Desde los botones que Carr y Davante Adams y el resto de los líderes de los Raiders presionaron el mes pasado después de una vergonzosa derrota ante los Colts que los hizo tambalearse a un récord de dos a siete, hasta la respuesta de sus compañeros de equipo después de ser desafiados a preocuparse más, la causa y el efecto de esas palabras francas y señaladas son imposibles de discutir.
No es la producción estadística lo que motiva a Davante Adams. Es lo que significan las estadísticas lo que inspira al perenne wide receiver All-Pro.
La racha de tres victorias de los Raiders no solo los ha llevado a la cúspide de su primera aparición en los playoffs desde 2016. También los ha convertido en uno de los destinos más atractivos para los posibles candidatos a entrenador jefe.
Con posibilidades de clasificar a la postemporada luego de vencer a domicilio a Dallas Cowboys, Las Vegas Raiders entró a la cancha del Allegiant Stadium para buscar otro resultado favorable, ahora ante Washington Football Team, en juego correspondiente a la Semana 13 de la NFL. No obstante, la suerte no los acompañó y terminaron cayendo por un ajustado resultado de 17-15.
Las Vegas Raiders cayó por 30-23 ante su similar de Buffalo Bills, en un juego que seguramente debe dejar ciertos aspectos en los que el entrenador Jon Gruden y su cuerpo técnico deben trabajar de cara a los próximos compromisos de la NFL. Esta fue la primera derrota de los Raiders en el Allegiant Stadium.
El mariscal de campo de Buffalo Bills, Josh Allen (17), se sobrepuso a una molestia en el hombro izquierdo y lanzó dos pases de anotación, además corrió para un touchdown, suficiente para encaminar a su equipo a una clara victoria sobre Las Vegas Raiders 30-23 en el Allegiant Stadium, el domingo 4 de octubre de 2020.
