‘Clavémosla’, testifica superviviente del incendio del Motel Alpine sobre puerta bloqueada
La compañera sentimental de un empleado de mantenimiento de Alpine Motel Apartments vio cómo este bloqueaba con clavos la puerta trasera del complejo unos dos meses antes del incendio mortal en el que murieron seis personas, según declaró el miércoles.
Catherine Jacobo, también conocida como Renee Duncan, declaró que presenció una conversación entre su compañero, Don Bennett, y el administrador en vivo del complejo, Jason Casteel, durante la cual Casteel se enfadó por la puerta rota. Jacobo declaró en la audiencia preliminar del miércoles que Casteel sugirió clavar la puerta.
‘Clavémosla’
“Jason le dijo a Don: ‘Clavémosla’”, declaró. “Entonces Don dijo: ‘Espera un momento, sabes que eso es un peligro de incendio, ¿verdad?’”.
Casteel dijo al hombre de mantenimiento que bloqueara la puerta de todos modos, declaró Jacobo. Cuando se declaró el incendio en la madrugada del 21 de diciembre de 2019, al menos una mujer murió a pocos pasos de la puerta bloqueada.
El testimonio sobre la puerta se produjo durante la continuación de una audiencia preliminar en la causa penal contra el dueño del Alpine, Adolfo Orozco, y Malinda Mier, una de las administradoras del complejo.
El procedimiento se había detenido durante casi dos años después de que Don Dibble, investigador que trabajaba para el equipo de defensa de Orozco, se negara a declarar en 2020. La audiencia se reanudó el martes con Dibble subiendo al estrado para declarar sobre una entrevista que realizó a Malinda Mier en los meses posteriores al incendio, que dejó seis muertos, 13 heridos y casi 50 personas sin cobijo.
Dibble subió al estrado después de que el Tribunal Supremo confirmara la decisión de un juez de declararlo en rebeldía.
Según el testimonio de Dibble, Casteel había hablado a Orozco y a Mier de la puerta rota, y este le informó a Mier de que iba a conseguir los suministros para arreglarla en Home Depot. Pero Mier le dijo a Casteel que podía encontrar los materiales más baratos, declaró Dibble.
Dibble dijo que, durante su entrevista con Mier, esta afirmó que había hecho un viaje a Luisiana después de su conversación con Casteel y se había olvidado de la puerta.
‘Ahora solo hay una forma de entrar y salir’
Jacobo, que fue llamado como testigo por el equipo de defensa de Orozco, declaró que Casteel estaba enfadado por la puerta rota y pidió a Bennett que la clavara para evitar que la gente durmiera por la noche en las escaleras del edificio.
“Cuando lo hizo, Jason dijo… ‘ahora solo hay una forma de entrar y salir: la puerta principal’”, testificó.
Bennett murió en el incendio tras correr de puerta en puerta por el edificio en llamas, despertando a los residentes y alertándoles de las llamas. Su compañera es una de las múltiples personas que han presentado demandas tras el incendio, que ahora se han unificado en un único caso. Presentó la demanda en diciembre de 2021 en la que afirmaba que Casteel “ordenó” a Bennett que cerrara la puerta con seguro.
El jefe de bomberos de Las Vegas, Robert Nolan, también testificó el miércoles sobre las inspecciones de incendios en el edificio.
En las semanas posteriores al incendio, el Review-Journal obtuvo registros que mostraban que los inspectores habían observado 42 infracciones del código de incendios tras el incendio, entre ellas la puerta trasera cerrada con llave, la falta de un sistema de rociadores en funcionamiento y detectores de humo ausentes o defectuosos en al menos 14 lugares del edificio. El miércoles, Nolan declaró que el edificio no había sido multado por falta de detectores de humo desde enero de 2017.
Nolan le había declarado anteriormente al Review-Journal que su oficina no inspeccionó el edificio de apartamentos en los 32 meses anteriores al incendio.
Se espera que la audiencia preliminar se reanude el 8 de marzo con más testimonios de Nolan. El abogado defensor de Orozco, Dominic Gentile, ha dicho que espera llamar a un total de 10 testigos antes de que finalice la audiencia.
Los acusados se enfrentan a seis delitos graves de homicidio involuntario, junto con cargos de desatender la seguridad de una persona con resultado de muerte o lesiones corporales graves y un delito menor grave de destrucción u ocultación de pruebas. Orozco también se enfrenta a cargos por intentar disuadir a alguien de testificar e intentar impedir que una persona reporte un delito.
Al final de la audiencia, Zimmerman decidirá si hay pruebas suficientes para que Orozco y Mier sean juzgados.
