Mujer es sospechosa de dispararle al que era su esposo desde hace 40 años
Una mujer sospechosa de herir gravemente a su esposo después de dispararle en la garganta, le dijo a la policía que se disparó a sí mismo, dijeron las autoridades el viernes.
Margaret Forsberg, de 66 años, fue arrestada y fichada por los cargos de intento de asesinato, agresión doméstica y descarga de un arma en una estructura ocupada menos de dos horas después de haber llamado a la policía, según un reporte de arresto del Departamento de Policía Metropolitana.
Según el reporte, Forsberg dijo a la policía que estaba en el patio trasero de su casa en Reno Court, cerca de East Reno Avenue, cuando escuchó disparos dentro de la casa. Dijo que encontró a su esposo tendido en el dormitorio con más de una herida de bala y llamó al 911 unos 10 minutos después.
La policía escribió en el reporte que después de que los paramédicos sacaron a su esposo de más de 40 años de la casa, ella les preguntó a los agentes de patrulla: “¿Sigue vivo?”.
Su esposo, que según la policía era dos años mayor que ella, les dijo a los primeros auxilios mientras lo llevaban a la ambulancia que su esposa le había disparado.
El hombre no fue nombrado en el reporte.
Un médico de Sunrise Hospital and Medical Center le dijo a los detectives que el hombre recibió un disparo en la garganta y el muslo. Estaba conectado a un ventilador con sangre en el pulmón, y el médico dijo que, por sus heridas, “no parecía que podría sobrevivir”.
Forsberg se negó a hablar con la policía y pidió un abogado.
“Los detectives hablaron con los primeros patrulleros que respondieron”, decía el reporte del arresto. “Declararon que desde el momento en que entraron en contacto con Margaret observaron que su comportamiento no era el de una esposa cuyo esposo acababa de intentar acabar con su vida. Mientras estaba con ella parecía más preocupada por el hecho de que los agentes de la patrulla estuvieran causando una conmoción en el vecindario, fingiendo estar trabajando y haciéndola quedar mal”.
Forsberg seguía el viernes en el Centro de Detención del Condado Clark, aunque un juez dictaminó el miércoles que podía ser puesta en libertad con un monitor de tobillo electrónico de alto nivel bajo la condición de que no poseyera armas.
