‘No nos respetan’: Miembros de sindicato hacen piquete en el UMC
Varias docenas de miembros del sindicato formaron un piquete frente al University Medical Center el lunes para protestar contra una política que penaliza a los empleados que llaman para decir que están enfermos menos de ocho horas antes de un turno.
“Si supiera lo que va a pasar dentro de ocho horas, no necesitaría este trabajo”, bromeó la terapeuta respiratoria del hospital Sifa Ntamuhanga, que se unió al piquete informativo.
Hablando más en serio, Ntamuhanga dijo que no puede predecir si se levantará enferma por la mañana, y que no redunda en beneficio de los pacientes que se sienta obligada a acudir enferma al trabajo.
Según la dirección del hospital, el antiguo requisito de preaviso fue acordado por el Service Employees International Union Local 1107 (SEIU) y está claramente definido en el convenio colectivo vigente. El University Medical Center empezó a aplicar la estipulación “en respuesta al notable aumento de las llamadas de última hora”, declaró en un comunicado el director ejecutivo del hospital, Mason Van Houweling.
“Cuando los miembros del equipo son llamados a ausentarse sin previo aviso, el UMC recurre a menudo a las horas extra y a la mano de obra contratada para reducir el impacto en nuestros pacientes, miembros del equipo y operaciones en general”, dijo.
Liz Bolhouse, delegada de enfermería elegida por el SEIU y enfermera de la unidad de cuidados intensivos pediátricos, dijo que la dirección ha malinterpretado la intención de la estipulación del preaviso. El hospital puede estar adoptando una línea más dura debido a la escasez de empleados y al mayor volumen de pacientes, así como al mayor número de empleados que avisan que se ausentarán por enfermedad, dijo.
Lo que debería hacer es abordar los problemas de los empleados que abusan habitualmente de la política de absentismo, dijo.
“En lugar de eso, nos están echando la bronca a todos”, afirmó. “Están penalizando a los buenos empleados junto con los malos”.
Yvette Crespo, enfermera titulada, se sorprendió este mes al recibir una amonestación verbal -la primera en 17 años en el centro médico- por haber llamado diciendo que estaba enferma menos de cuatro horas antes de su turno. Dijo que no había visto ningún correo electrónico sobre esta política.
“Me considero una empleada ejemplar”, dijo, y señaló que hace un mes había trabajado dos turnos seguidos de 12 horas cuando no se encontraba bien para evitar la falta de personal.
Según Bolhouse, tras llamar cuatro veces en un plazo de 12 meses sin la notificación requerida, un empleado sería objeto de una suspensión de un día. Una quinta vez supondría el despido.
“Entendemos perfectamente que la vida es así, y que los empleados pueden tener que dar parte de baja por enfermedad de vez en cuando sin avisar con ocho horas de antelación”, dijo Van Houweling. “Por eso tenemos un proceso de asesoramiento progresivo increíblemente indulgente”.
Theresa McGowan, jefa de delegados auxiliares del SEIU y ayudante de servicios medioambientales, dijo que el número de llamados a filas diarios se había duplicado debido a que los empleados estaban agotados mental y físicamente por la pandemia. Pero la solución de la dirección no es razonable, dijo.
“No nos están satisfaciendo a medias, que es lo que queremos”, afirmó.
SEIU representa a más de 3,400 trabajadores de University Medical Center y sus clínicas asociadas. El UMC, hospital público del Condado Clark, alberga el solo centro de traumatología de nivel uno de Nevada, un centro de traumatología pediátrica designado, un centro verificado de atención a quemados y un centro de trasplante de órganos.
