El costo promedio de la matricula en una universidad prestigiosa es aproximadamente de cincuenta mil dólares por semestre. Para una familia pobre, esa factura es prohibida.
Pero, aunque no aparezca en la página frontal de ningún diario, lo cierto es que las universidades “de los ricos” están más dispuestas que cualquier otra a ofrecer una beca completa para costear la matrícula de estudiantes que se encuentran en una situación financiera desventajosa.
La falta de representación de este tipo de estudiantes en esas universidades es alarmante: “apenas 3% de los estudiantes en estos centros de educación superior provienen de familias de bajos recursos,” dijo Rick Cruz, quien es el asistente del superintendente en el distrito escolar independiente de la ciudad de Houston, (Texas) conocido por sus siglas en inglés como HISD.
Para remediar la falta de acceso a una educación costosa, en los Estados Unidos, sin tener pagar la factura en efectivo, Rick creó en 2010 un programa llamado EMERGE. EMERGE es una hermandad de educadores y líderes comunitarios que comparten la visión y el propósito de enviar una mayor cantidad de chicos (as) de bajos recursos a las universidades con mejor reputación en la nación.
De hecho, Rick y su grupo ya han logrado que sus alumnos sean aceptados, con todos los gastos académicos cubiertos, en Harvard, Yale, Rice, Dartmouth, Tufts y MIT, lo cual es especialmente significativo si tomamos en cuenta que el 100% de estos estudiantes provienen de hogares donde los padres son pobres y nunca completaron una carrera universitaria. Además, 90% de estos estudiantes son los primeros en toda su escuela en ser admitidos en una universidad de alto calibre. ¿Y cómo ha logrado esto el equipo de EMERGE? Pues, a través de un proceso largo y meticuloso que se inicia tan pronto los estudiantes entran en la preparatoria.
Antes que nada, a cada candidato se le asigna un mentor, quien, a su vez, es egresado de una de las universidades en cuestión, y por lo tanto entienden qué es lo que hay que hacer para ser aceptado en una de ellas. Luego, se les proporciona a estos jóvenes la promesa de una ayuda financiera necesaria con el fin de que puedan pagar por actividades extra curriculares tales como estudios avanzados durante el verano y después de las horas escolares. Adicionalmente, a esto se le suman intensos talleres de liderazgo, de preparación para pasar los exámenes más rigurosos y clases sobre, dónde y cómo encontrar becas completas.
También se les ofrece asistencia personalizada para diseñar y ejecutar un plan sistemático para alcanzar las metas que los candidatos se han propuesto, así mismo se les brinda apoyo para llenar las solicitudes y se les lleva de visita a un campus (…) No es extraño que esa visita a Harvard o Yale sea la primera excursión fuera, no solo de Houston, sino del barrio, en que la mayoría de esos jóvenes han pasado su vida,” explicó Cruz.
EMERGE se propone enviar 800 estudiantes en el transcurso de los próximos cuatro años a las mejores universidades de América. ¡En hora buena, Houston! A ver si a nosotros se nos ocurre unir esfuerzos para crear algo tan poderoso y cohesivo por aquí.