Sospechoso de homicidio guardó él cuerpo en un congelador mientras vivía en casa de Las Vegas, dice la policía
noviembre 13, 2024 - 10:06 am
Actualizado November 13, 2024 - 9:49 pm
Tras conocerlo en Home Depot, una mujer hallada muerta en un congelador de su casa invitó a un hombre a vivir con ella. Ahora él enfrenta cargos por el homicidio, informó la policía.
Daniel Roush, de 37 años, fue arrestado en relación con la muerte de Melanie Gilbertson, de 68 años, y enfrenta un cargo de homicidio en segundo grado. Roush también es conocido como Jazlynn Roush, según un reporte de arresto del Departamento de Policía Metropolitana.
De acuerdo con el reporte de arresto, el sospechoso continuó viviendo en la casa de Gilbertson durante aproximadamente dos semanas, mientras mantenía el cuerpo de Gilbertson en el congelador.
Gilbertson fue vista por última vez el 22 de octubre, según Demecia López, una administradora de la propiedad, indicó el reporte. López dijo que Gilbertson solía hacer quejas con frecuencia, pero que, con el tiempo, ambas habían desarrollado una amistad.
Signos preocupantes, como el auto de Gilbertson estacionado de manera inusual y sus perros ladrando ruidosamente, llevaron a López a llamar a la policía y solicitar un control de bienestar.
Cuando los agentes registraron la vivienda de Gilbertson el 6 de noviembre, encontraron su cuerpo en un congelador tipo baúl. Roush y su esposa, Gina Roush, estaban en la casa, pero no respondieron la puerta al principio cuando la policía tocó.
Un encuentro casual
En una entrevista con la policía el 6 de noviembre, Roush declaró haber encontrado a Gilbertson muerta aproximadamente una semana antes de Halloween, y creía que ella había consumido drogas.
Roush, en una entrevista ese mismo día en un vehículo de la Policía Metropolitana, recordó sentirse solo y asustado. “La puse en el congelador, porque no sabía qué hacer”, dijo Roush. “Mientras podía resolverlo, la tuve en el congelador”.
Gilbertson y Roush se conocieron aproximadamente un mes atrás, según López. Gilbertson le había dicho que se conocieron mientras compraban en Home Depot y, según el reporte, “después de una pequeña charla, Monique le ofreció a esta persona mudarse con ella”.
Pero poco después de que Roush se mudara, Gilbertson le comentó a López que estaba “molesta por lo sucio que era Roush”, quejándose de que encontraba parafernalia de drogas en la casa y que algunas de sus pertenencias desaparecían. Gilbertson echó a Roush de la casa y cambió las cerraduras, según la Policía. Dijo que quería que Roush se llevara sus pertenencias, pero él no hizo caso a su solicitud.
López dijo que Gilbertson quería deshacerse de las cosas, incluyendo una pistola, pero fue persuadida por López para llamar a la policía en su lugar. Gilbertson llamó al 311 el 22 de octubre, pero, tras esperar en la línea, decidió volver a llamar más tarde. Esa fue la última vez que López vio o escuchó de Gilbertson.
Entrevistas policiales
En una entrevista con la policía, Roush mencionó que había tenido algunos altercados con Gilbertson durante su tiempo viviendo juntos, incluyendo uno en el que Gilbertson se quejó de que Roush había comido su crema de cacahuate.
Roush dijo a la policía que Gilbertson no trabajaba y que recibía Seguro Social, agregando que “disfrutaba de su Kahlua y tomaba analgésicos”, aunque ambas no “se iban de fiesta juntos”.
Roush también mencionó peleas con Gilbertson. “Me mantuve calmado, ¿sabes? No me alteré para nada con ella”.
Gina Roush le dijo a la policía que había estado visitando a “su esposo, del que está separada desde hace 16 años” en la casa de Gilbertson. Dijo que lo había visitado en varias ocasiones y que se quedaba regularmente a pasar la noche en el suelo.
Inicialmente, Gina Roush, quien también estaba presente en la casa cuando llegó la Policía, negó saber que Gilbertson estaba muerta en el congelador.
Pero luego, se comunicó con la Policía y les informó que no había sido honesta, según el reporte. Gina Roush dijo que su esposo era traficante de drogas y que le vendía drogas a Gilbertson.
Su esposo le dijo que Gilbertson había sufrido una sobredosis, y Gina Roush respondió que hiciera “lo que fuera”, pero que al estar en libertad condicional, no quería verse involucrada.
Gina Roush finalmente admitió que le habían dicho que el cuerpo estaba en el congelador, pero negó haber tenido algo que ver con la colocación de Gilbertson allí.
Sin embargo, dio información contradictoria sobre cuándo se enteró de esto, y en un momento dijo a la Policía que no tenía nada que ver con el “asesinato” de Gilbertson.
También dijo a la policía que su esposo le había dado a Gilbertson narcóticos mezclados con fentanilo y que ella sufrió una sobredosis justo en frente de su esposo, una acusación que Roush negó, aunque Roush expresó arrepentimiento por no haber informado de la muerte de inmediato.
La Policía dijo que debido a las inconsistencias presentes en la historia de Roush, era “evidente” que estaba mintiendo para encubrir un crimen.
Entre las pruebas en la escena se encontró “sangre cerca del congelador”, según el reporte. La causa de la muerte de Gilbertson aún no ha sido revelada por la oficina del forense del Condado Clark.