‘Esto tiene que cambiar’: Sindicato Culinario apoya lotería para financiar la salud mental
Iván López, de 20 años, residente en Las Vegas, recuerda cómo se benefició de la terapia en la preparatoria y cómo desearía que hubiera un mayor acceso a los recursos de salud mental para los jóvenes de Nevada.
“Veo a mis amigos y a otros jóvenes luchando con su salud mental”, dijo López, trabajador de un casino en el Caesars Palace y miembro del sindicato Culinary. “Todos pasamos por lo mismo. … Tenemos que tomarnos en serio esta crisis y hacer cambios ahora, antes de que sea demasiado tarde para cada niño y adulto”.
López y otros miembros del sindicato Culinary Local 226, que representa a 60 mil trabajadores de Las Vegas y Reno, están haciendo campaña en apoyo de la legislación del asambleísta C.H. Miller para enmendar la Constitución de Nevada y permitir que el estado establezca un sistema de lotería, cuyos ingresos se destinarían a programas de salud mental y educación para jóvenes en Nevada.
“Nevada debe invertir en salud mental y educación en el sistema de salud mental de Nevada”, dijo Ted Pappageorge, secretario-tesorero del sindicato culinario, en una rueda de prensa celebrada el jueves en la que se anunciaron las prioridades legislativas del sindicato para 2023. “Llevan décadas sin fondos suficientes y desde hace años son los peores del país. Es especialmente malo para los niños de Nevada”.
En 2021 y 2022, la organización sin ánimo de lucro Mental Health America clasificó a Nevada como la peor del país en salud mental en general, basándose en el acceso a la atención y la prevalencia de la salud mental, y las escuelas públicas de Nevada se encuentran entre las peor financiadas de Estados Unidos, dijo Pappageorge.
“Esto tiene que cambiar”, dijo. “Está claro que es necesario crear capacidad a largo plazo para la salud mental y la educación, y es fundamental una fuente específica de financiación constante”.
Los casinos se opusieron en el pasado
Nevada es solo uno de los cinco estados que carecen de un sistema de lotería estatal, y muchos nevadenses viajan a través de las fronteras estatales para comprar billetes de lotería, enviando fuera de Nevada millones de dólares en ingresos potenciales. Ha habido más de dos docenas de intentos en el pasado para permitir una lotería estatal en Nevada, pero todos han fracasado. La industria del juego ha presionado contra la idea.
Pappageorge dijo que aún no ha escuchado la oposición de la industria de los casinos, y cree que esta iniciativa será diferente de otros intentos anteriores de implantar una lotería estatal.
“Estamos en 2023, no en los años 70 y 80”, dijo. “Y tenemos una crisis, y afecta a todos, incluidos los juegos, las empresas de juego y todos sus empleados”.
Si la Legislatura de Nevada y el gobernador Joe Lombardo se niegan a aprobar la legislación, el sindicato culinario estudiará la posibilidad de hacer circular una petición de iniciativa, que debe presentarse a los votantes en dos elecciones distintas para entrar en vigor, dijo Pappageorge. Si la Legislatura aprueba la resolución este año, deberá volver a presentarse ante los legisladores en 2025 antes de que pueda entrar en la papeleta electoral en 2026.
Luchar por el control de las rentas
El sindicato empezará a llamar a las puertas, hablar con republicanos, independientes y demócratas sobre la iniciativa del sistema de lotería, así como sobre su otra prioridad legislativa: la estabilidad de los vecindarios, que implantaría un tope del cinco por ciento de aumento de la renta para los propietarios.
El proyecto de ley, impulsado por la senadora estatal Pat Spearman, demócrata por North Las Vegas, exigiría también un preaviso de 90 días para los aumentos a la renta.
“Como inquilinos, debemos saber que podemos tener estabilidad y poder permitirnos albergar a nuestras familias y tener oportunidades de ahorrar y ser propietarios de una casa algún día”, dijo Pappageorge.
Carlos Padilla, miembro del sindicato culinario que trabaja en Treasure Island como panadero, dijo que su renta era de 1,200 dólares al mes por una casa de tres habitaciones hace un par de años. Ahora paga 1,675 dólares y el mes que viene tendrá que pagar 1,800 dólares.
“Le pregunté al casero si tal vez se trataba de un error”, dijo Padilla. “Me dijo que no hay ninguna ley en este estado que diga que el casero no puede subir los precios de la renta más de lo necesario”.
El sindicato apoyó el año pasado una pregunta en las urnas de North Las Vegas para establecer el control de las rentas en esa ciudad, pero los funcionarios rechazaron la petición por tener muy pocas firmas.
