Tamaulipas, México. (Notimex).- Es la temporada de fin de año, con fiestas, comida y bebida en abundancia; cuando con frecuencia se come mas de la cuenta o se rompe “la dieta”. Por eso no está de más autoimponerse algún tipo de control, por ejemplo con el consumo de azúcar y sal.
Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advierten que el exceso de sal y azúcar deriva en complicaciones al corazón, riñones y la microcirculación, además de estar ligados a padecimientos crónico-degenerativos.
El director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) del IMSS en Reynosa, Tamaulipas, Francisco Emmanuel Díaz Cisneros, refirió que el consumo saludable de sal es aproximadamente de cinco gramos al día, mientras que de azúcar, la porción ideal varía de acuerdo con la condición y estado de salud de cada persona.
Destacó que el exceso de sal en la alimentación puede ocasionar retención de líquidos, lo que incide en aumento de peso, además de que obliga al hígado, los riñones y el corazón a trabajar por encima de sus niveles normales.
Asimismo, enfatizó, genera “repercusiones importantes en el sistema cardiovascular, ya que el consumo desmedido de sodio eleva la presión arterial y ocasiona enfermedades renales, hepáticas e insuficiencia cardiaca”.
El doctor Díaz Cisneros detalló que el consumo excesivo de azúcar puede ocasionar enfermedades degenerativas como hipertensión y diabetes, padecimientos que además se registran a edades cada vez más tempranas.
“Ingerir grandes cantidades de azúcar de forma prolongada da como resultado altos niveles de glucemias, condición que al mantenerse por mucho tiempo, puede causar daños en riñón, corazón y ojos, entre otros órganos”, dijo.
Recomendó a los pacientes acudir a la unidad médica o médico personal para recibir orientación sobre las cantidades idóneas del consumo de sal y azúcar y de acuerdo el estilo de vida de cada persona.
“La intención es poder prevenir estos y otros padecimientos que se generan por la falta de orientación sobre las medidas indicadas que se deben consumir de sal y azúcar”, resaltó.
Exhortó a las personas aprovechar los departamentos de Nutrición y Dietética, de las Unidades de Medicina Familiar del IMSS, o los servicios del cuidado de la salud que cada quien tenga. Ahí es donde personal especializado les diseñará una dieta personalizada y orientará sobre cómo acceder a una mejor calidad de vida, en base a una alimentación saludable y a la práctica de ejercicio físico.
Las recomendaciones sirven para todo el tiempo, en cualquier parte del año, pero en la temporada de fiestas de fin de año se vuelven más necesarias. No espere a caer enfermo, o a que el médico le ordene controlar su consumo de azúcar y sal.