Keuning, un transplantado de Iowa que también esperaba lanzar su propio proyecto.

La primera vez que se reunieron, Keuning le dio a Flowers la grabación del four-track con el riff de “Mr. Brightside”.

“Cuando volvió, tenía la letra y la melodía vocal”, recuerda Keuning. “Me encantó lo que hizo con ella. Luego añadimos el estribillo allí mismo, no sé exactamente cómo surgió. Creo que él tenía los acordes o simplemente los tocamos”.

“Se sintió bien”

“Teníamos este gran coro que recuerdo que simplemente se sintió bien”, continúa. “Tan pronto como terminamos, quise tocarlo de nuevo como, ‘¿Qué acaba de pasar aquí?’”.

Después reclutaron al baterista Matt Norcross a través de un anuncio en el semanario City Life.

Norcoss recuerda que quedó impresionado por las grabaciones al escucharlas por primera vez en el apartamento de Keuning.

“Me dije: ‘Sí, esto es increíble’”, comentó sobre la mezcla de pop New Wave de los 80 y rock pesado de la banda. “Era algo diferente a lo que se escuchaba en la radio en ese momento. Las canciones no sonaban como todo lo que salía entonces”.

En noviembre de 2001, el trío entró en el ya cerrado estudio Kill the Messenger para grabar un demo de cuatro canciones que incluía “Under the Gun”, “Desperate”, “Replaceable” y “Mr. Brightside”.

“Creo que gastamos como dos mil 500 dólares en la grabación”, dice Norcross.

“Recuerdo que sentía mariposas en el estómago un poco al entrar, estaba nervioso”, señala Flowers. “Era la primera vez que pagaba por tiempo de estudio. La luz roja está encendida, el reloj está corriendo, tienes tiempo limitado para hacer estos demos. Era emocionante estar allí, en un estudio, haciéndolo”.

Esa escasez de tiempo dio lugar, sin quererlo, a la estructura poco ortodoxa de la canción “Brightside”, en la que la segunda estrofa repite la primera.

“Eso vino de la procrastinación”, reconoce Flowers. “Uno de los recuerdos que tengo de estar en Kill the Messenger es estar en la cabina de voz y tener la letra en el papel, mirando un segundo verso inacabado y que el reloj estaba corriendo. Pagamos por ese tiempo, fue como, ‘¿Qué hago? ¿Murmuro esto, la segunda estrofa?’ Opté por volver a cantar la primera estrofa y terminó siendo el producto final”.

Norcross le dio el demo a la presentadora de radio Laurie Steele, que dirige el programa “Homegrown Show” de la emisora KOMP-FM, 92.3, desde 1998 y fue una de las primeras en poner a The Killers en las ondas locales.

“En la época en la que empezaron a sonar aquí, se respiraba el ambiente de Papa Roach, el tipo de rap-rock”, recuerda Steele, que al principio se sintió más atraído por “Desperate” que por “Mr. Brightside”. Su sonido era completamente distinto, diferente, como ‘¿Dónde encajan?’”.

Convirtiendo el dolor en un hit

Su comienzo estuvo precedido por un par de finales.

Cuando Brandon Flowers y Dave Keuning se conocieron, una de las cosas que tenían en común era que ambos estaban saliendo de una relación.

“Cuando eso ocurre, tienes mucho tiempo libre”, se ríe Keuning. “Así que fue un buen momento, pero el suyo fue un poco más desgarrador que el mío”.

Esto dio estructura la letra de “Mr. Brightside”, que arde con los pensamientos celosos de un hombre sobre los enredos románticos de una ex-amante como un corazón empapado en gasolina y puesto en llamas.

“Creo que mucha gente, por desgracia, se identifica con ella”, dice Flowers sobre la canción. “Es algo por lo que mucha gente pasa, especialmente en sus primeras relaciones. Es eso unido a una resiliencia en el coro; hay un poco de resquicio de esperanza, y la música brinda un sentimiento triunfante”.

Es esta mezcla de vulnerabilidad y determinación combinada con una emoción universal lo que ha hecho que la canción sea tan fácil de entender para muchos.

“La letra es obviamente muy personal para Brandon, pero también es una letra para todos. Todo el mundo la ha convertido en su propia historia”, indica Needham. “He asistido a conciertos en los que 20 mil personas del público se ponen a cantarla de principio a fin, gritando a pleno pulmón. Es una de esas canciones que, desde el punto de vista lírico, realmente resuena en la gente”.

Un “Hot Fuss” en Estados Unidos

Las estrellas no habían salido y, sin embargo, nacieron.

Fue durante un explosivo show vespertino en el festival de música de Coachella, en abril de 2004, cuando The Killers se dio a conocer de verdad al público estadounidense.

“Aquello fue como si las estrellas del rock hubieran llegado a Estados Unidos”, recuerda Pardey. “Había miles de personas saltando al ritmo de ‘Mr. Brightside’. Fue entonces cuando la manía de The Killers había llegado por fin a Estados Unidos, cuando supimos que esto iba a tener algo de recorrido”.

“‘Mr. Brightside’, en todo momento, fue uno de los momentos clave de la banda”, continúa. “No creo que nunca hayan dejado de tocar ‘Mr. Brightside’ en uno de sus sets”.

Aun así, la canción no fue un éxito instantáneo.

Aunque se publicó como primer sencillo del álbum de debut de la banda, “Hot Fuss”, en septiembre de 2003, “Brightside” no tuvo un impacto inicial en las listas de éxitos.

Fue el segundo sencillo de The Killers, “Somebody Told Me”, el que dio un impulso serio a la banda en Estados Unidos.

Más de 250 conciertos en 2005

Luego, “Brightside” se reeditó más tarde, en 2004, mientras la banda prácticamente vivía en la carretera, y Pardey calcula que The Killers dio más de 250 conciertos sólo en 2005, incluidos 19 en 20 días durante un tramo.

“Llevó tiempo”, dijo Flowers sobre el lento éxito de la canción. “No nos fijábamos en las listas de éxitos, sino en la reacción del público cada noche. Cuando vas a tocar a Cleveland, o donde sea, y luego vuelves la segunda vez y la tercera, puedes ver qué canciones resuenan. Brightside’ hacía eso. Definitivamente vimos un compromiso diferente con el público. Era algo físico”.

La canción alcanzó el número 10 en las listas de Estados Unidos y se convirtió en un éxito aún mayor en Reino Unido, donde permaneció en el Top 100 de la lista de singles del Reino Unido durante más de 200 semanas.

“Nunca he tenido un hueso de arrogancia en mi cuerpo, pero estaba bastante seguro de que la canción funcionaría bien, si teníamos la oportunidad”, dice Keuning. “Me decía: ‘Si esto sale en la radio, a la gente le gustará’. Tenía mucha confianza en ello, pero no sabía si alguna vez llegaría a la radio”.

Veinte años después, aún no se ha ido.

“Era muy joven, era tan joven, que la escribí hace la mitad de mi vida”, dice Flowers sobre los orígenes de la canción. “Todo era nuevo y emocionante. No fue hasta las giras y la grabación del segundo disco cuando nos dimos cuenta de que no se trata sólo de fiestas y chicas y todo eso; hay que trabajar mucho si quieres seguir así. Tienes que encontrar inspiración. O lo aceptas o te desvaneces”.

“Estoy agradecido de que hayamos perseverado y nos hayamos esforzado”, continúa. “Esta vida creativa que hemos tenido la suerte de vivir, todo empezó con ‘Mr. Brightside’”.