En inglés la palabra “lemon” o limón en español se usa para describir algo que no sirve o que es defectuoso. Por lo general, este término se aplica a automóviles.
La Ley del Automóvil Limón (Lemon Law en inglés) es una ley que protege a personas que compran un carro defectuoso. Para poder usar las protecciones que otorga esta ley hay varios requisitos.
Primero, el carro tiene que ser nuevo. Si usted compra un carro nuevo, y tal carro es defectuoso usted puede devolverlo para un reembolso o el concesionario puede ofrecerle un carro igual o similar en intercambio.
Para calificar como un limón su carro tiene que tener la misma falla o defecto por lo menos 4 veces en un año o durante el periodo de garantía original del auto. O, el auto debe estar fuera de servicio por 30 días o más durante un año o durante el periodo de garantía.
Si este es su caso, entonces puede pedir al concesionario que le reemplacen el auto por otro igual o que le devuelvan su dinero. Si le devuelven su dinero, el concesionario puede descontar una cantidad razonable por el uso que usted tuvo con el carro.
El concesionario no puede hacer que usted renuncie a sus derechos firmando algún documento. Si usted devuelve el auto al concesionario debidamente bajo esta ley, tendrán que respetar su decisión.
El auto entonces será registrado como un “limón” y el título reflejará esto. Así cualquier comprador de ese auto sabrá que hubo problemas serios con el auto.
También hay derechos para personas que compran un auto usado de un concesionario. Si usted compra un auto con más de 75,000 millas el concesionario debe proveerle un reporte de inspección de motor y tren motriz (drive train en inglés).
Si el auto usado tiene problemas no revelados en el reporte de inspección, usted puede plantar una queja al Departamento de Motores y Vehículos (DMV, por sus siglas en inglés). El DMV conducirá una investigación en el asunto. Si el concesionario violó regulaciones de la industria, entonces tendrá que reparar el auto o aceptar la devolución del auto y devolverle su dinero.
Si piensa que ha comprado un “limón” hable con su abogado lo más pronto posible para arreglar la situación.