Sisolak se queda al margen mientras las escuelas cierran
El gobernador Steve Sisolak espera que no te des cuenta de que quiere tener las dos cosas con el cierre de escuelas.
El martes 11, el Distrito Escolar del Condado Clark (CCSD, por sus siglas en inglés) anunció que cerraría las escuelas desde el viernes pasado hasta este martes. También canceló los encuentros deportivos, el atletismo y las actividades extraescolares.
“Esta pausa de cinco días promoverá un entorno de aprendizaje seguro y saludable en nuestras escuelas para ‘Detener la propagación’ a fin de continuar con la instrucción presencial”, dijo el distrito en un comunicado.
Traducido: Tenemos que cerrar las escuelas para mantener las escuelas abiertas.
Qué basura. También es una bofetada para los padres, muchos de los cuales todavía tienen que trabajar. Puede ser estresante encontrar cuidado infantil con poca antelación.
La reacción más desconcertante al cierre de escuelas provino de Sisolak.
“Estoy absolutamente comprometido a mantener las escuelas abiertas para el aprendizaje en persona y mantener seguros a nuestros estudiantes, educadores y personal”, dijo en un comunicado.
Esa es una verborrea fuerte y directa. Uno esperaría que lo siguiera de inmediato con una demanda de que el distrito cambie de rumbo. Después de todo, afirma estar “absolutamente comprometido con mantener las escuelas abiertas”, y el distrito acaba de cerrar las escuelas durante un fin de semana de cinco días. No.
“Espero que este fin de semana largo permita que el personal, los estudiantes y nuestros educadores trabajadores se recuperen para que puedan regresar al trabajo listos para brindar instrucción de alta calidad a nuestros niños”, continuó.
Hable acerca de estar en ambos lados del problema. Pero el historial de Sisolak es claro. Cerró las escuelas y permitió que permanecieran cerradas durante un año.
Revisemos. En marzo de 2020 cerró las escuelas. En abril de 2020, decidió que las escuelas deberían permanecer cerradas hasta el final del año escolar. Dado lo que sabemos ahora, fue una decisión equivocada. El riesgo al que se enfrentan los niños por el COVID es infinitamente pequeño. La pérdida de aprendizaje es real y ha sido devastadora para muchos niños. También hay evidencia de que las escuelas tienen una menor propagación viral que las comunidades circundantes.
Pero nadie es perfecto al comienzo de una pandemia. Esas decisiones eran comprensibles.
Lo que pasó después no fue así. En junio, permitió que las escuelas reabrieran con restricciones de capacidad. También les dio a los distritos escolares la opción de llevar a cabo el aprendizaje a distancia durante el año escolar 2020-21. Desafortunadamente, eso permitió que el Condado Clark se volviera virtual durante la mayor parte del año escolar pasado.
Esa no fue la única gran noticia de junio de 2020. Ese mismo mes, Sisolak permitió la reapertura de los casinos.
“Nuestros casinos, hoteles, restaurantes y bares están abiertos con restricciones estrictas para que podamos proteger nuestra economía”, dijo Sisolak en declaraciones preparadas en noviembre de 2020. “Mientras tanto, la mayoría de los edificios escolares de nuestro estado están cerrados y nuestros hijos están sufriendo como resultado”.
La Nevada de Sisolak: Casinos abiertos, escuelas cerradas.
Tenía razón sobre el sufrimiento. El distrito luchó para conseguir Chromebooks para los estudiantes. Los suicidios entre los estudiantes del distrito llegaron a los titulares nacionales.
Pero Sisolak, que no ha mostrado reparos en centralizar grandes cantidades de poder, dejó a los niños languideciendo. La mayoría de las escuelas del Condado Clark no reabrirían para el aprendizaje híbrido hasta marzo de 2021 y solo para grados seleccionados inicialmente. Algunos estudiantes no tenían la opción de regresar hasta abril.
Es poco probable que eso funcione bien cuando Sisolak se enfrente a los votantes en noviembre. Una de las principales razones por las que a los republicanos les fue tan bien en Virginia y Nueva Jersey en noviembre pasado fue que los padres estaban molestos por el cierre de las escuelas.
Esperemos que la pausa no sea el preludio de un cierre más prolongado.
